Crédito fotografía: 
Alejandro Pizarro Ubilla
La grave situación social y económica que viven muchos trabajadores del mar producto de la pandemia y la inestabilidad de su labor, hacen necesario, explican los parlamentarios, llegar con ayuda financiera para su sustento en estos difíciles momentos.

El pasado 13 de julio comenzó oficialmente el pago del Bono Alivio Pyme, ayuda económica implementada por el gobierno, el cual contempla la entrega de un aporte de un millón de pesos para apoyar a las pequeñas y medianas empresas que hayan sufrido disminuciones en sus rentas a causa de la pandemia de coronavirus. 

El proceso de solicitudes comenzó este 2 de julio y se extenderá hasta el 2 de agosto.

En un principio sin embargo, pronto se observó que la entrega de este bono –que pretendía beneficiar a más de 800 mil mipymes del país- quedó corta a raíz de la grave situación económica por la que están pasando diversos sectores productivos. 

A raíz de ello, trabajadores como los feriantes y el gremio de los taxis colectivos fueron incluidos en el beneficio, luego de la petición que algunos parlamentarios hicieron al gobierno en cuanto a avanzar en esa línea. 

No obstante, aún persiste un sector productivo que también ha sido fuertemente golpeado por la crisis sanitaria y que además, ya cargaba sobre sus espaldas otros problemas: la pesca artesanal. 

Un sector abandonado



Herman Godoy, dirigente gremial de los pescadores artesanales de Coquimbo, señaló que la situación del rubro desde que se inició la pandemia “es pésima. Los pescadores a nivel nacional, no hemos recibido gran ayuda, salvo las cajas de víveres, pero esas cajas con suerte duran una semana. Eso es lo que duele, que nos dejen de lado”, comentó. 

En medio de una pandemia que aún no ha finalizado y con largas restricciones que han limitado el desarrollo de actividades productivas, Godoy recordó que la pesca artesanal “no es segura. Hay días en que hay pesca y en otros no. Y además ahora en este tiempo cuando se decreta cierre de puertos por marejadas o hay mal tiempo, ahí queda uno, mirando, sin poder salir a la mar. Y a veces uno tiene que salir a la mala, y si lo pillan lo pillan no más, y si no, no. Pero lamentablemente a veces hay que hacerlo, porque ante la necesidad no hay otra opción”. 

“Así como a última hora, ayudaron a los colectiveros y otros sectores, estamos luchando para que nos ayuden también a nosotros, los pescadores”, agregó. 

Proyecto de resolución



Bajo ese contexto, hace unos días atrás un grupo de diputados de la DC ingresaron un proyecto de resolución que pide incorporar a los pescadores artesanales inscritos en el Registro Pesquero Artesanal (RPA) de la Subsecretaría de Pesca dentro del Bono Pyme, considerando que están en una condición similar a las de quienes trabajan en taxis colectivos, a quienes ya se logró incorporar en este beneficio.

El proyecto de resolución hace referencia a este último beneficio que resulta ser un aporte significativo para muchos emprendimientos y actividades, pero no logra responder a todos los sectores afectados, como los pescadores artesanales.

“Los pescadores artesanales también son pymes, son emprendedores, generan empleos, muchos de ellos han avanzado en formar cooperativas como en Guayacán, están participando directamente en la comercialización de sus productos como los están haciendo los pescadores artesanales de Tongoy con los ostiones. Pero muchos de ellos no cumplen con los requisitos, porque o no tienen iniciación de actividades que exige el Bono Alivio Pyme o no tienen trabajadores contratados. Pero son pymes”, indicó el diputado Matías Walker. 

En ese sentido, el parlamentario señaló que los pescadores merecen ser reconocidos con este bono, “el cual sería fundamental para ellos en estos momentos en que no lo están pasando bien”.

 

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