El complejo inicio de año del Gobierno

El inicio de año ha sido complejo para el Gobierno. La segunda semana de enero estuvo marcada por las interpelaciones a los ministros del Trabajo, María José Zaldívar, de Salud, Jaime Mañalich y de Hacienda, Ignacio Briones.

Según los propios parlamentarios, son cerca de 174 horas las que se han utilizado para abordar las acusaciones constitucionales e interpelaciones a secretarios de Estado. La crítica del Ejecutivo radica en que este tiempo equivale a 4 sesiones del Congreso, instancias donde se podría haber trabajado en la agenda que propuso el presidente Sebastián Piñera.

Así también lo comentó el vocero de Gobierno de la Región de Coquimbo, Ignacio Pinto, quien además comentó que el tema es preocupante, ya que en menos de 15 días se han dado cuatro interpelaciones a ministros y la oposición ya anunció que harán otras dos contra Isabel Plá y Marcela Cubillos.

“Siempre vamos a ver estas instancias como oportunidades para mostrar los avances que tenemos y cómo vamos haciendo mejor las cosas. Pero vemos con preocupación la cantidad de tiempo que se invierte en interpelaciones o acusaciones, porque son periodos en que se deja de lado temas como la agenda social o la sequía, urgencias que nos pone la ciudadanía. Pareciera que hay un ánimo de obstaculizar o demorar la discusión de las iniciativas que está impulsando el Gobierno”, expresó.

La autoridad afirmó que, a pesar de la actitud que ha adoptado la oposición, el Ejecutivo seguirá trabajando. De hecho, manifestó que existe una buena evaluación del avance que ha tenido la Agenda Social, como el proyecto para asegurar un mejor acceso y calidad de atención a través de Fonasa, el aumento de la Pensión Básica Solidaria y Aporte Previsional Solidario, o la promulgación de la Ley de Intermediación de CENABAST para que farmacias y almacenes farmacéuticos accedan a medicamentos a precios más bajos.

Postura del Gobierno frente al proceso constituyente

El plebiscito de abril ha acaparado las miradas de todos los actores, incluso en la propia coalición de Gobierno el tema despertó algunas diferencias. La postura de rechazo manifestada por algunos militantes de las colectividades oficialistas hacia el plebiscito del próximo 26 de abril, ha causado tensión y el Gobierno no ha quedado ajeno a este clima. 

“Nosotros respetamos todas y cada una de las posturas que tiene nuestro conglomerado, pero el Presidente Sebastián Piñera lo ha dicho claramente, como Gobierno tenemos el deber de ser garantes de este proceso, para que sea transparente y se puedan expresar todas las opiniones. Todos estamos de acuerdo en que debe haber cambios, lo que queremos determinar es el mecanismo para ello, si es a través de una nueva Constitución o a través de reformas a la carta que ya tenemos. Por eso, nuestra gran tarea, es incentivar la participación ciudadana, que la voz de la mayoría se escuche”, agregó.

Funa a la intendenta

El martes pasado durante la presentación del plan que ejecutará el Minvu para recuperar espacios públicos que fueron dañados por las manifestaciones en La Serena, Coquimbo y Ovalle, unas seis personas interrumpieron la actividad para “funar” la actividad, que era encabezada por la Intendenta Lucía Pinto.

Para algunos, que el anuncio se realizara en la Plaza de Las Américas en Coquimbo fue un error y una exposición innecesaria de la autoridad. Sin embargo, el seremi Pinto desechó este planteamiento y fue firme al señalar que el accionar de Gobierno no se detendrá por estos grupos minoritarios.

“Si estas personas creen que van a inmovilizarnos están equivocados. Sabemos que son muchas más las que quieren los cambios, que el Gobierno esté con ellos en terreno y dialogando sobre sus necesidades y, en este caso, la intendenta estaba hablando de la recuperación de los espacios públicos, que nos pertenecen a todos. Mantendremos las actividades, no vamos a dejar que nos amedrenten, la agenda y nuestro trabajo no se detendrá”, concluyó.