Señor Director:
Estamos cerca de cumplir un mes desde que comenzó este 2020 y vemos como, días tras días, continuan los actos de violencia contra Carabineros y Policía de Ivestigaciones en las diferentes comunas del país. Para nadie es un secreto, que a partir de marzo las movilizaciones sociales se agudizarán y junto con ellas el nivel de violencia evidenciado hoy en los principales espacios públicos de Chile. Sin embargo, estando nuestro país frente a esta coyuntura, en la que la institucionalidad parece atrofiarse y sustraerse en el restablecimientos del orden público, nos hemos preguntado: ¿Cuál es la realidad de nuestros funcionarios policiales?...
Ataques verbales -matinee, vermouth y noche-, ataques incendiarios contra funcionarios, vehículos y comisarías parecen ser hoy normales... Y alguien se ha preguntado si estos seres humanos (demonizados por los violentistas y medios de comunicación), ¿Poseen los recursos adecuados y necesarios para que puedan desempeñar sus funciones correctamente sin exponer sus vidas constantemente? Yo creo que no !
Tal vez, tendremos que sufrir una nueva tragedia, con martires innecesarios, para que las autoridades fiscalicen correctamente las tantas carencias de nuestras polícias. Muchos (as) olvidan que detrás de un uniforme o placa identificatoria, existe un ser humano; un ciudadano, con los mismos derechos de aquellos que atentan contra la integridad fisica y psiquica de nuestras polícias... Ahora me pregunto: ¿Quién tomará cartas en el asunto? La respuesta, tal como la presencia de la autoridad política en este tema, me parece difusa...
