El día 30 de Diciembre 2016 regresé desde Argentina por el paso fronterizo Aguas Negras y la experiencia de lo ocurrido necesito hacerlo de público conocimiento porque hay temas que el país debe poner atención.
Soporté el drama de 6 horas y algunos minutos más, en el control aduanero,(desde las 11:55 am hasta las 18:12 pm) entre esperar turno de atención, chequeo migración y revisión SAG. La columna de vehículo se extendía hasta más de tres kilómetros desde la barrera de control de carabineros hacia argentina; el acceso inmediato a las filas de inicio de trámites, pasado la barrera de carabineros, totalmente colmada; y que decir del interior del recinto, que era lo único cubierto para resguardarse del cálido sol.
Deseo reflejar un contraste, la parsimonia de los funcionarios PDI,Aduana y SAG, incólumes, algunos desafiantes a la angustiosa espera de nosotros los pasajeros, especialmente el de Aduana; otros simplemente cumpliendo su tarea sin percatarse que la masiva presencia de usuarios, en el exterior del complejo, se extendía por kilómetros (y claro si no hay un sistema de alerta que avise sobre esto) ; y en contraste, no cualquier usuario, la inmensa mayoría argentinos, eran recibidos con indiferencia, con indignidad en el sentido de reprobable conducta de funcionarios chileno, que no les importa hacerlos esperar y sufrir fatigosa espera; con sentido de superioridad o presumiendo autoridad y no actitud de servicio (esto nulo, parecen escogidos para este rol), les brota por la piel la premisa que domina en la toma de sus decisiones y comportamiento, …..elvisitante es el malo, trae el contagio de enfermedades a Chile, atajar eso, es lo prioritario y para eso todo vale (mosca de la fruta, ZiKa, Ebola, mal de vacas locas , fiebre aviar, etc.)
Al decir del poco criterioso coordinador del paso fronterizo de turno en esa fecha, “para eso hemos invertido 4 millones de dólares para atajar a la mosca de la fruta”, dicho en respuesta a mi legítimo derecho a criticar este trato¸ y alzó la voz con soberbia, solo al percatarse que era chileno. Es decir, estaba muy consciente este tipo, que estaba abusando de ciudadanos trasandinos. Quienes están impedidos de protestar por esta actuación indecorosa. Yo también interpreto ese silencioso malestar.
Instalar un scanner para todo pasajero y sus bultos, no está en discusión, pero NO se adaptó la infraestrutura y distribución logística de migración y aduana a esta lógica (no están en una línea), cuando son menos de 800 personas por día, el tiempo varia de 30 a 45 minutos, y pudieran ser 20 minutos/ vehículo; en mi caso fueron alrededor de tres mil personas para su horario desde 08:00 am hasta las 17:30 pm (horario alargado para atender los pasajeros que hasta esa hora cruzaron el limite argentino); ahí, radica la causa de la demora de más de 6 horas para trámites en el paso fronterizo.
Este es un intento de describir, como se creó conscientemente un cuello de botella, argumentando que los eventos masivos son ocasionales; falso, espurio, porque no se invirtió para esta condición sino para el paso por túnel abierto permanentemente y los flujos que validan esa opción son masivos.
Tampoco podría obviar una peligrosa acción de este coordinador del paso fronterizo Aguas Negras, que no vaciló en entregar la clave de internet del complejo fronterizo, a una turista argentina ante su angustiosa necesidad de avisar a su familia porque tardaba en arribar a su destino; en menos de 15 minutos estábamos todos conectados, y probablemente eso aun este sucediendo. Acto de compensación o estupidez funcionaria?
Critico que un paso fronterizo, un rostro de Chile, merecería estar mejor representado y dar un trato más digno a nuestros visitantes.
Podría aun seguir argumentando las ventajas que implica una conectividad positiva, el impacto económico para la región de Coquimbo del turismo vacacional de nuestro vecinos en nuestras playas, etc. Hoy pasados algunos días de este nuevo año, nuevamente este episodio vuelve a reaparecer, y nuestro gobierno regional, consejeros y parlamentarios no se inmutan, solo se contentan de ver en la ciudad, la circulación de muchos vehículos con placa extranjera.
Ing. Agr. Anjel Rodas P.
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