• Las torres se ubicarían a menos de 100 metros de poblados en Villa Santa Elisa, en la localidad del Elqui, tal como se ve en la foto
  • Otro habitante de Villa Santa Elisa, Ildefonso González, muestra su sorpresa al saber que las torres se emplazarían tan cerca de su casa, y aún más al enterarse de los daños que la alta tensión puede generar en la salud.
  • La presidente de la Junta de Vecinos de Santa Elisa, Viviana Tapia, es enfática en rechazar el proyecto. “Una cosa es avanzar hacia el desarrollo, pero no por eso se va a pasar a llevar la calidad de vida de las personas que viven aquí”, indicó a diario El Día.
  • Jaime Cam, también habitante de Santa Elisa, tampoco sabía que las torres estarían a menos de 100 metros de su terreno. Él se encuentra ampliando su casa para pasar los próximos años en el lugar.
  • Codepue no se opone al proyecto eléctrico, sólo propone cambiar el trazado para que las torres no pasen por poblados en la región de Coquimbo.
Crédito fotografía: 
Janina Guerrero
En un recorrido por villorrios de localidades de la cuarta región, —en donde se instalarían más de 100 torres de alta tensión de 70 metros de alto—, diario El Día identificó numerosos casos de familias, cuyas casas se encuentran a menos de 100 metros de donde se ubicarían las torres. Esto traería efectos nocivos en la salud de las personas, además de la contaminación visual y acústica que generarían las instalaciones.

La semana pasada el ministro de Energía, Andrés Rebolledo, visitó la región en el marco de la inauguración del décimo primero parque eólico en Coquimbo.

Durante la cita, el titular de la cartera se refirió al proyecto eléctrico Cardones Polpaico, de la empresa Interchile, que consiste en una línea de transmisión eléctrica de alto voltaje desde Antofagasta hasta la Región Metropolitana, pasando por la región de Coquimbo (donde se instalarían más de 100 torres de alta tensión a lo largo de localidades del Elqui), en 500 kV y doble circuito, junto a las subestaciones que permitirían modificar el nivel de tensión necesaria para su interconexión al Sistema Interconectado Central (SIC).

Sin embargo, y desde los inicios de la introducción del proyecto en el país hace ya tres años, el Comité de Defensores de Pueblos de Elqui, Codepue, se ha manifestado en contra del trazado de la carretera eléctrica que contempla la instalación de 750 kilómetros de torres de alta tensión.

La principal crítica que hacen del proyecto es la poca y nula investigación social que impulsó Interchile antes de participar de la licitación eléctrica.

“En el mapa de trazado eléctrico, hay pueblos que se obviaron como si no existiesen. De hecho sabemos que con el actual plano, habría torres de alta tensión que se ubicarían a pocos metros de poblados, de casas habitadas. Es algo tremendamente peligroso”, explica Ramón Gálvez, presidente de Codepue.

Como respuesta a la posición del comité, Rebolledo comentó que “se trata de un proyecto de envergadura para el sector eléctrico nacional que viene a robustecer un área que hoy para Chile aún sigue siendo un desafío, que es la transmisión eléctrica”.

Frente a la posibilidad que plantean desde el comité de cambiar el trazado eléctrico, el ministro aseguró que Cardones Polpaico cuenta con una Resolución de Calificación Ambiental positiva, con los permisos necesarios y que la empresa ya se encuentra trabajando en exploraciones en terreno.

“El proyecto ya está en construcción hoy, y al menos hoy, no está planteado a nivel oficial un posible cambio de trazado”, dijo.

LOS ALCANCES EN TERRENO DEL TRAZADO

Con todo, desde el Comité de Defensa de los Pueblos del Elqui refutan los dichos de la autoridad. En este sentido, la vicepresidente de Codepue, Alejandra Olivares, señaló que no está de acuerdo con la definición de autosustentable del proyecto Cardones Polpaico por parte del ministerio de Energía.

