Rubro gastronómico local apoya modificaciones al Plan Paso a Paso para poder operar

“A nombre de la Asociación Chilena de Gastronomía (Achiga), que representa a la industria gastronómica del país, nos dirigimos a usted nuevamente para expresar la incertidumbre y preocupación por el actual estado del rubro y su futuro”. Así comienza la carta que durante la jornada de ayer enviaron desde el gremio a los ministros de Salud y Hacienda, y al propio Presidente Sebastián Piñera. 

Y es que la situación económica de los locales de este sector ya es más que delicada, puesto que según los datos del gremio, el rubro ha perdido el 50% de los empleos y se han cerrado aproximadamente el 30% de establecimientos a nivel nacional. El último caso fue la puesta en venta del reconocido restaurante El Hoyo, ubicado en Santiago, y con casi 120 años de historia. 

Para peor, el fantasma de retroceder a una nueva cuarentena se mantiene flotando en el aire debido al alto nivel de contagios por coronavirus, el cual sigue pese al avance del proceso de vacunación. 

“La última cena”

Hace unos días atrás, locales gastronómicos de todo Chile, incluyendo los de la región, se sumaron a una manifestación denominada como “La Última Cena”, en donde los establecimientos cubrieron sus mesas con manteles negros, como una forma de dar demostrar ante las autoridades, la difícil situación económica por la que están pasando. 

María Antonieta Zúñiga, gerenta de la Agrupación Barrio del Mar, explica que a lo largo de esta crisis, y ante la desesperación que mantiene el sector turístico y gastronómico, “se han llevado a cabo diversas intervenciones para manifestar la preocupación de lo que significa sacar adelante sus negocios con tantas restricciones, incluso a veces algunas solo orientadas al rubro como lo fue un toque de queda diferenciado, lo cual nos parece tremendamente arbitrario”.

En efecto, a juicio del gremio, son las numerosas restricciones que hoy impone el Plan Paso a Paso, entre ellas las cuarentenas, la que explican el difícil momento gastronómico. 

La gerenta de Barrio del Mar apuntó justamente a eso: “cada cuarentena nos limita que la atención al paso o delivery, hacen caer drásticamente las ventas que no alcanzan ni el 20% de las ventas con atención directa de público, aún con las restricciones que impone la Fase 2”, sostiene. “Sabemos que muchas personas cuentan con nuestra atención y además necesitamos aprovechar cada día para trabajar, a fin de poder cubrir las deudas y compromisos adquiridos con nuestros colaboradores, proveedores y la banca”, agregó. 

En ese sentido, Ricardo Álvarez, propietario del local Terrazas O2, señaló que los confinamientos son medidas que los complican enormemente, pues “la mercadería queda ahí, sin uso. Además, tenemos a nuestros trabajadores con quienes debemos organizarnos, y por último, las ventas, que bajan a un 20 o a un 10%, pues el delivery es muy bajo”. 

La petición del gremio

En la carta que Achiga envió a las autoridades del Ejecutivo, sostienen que la industria “ha cumplido con las normas y protocolos establecidos, así como también ha acatado los cierres impuestos por la autoridad”, estableciendo estrictos protocolos en torno a los reglamentos sanitarios aplicados en cuanto a la atención a público como en la inocuidad de los alimentos.

Junto con la estigmatización que ellos sienten ha caído sobre el sector, lamentan que las ayudas que ha dispuesto el Gobierno para auxiliar al sector “no han llegado a la industria de la forma esperada”, siendo las medianas, pequeñas y microempresas las más afectadas con la paralización del sector. 

En ese sentido, el gremio afirma que es “absolutamente necesario buscar una solución para el sector. Por ello, solicitamos una vez más que en el corto plazo nos dejen abrir a público en condiciones que permitan una reapertura económicamente viable. Seguir cerrados y sin apoyo directo es definitivamente un escenario totalmente desolador”, se lee en la carta. 

Desde el gremio por tanto, solicitaron reunirse con el Gobierno para estudiar aquellas alternativas que sean más viables para permitir la pronta reactivación del sector, de manera segura “y que vayan en directa relación con la política de vacunación adoptada por la autoridad”. 

Por lo mismo, manifestaron su apoyo a la creación de un documento “que valide esta opción sanitaria” ya que a su juicio, permitiría avanzar en la reactivación en el corto plazo de la economía.

Fin a las cuarentenas

Desde el mundo político en tanto, algunos de sus representantes se han cuadrado con esta necesidad, siendo la UDI la que ha pedido formalmente el término de las cuarentenas y el toque de queda.

Al respecto, el diputado Juan Manuel Fuenzalida manifestó que “ya es hora de salir de esta tendencia en que subimos de fase, bajamos de fase, pero si hay que poner una cuarentena, que sea una sola y que sea para todos, y no seguir con esta situación, que no solamente afecta desde un punto de vista económico como lo hemos visto con las pymes que están ahogadísimas, sino también desde un punto de vista psicológico”. 

Para el parlamentario, hoy se dan dos condiciones que permitirían avanzar en esta dirección: la alta cobertura de vacunación y la “conciencia” que ha adquirido la población términos de autocuidado. “Tenemos mucha gente que lo está pasando mal y que ya no resiste esta situación, y por lo tanto, creemos que, como en otras experiencias en el mundo donde se ha ido abriendo el tema, sin perjuicio de que se pueda establecer una cuarentena, esta tenga un tope, y no sigamos con esta situación en donde andamos cambiando de fases recurrentemente”, agregó.