Un importante descenso de las exportaciones de la región de Coquimbo se registró durante este pasado mes de octubre, según reveló el último informe del Instituto Nacional de Estadísticas, INE, en su último boletín.
En términos numéricos, en octubre de 2019, mes de inicio del estallido social, los envíos regionales al exterior alcanzaron poco más de 230 millones de dólares, representando el 4,1% del total de exportaciones del país. Sin embargo, en la comparación interanual (doce meses) las exportaciones regionales registraron una caída de 45,3% -191 millones de dólares menos- lo que equivale al mayor descenso observado en el año.
Pero no es el único dato, pues hasta octubre la región acumula la suma de 3.091 millones de dólares en volúmenes exportados, disminuyendo en un 4,4% comparado con lo acumulado al mismo mes de 2018.
Por rama de actividad, la actividad minera fue el principal rubro exportador de la región seguido por la actividad silvoagropecuaria, industria y pesca. De esta forma, la minería participó con el 82,1% del total de los envíos, correspondiente a 189,5 millones de dólares.
Ello sin embargo, se tradujo en un descenso en los envíos mineros de un 48,6%, caída que también se pudo observar en el resto de actividades económicas más significativas para la región: silvoagropecuaria (-22,65) e industria (-24,3%). Sólo la pesca presentó un aumento de sus envíos (25,2%), pero su aporte sigue siendo muy pequeño: apenas de 1,5 millones de pesos.
Lo cierto es que el peso de la minería en la economía de la región, influyó decididamente en el desempeño final de las exportaciones locales en el mes de octubre.
Sin puertos
Al respecto, el seremi de Minería, Roberto Vega, explicó que la caída en las exportaciones mineras se debió a los bloqueos que ocurrieron en los principales puertos de embarque mineral durante las primeras semanas del estallido social del 18 de octubre.
“En octubre se produce el estallido y en ese período no hubo embarques. Los primeros barcos se cargaron en noviembre, y eran los que atendían los cargamentos de hierro de CAP. Teck no sacó y Pelambres tampoco tuvo recaladas”, señaló.
En ese sentido, la autoridad afirmó que es necesario esperar el próximo boletín de noviembre, donde espera que las cifras de envíos mineros “vuelvan a tener un saldo positivo. Hubo 15 días que no hubo exportación, no había puerto para poder recalar, y eso nos repercute en los envíos”, reiteró.
Envíos emergentes
No obstante, pese a la contracción que muestran los números, destacan algunos productos como los ostiones, las pasas o las cerezas, que en octubre mostraron una importante alza en sus envíos y que, de seguir una tendencia alcista a futuro, se perfilan como las nuevas exportaciones estrella de la región.
Paola Vásquez, directora regional de ProChile señaló que los ostiones “vuelven a aparecer en el registro, que hasta octubre del presenta año presentaron un incremento del 35%. Rescatable también es lo que ha pasado con las pasas, fruto de la reconversión que tenido el sector de la uva en la región y que ha crecido en un 62% en relación al mismo peridod del año anterior”.
Respecto a las cerezas, la directora de ProChile explica que esta especie “es una gran novedad, una oferta no tradicional de la región de Coquimbo que superó el 2.000% de crecimiento”, lo que permite a su juicio, pensar en una mayor diversificación de la matriz productiva y exportadora de la región a futuro.
Dinamizar la economía
Desde el mundo empresarial en tanto, se insistió en hacer un llamado a realizar todos los esfuerzos posibles para reactivar la economía local y nacional, en donde los grandes proyectos deben cumplir un rol fundamental.
Luis Valdebenito, gerente general de CIDERE, expresó que “frente a la caída de la productividad regional, es el Estado quien debe impulsar las obras públicas necesarias para reactivar la economía. Se deben potenciar los grandes proyectos frenados. ‘Dominga’ y el Túnel de Agua Negra, son dos ejemplos de obras que debieran implementarse, una privada y otra pública. A diferencia de algunos que sostienen que el Estado cuando gasta en obras públicas es gasto, en este caso es inversión. Es tener una mirada estratégica y el rol del Estado puede ser dinamizador de la economía.
En ese sentido, Valdebenito expresa que están en plena reacreditación “del Centro de Certificaciones de CORMINCO, esta vez con la codirección con CIDERE, que posibilita tener una mirada más completa de las necesidades regionales. Así pasamos de una mirada desde la Minería para el Centro de Certificaciones a una mirada más compleja, entendiendo que en CIDERE confluyen empresas de los más diversos rubros”, explicó.
“Para eso”, señala “debemos potenciar el trabajo que se hace desde ProChile y desde la Oficina de atracción de Inversiones de la CRDP, para vincularnos a nuevos mercados que nos permita diversificarnos para disminuir los riesgos ante crisis bilaterales, como es la guerra comercial que libra EEUU y China y que genera profundas consecuencias en nuestra economía”, afirmó.