“Desde la mirada ecológica, auto sustentabilidad tiene que ver no sólo con que se pueda mantener por sí solo el sistema, sino que también que no genere daños en el entorno y medioambiente. Y nosotros como Codepue llevamos bastante tiempo dando a conocer todos los daños que este proyecto provoca tanto en la salud humana, como en el crecimiento del ecosistema aledaño”, dijo la dirigente a diario El Día.

Por otro lado, agregó, “me parece poco serio que el actual ministro de Energía plantee que la cartera no ha recibido solicitudes de nuestra parte por la propuesta del cambio de trazado, cuando hace dos años y medio fuimos recibidos por el anterior ministro para hablar sobre este tema, momento en que hubo un compromiso de generar un informe para avanzar en nuestra propuesta, algo que aún no ha llegado”.

En esta misma línea, Gálvez agregó que si bien el ministro dice que el proyecto está aprobado, omite el que la Comisión Investigadora del Proyecto Cardones Polpaico formada en la Cámara de Diputados, se votó con mayoría absoluta en contra de ese proyecto con 102 votos, y sólo tres abstenciones al constatar los numerosos vicios, ilegalidades y errores de los estudios ambientales y procesos de participación ciudadana, en que se basa este proyecto.

“La ciudadanía debe estar informada que aún existe un juicio en el Segundo Tribunal Ambiental de la República de Chile, en contra de la aprobación ambiental del proyecto Cardones Polpaico por las mismas razones señaladas. Varias comunas han manifestado en esta y otras instancias su oposición a un proyecto que está siendo impuesto y jamás consultado con los habitantes afectados y con la ciudadanía en general”, explicó el presidente de Codepue.

LAS REACCIONES DE LOS HABITANTES DEL ELQUI

Al recorrer con mapa y GPS en mano algunos poblados del Elqui, es posible identificar las posiciones exactas en donde se instalarían las torres de alta tensión en el lugar.

Así, según las ubicaciones arrojadas por el sistema de ubicación satelital y de acuerdo al plano que propone Interchile (por donde pasaría el trazado en la IV región), una de las torres por ejemplo, se ubicaría a menos de 50 metros de la Villa Santa Elisa, a menos de 20 kilómetros de La Serena hacia la cordillera. (Ver fotos).

Aquí, la presidente de la Junta de Vecinos de Santa Elisa, Viviana Tapia, es enfática en rechazar el proyecto.

“En este sector nosotros queremos seguir conservando la naturalidad del lugar. Una cosa es avanzar hacia el desarrollo, pero no por eso se va a pasar a llevar la calidad de vida de las personas que viven aquí, la naturaleza y lo que le vamos a dejar a nuestros hijos”, indicó a diario El Día, y agregó que según estudios que ellos mismos hicieron, pudieron constatar que tanto la salud de los niños como de los adultos mayores y en general de todos los habitantes de Santa Elisa se va a ver tremendamente afectados por la instalación de estas torres.

“La pena más grande es que nos tienen por gente ignorante o analfabeta, cuando en estas localidades no queda nada de rural, nada de esas personas de antaño que no tenían educación. Hoy el panorama es distinto, nuestros propios hijos que hoy son ingenieros, doctores, son los que han puesto énfasis en el tema, entregando la pauta de que este proyecto no va a ser nada más que perjudicar nuestras localidades”, señaló.

Otro habitante de Villa Santa Elisa, Ildefonso González, muestra su sorpresa al saber que las torres se emplazarían tan cerca de su casa, y aún más al enterarse de los daños que la alta tensión puede generar en la salud.

“No sabíamos que están llevando adelante un proyecto eléctrico. Deberían buscar otros accesos, aquí hay muchos cerros que están alejados de los poblados, ¿por qué no tirar el cableado por ahí?”, dijo González, quien comenta que a sus 19 años, trabajó en la instalación de las torres de minera El Indio.

