Si bien la atención de la comunidad regional, incluido visitantes, astrónomos y personeros del mundo científico está en el eclipse total de sol del 2 de julio – que se podrá apreciar en la Región de Coquimbo – también habrá un efecto en la generación de energía en el Sistema Eléctrico Nacional.
La franja donde se observará el eclipse total, es decir, donde se alcanza el 100% de oscuridad, abarcará las Regiones de Atacama y Coquimbo, en dirección sur-oriente, con un ancho de 147 kilómetros y, más precisamente, entre el pueblo de Domeyko por el norte, en Atacama, y la localidad de Guanaqueros por el sur, en Coquimbo.
Mitigación de la pérdida de generación solar
Según el Coordinador Eléctrico Nacional –organismo que dirige el funcionamiento del Sistema Eléctrico del país– desde hace más de 2 meses se ha desplegado una planificación de este evento, para mitigar los efectos de la pérdida de generación solar y mantener la operación segura.
Según el seremi de Energía, Álvaro Herrera, el día del eclipse, se espera que “se produzca una pérdida de 1.150 MW de producción de electricidad solar. Y también habrá un déficit de unos 214 MW de generación distribuida en los hogares, empresas y pequeños medios de generación, disminución que deberá reemplazarse por tecnologías distintas a la solar, básicamente hidráulica y térmica a gas”.
Dicha cifra es el equivalente a la mitad del consumo eléctrico de la Región Metropolitana. Además de la pérdida de generación solar, agregó el seremi, el Coordinador se está preparando para una rápida tasa de reducción de aquello, a través de las reservas suficientes de potencia en centrales convencionales que puedan aumentar en conjunto su generación con la misma rampa y lograr abastecer la demanda eléctrica del país.
No habrá interrupciones del servicio eléctrico
Como la ocurrencia del eclipse será cerca del ocaso, la capacidad de potencia disponible para generar de los parques solares se habrá reducido considerablemente, por lo tanto, no se presentará el problema inverso acontecido en los eclipses que afectaron a Europa y Norteamérica que corresponde al incremento significativo de la generación solar post eclipse.
La autoridad fue enfática en señalar que no ocurrirá ninguna interrupción del servicio programada relacionada con el eclipse. “Se aumentará la generación de centrales convencionales para compensar la pérdida de generación solar, y se dispondrá de la capacidad y reservas suficientes para satisfacer los eventuales requerimientos adicionales”.
El último eclipse solar parcial en Chile fue 2010
El último eclipse solar total visible en Chile fue el 11 de julio de 2010, divisado en su totalidad solamente en la Patagonia, particularmente, cuando no había centrales fotovoltaicas en los sistemas eléctricos. Pero en los últimos años, se han conectado casi 2.500 MW de potencia en energía solar, alcanzando casi el 8% de la generación del año 2019, y cerca del 10% de la energía producida en un día de verano.