Señor Director:Hace unas semanas, el presidente Sebastián Piñera anunció algunos cambios a corto plazo relacionados a la política migratoria y, a través de los cuales, impulsados por la nueva ley de migración, se buscará regular el ingreso de haitianos y venezolanos, entre otros, al país. Según las cifras que maneja el Gobierno, el año pasado el número de inmigrantes casi superó el millón de personas (5,5% de la población). Por lo que se estima que cerca de 300 mil extranjeros, en su mayoría haitianos, viven en el país sin la legalidad que se necesita. El plan que busca regularizar esta situación se basa principalmente en eliminar la posibilidad de que inmigrantes puedan solicitar una visa temporaria por motivos laborales. ¿La razón? Muchos haitianos entran con estos permisos y una vez vencidos los papeles, se quedan de forma ilegal en nuestro país, viviendo de forma precaria.¿Será la mejor solución posible restringir el tema de las visas temporarias para así evitar que los extranjeros vivan de forma ilegal en el país?Esta solución quizás regularice en alguna medida y controle a quienes se mantienen en Chile con los papeles vencidos, pero va a traer consecuencias negativas y múltiples problemas a la hora de negar la entrada al país a quienes no alcanzaron a hacer los trámites correspondientes y ya vienen en camino. De hecho, hay muchos haitianos que con esfuerzo compraron pasajes anticipados para llegar a nuestro país y ahora con esta actualización de la ley se les va a negar el acceso a Chile. ¿En qué nos estamos convirtiendo? Estamos negando la migración, que es un derecho y no nos estamos enfocando realmente en solucionar de forma correcta el problema de regularizar a quienes se quedan de forma ilegal en nuestro país sin los papeles al día.Al parecer, las soluciones cortoplacistas impuestas por el Gobierno no son tan completas como parecen serlo.
Tomás Varela NahmíasEstudiante de Ingeniería ComercialUniversidad Adolfo Ibáñez