“Ese trazado fue diseñado a puro cerro, no se pasó por ningún villorrio y en mi opinión eso deberían hacer acá también, incluso seguir el mismo trazado, y no pasar por las localidades. Sobre todo hoy, que existen más avances para estudiar los impactos que tienen estas torres en los poblados, ¿por qué no hacerlo bien?”, opinó.

A su visión se suma don Jaime Cam, también habitante de Santa Elisa, quien además de no saber que las torres estarían a menos de 100 metros de su terreno, se encuentra ampliando su casa para pasar los próximos años en el lugar. “No tenía idea de las torres. Es cierto que hay que cosas que son necesarias para el progreso del país, pero es inconducente que proyectos así mermen la vida de las comunidades rurales como nosotros”.

PROPIETARIOS EN FUNDO LORETO TAMBIÉN SE VEN AFECTADOS

Jorge Marambio es otro de los afectados por el proyecto eléctrico Cardones Polpaico, habitante de la localidad de Los Nogales en el fundo Loreto.

“Somos unas 70 parcelas que estamos con el problema de que pasan las torres de alta tensión por nuestro sector. Uno de los grandes problemas va a ser la contaminación visual, y otro es el devalúo que tendrán nuestros terrenos después de la instalación de las torres. El gran problema es que todos los que vivimos acá, lo hacemos en nuestra primera vivienda, no se trata de casas de campo, por lo tanto estaremos constantemente sometidos a los problemas que genera la tensión eléctrica”, explicó Marambio.

El comunero, parte activa también de Codepue, señaló a diario El Día que en Europa por ejemplo, se establece que estas torres deben estar mínimo, a 900 metros del radio de construcción de una localidad, ya que producen electro estrés, esto genera aumento de la presión sanguínea, arterial, dolor de cabeza, está comprobando que produce cáncer, por lo tanto se trata de una preocupación mayor.

“Acá, tendremos torres a 50 metros, por lo tanto la contaminación incluso acústica que tendremos será enorme, pues estas construcciones emiten un zumbido bastante sonoro, más aun en un sector rural donde hay silencio y el ruido se transmite mucho más rápido”, enfatizó.

Actualmente, señaló Marambio, los habitantes afectados dicen encontrarse totalmente desvalidos e ignorados por parte de las autoridades. “Ya no sabemos qué hacer para intentar cambiar el trazado. Apoyo, hemos tenido nulo. Sobre todo teniendo en cuenta que nuestro objetivo no es pararr el proyecto eléctrico, sino que se cambie el trazado por un lugar que provoque menos riesgo a las comunidades”, dijo.

No se oponen al proyecto, sólo buscan cambiar el trazado

Con todo, la postura de Codepue es clara: no se oponen al aumenta de la potencia de transmisión de energía eléctrica, sino que al trazado. “No podemos aceptar que la ciudadanía no sea escuchada y que se pase a llevar afectando su calidad de vida y nivel de salud”, han comentado desde el comité.

Ramón Gálvez ha explicado que el cambio de trazado sólo costaría el 2% del valor total del proyecto, y opina que “el actual ministro no ha defendido a los ciudadanos, sino que sólo un proyecto absolutamente privado que no tiene aprobación ciudadana”

La empresa habría comenzado a explorar los alrededores

Si bien la iniciativa se encuentra aprobada desde el punto de vista administrativo por la Subsecretaría de Electricidad y Combustible (SEC) por Decreto Supremo, aún faltan autorizaciones ambientales que visar, explican desde la Clínica de Justicia Ambiental de la Universidad Diego Portales, (UDP). Sin embargo, la empresa ya ha comenzado las exploraciones, según los mismos habitantes de las localidades del Elqui.

“Si bien el proyecto está aprobado por la SEC y esto otorga ciertas autorizaciones para hacer diagnósticos técnicos en terreno para futuras instalaciones, no significa que la empresa tenga autorización para irrumpir en terrenos privados. Los derechos que tiene la firma no pueden ir en contra de la ley o los derechos de las personas, especialmente los garantizados por la constitución como es el derecho de propiedad.”, explicaron desde la UDP.

 

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