Señor director:
Estudio en un liceo municipal de Villa Alemana. En unos pocos meses más cumpliré mi mayoría de edad y con ello, pasaré a ser una ciudadana más de este país.
Siempre he querido ejercer mi voluntad, derecho de votar, porque con esta acción se puede contribuir al cambio que se necesita que permita cubrir los requerimientos de la mayoría de los chilenos.
Sin embargo, observando las noticias, he notado que no hay partido político, ni persona que me represente. Siento la decepción de estar en un país donde existe tanta contradicción, tanta mentira y engaño descarado. Lo único que es capaz de mover a la clase política es el dinero, el poder o el poder del dinero. Notar que las personas que nos lideran dicen preocuparse de la mayoría cuando en realidad solo velan por los intereses de unos pocos.
Pertenezco a una generación que no está ciega, y que mantiene sus oídos bien atentos ante cualquier información.
Aún así, existe la esperanza de que llegue un “cualquiera” honrado y honesto cuya única y final intención, sea servir a la comunidad y no servirse de ella.
Paulina Delia Bugueño Saldivia
Estudiante del Liceo Bicentenario “Mary Graham”