Quiero dirigirme a usted para tratar un tema que quizás no ha logrado la relevancia en la región como para que el tema se hiciera conocido. En el sector de “El Durazno”, comuna de Combarbala, IV región, se creó un proyecto sobre la construcción de un embalse en el rio Cogotí, el cual está siendo respaldado por la presidenta de la república, Michelle Bachelet y ministro de obras públicas, Alberto Undurraga Vicuña, lo que no se toma en cuenta es el impacto medio ambiental que provocaría dicha construcción del embalse, el cual terminaría por acabar con la flora y la fauna de un pulmón verde del rio Cogotí. En mi opinión, en vez de dejar que nos quiten los espacios en donde se puede apreciar de la fauna y la flora silvestre de nuestra zona, además de encontrarse en ese sector petroglifos y cementerios indígenas, que desaparecerían con el emplazamiento de dicho embalse, deberían dejar de destruir nuestra cultura y empezar a cuidarla y apreciarla, es cierto que esto beneficiaría a los regantes de Combarbala, pero otros también se verán afectados, ya que deberán dejar sus tierras, que en algunos casos llevan habitando varias generaciones. Es cierto que este embalse mejoraría la calidad de vida de las personas y la productividad agrícola del país, pero a que costo, hasta cuando seguiremos destruyendo nuestra tierra, o “vendiéndola” a los extranjeros para que sigan llenándose los bolsillos de riquezas mientras la situación del país no mejora. ¿Es esto la mejor manera de mejorar la calidad de vida de las personas? No lo creo, porque una mejora de la calidad de salud sería un mejor sistema de salud para todos, donde no se tenga que esperar horas para ser atendido, y que la salud de calidad no sea solo para aquellos que puedan pagarla, sino, para todos, porque todos somos vulnerables a una enfermedad, así que no creo que ese argumento para llevar a cabo la construcción sea el más adecuado a mi opinión porque hay mejores maneras de mejorar la calidad de vida.
Renzo Nicolás Benjamín Jamett Vega