Un antes y un después. Esa es la premisa que pretende instalar el Instituto de Investigaciones Agropecuarias, INIA Intihuasi, con la implementación de un robusto programa que podría aumentar hasta en un 30% -preliminarmente- la producción de limones para los pequeños agricultores de Punitaqui.
En una actividad desarrollada en la localidad de Ajial de Quiles que contó con la presencia de vecinos, agricultores, investigadores y autoridades, se dio a conocer que más de 50 productores participarán y gestionarán una herramienta de asociatividad para fortalecer su negocio, mejorar sus sistemas productivos, corregir problemas derivados de la escasez hídrica y disminuir las brechas tecnológicas. Esto, después de adquirir protocolos de riego, uso de suelo, fertilización, poda, pos cosecha, además de mejorar su oferta comercial con productos de mayor valor agregado.
“Llevaremos la ciencia, la tecnología y los manejos agronómicos al secano de Punitaqui, de manera que los agricultores cultiven limones de alta calidad”. Edgardo Díaz, director de INIA Intihuasi.
MÁS DE $100 MILLONES PARA AGREGAR VALOR A LA PRODUCCIÓN
El costo del proyecto asciende a los $107 millones y será supervisado y monitoreado por profesionales de INIA Intihuasi. El propósito también incluye reducir deficiencias en la comercialización para acceder a nuevos compradores y obtener mayor margen en el Mercado de Ovalle, principal destino de los limones cosechados en la “Tierra de Los Molinos”.
“Se ha descubierto que hay rindes que aún no llegan a lo óptimo. Estamos cerca de 14 toneladas por hectáreas, cuando estamos hablando que pueden ser 70 u 80”, dice el Gobernador de Limarí, Darío Molina, quien también preside la Mesa Territorial del Programa de Zonas Rezagadas, modelo de gestión pública que aportó los fondos para concretar la iniciativa.
Macarena Ibarra, agricultora de limones del sector de Ajial de Quiles puntualizó que las deficiencias pasan por no contar con riego tecnificado y carecer de información agroclimática. En ese sentido, Rafael Toledo, presidente de la Agrupación de Productores de Cítricos comuna de Punitaqui, agregó que “mucha gente que está regando a la antigua, con tasas y hay que economizar agua. Más de la mitad de agua se pierde, y, de a poco, hay que ir enseñándoselo a la gente”.
LAS INICIATIVAS QUE CONTEMPLA EL PROGRAMA
El proyecto pretende implementar dos estaciones meteorológicas de monitoreo, donde se concentren el mayor número de agricultores, para generar información climática, en caso de eventos que afecten sus plantaciones. Además, habrá diez módulos demostrativos, distribuidas en predios de las localidades de Rinconada El Peral, Ajial de Aquiles, La Polvareda y Altar Alto.
El director de INIA Intihuasi, Edgardo Díaz comenta que “llevaremos la ciencia, la tecnología y los manejos agronómicos al secano de Punitaqui, de manera que los agricultores aprovechen las oportunidades para la producción de limones de alta calidad ofrece este entorno“.
Otro objetivo es aprovechar el exceso de producción de limones en invierno, periodo con bajo precio de venta, para generar productos con mayor valor agregado y evitar la pérdida de fruta. Por otro lado, a través de prácticas agronómicas se potenciará la producción en la estación veraniega cuando el valor de producto, junto a la demanda, se eleva.
La investigadora de INIA Intihuasi y ejecutora de la propuesta, Angélica Salvatierra, espera que “en el transcurso de un año, nosotros podamos transmitir, al menos, los aspectos más importantes de estas prácticas agronómicas para que ellos las incorporen en sus campos”.