ISA InterChile e INIA firman convenio para proteger la flora nativa del centro norte del país

Afectadas gravemente por la sequía y por los procesos de desertificación de las últimas décadas, la zona centro-norte del país, formada por las regiones de Atacama, Coquimbo, Valparaíso y Metropolitana, han sufrido una grave pérdida de su cubierta vegetal original, uno de cuyos efectos, ha sido la desaparición de valiosas especies de plantas, arbustos y árboles nativos, los cuales son fundamentales para conservar el equilibrio de los ecosistemas naturales. 

Así, como una forma de remediar en parte esta pérdida –en la cual, las actividades humanas también tienen mucho que ver – es que este viernes se firmó, a través de un encuentro virtual en vivo por las plataformas digitales de Diario El Día y Diario El Observador de Quillota- , un convenio entre la eléctrica ISA InterChile, y el Instituto de Investigaciones Agropecuarias, INIA, a través de sus direcciones regionales; INIA Intihuasi de la Región de Coquimbo e INIA La Cruz de la Región de Valparaíso.

El eje de este convenio contempla el desarrollo de un programa  – a 5 años plazo – que apunta a la investigación, protección y difusión de la flora nativa del centro-norte del país y considera una inversión directa de la empresa de 1.134 millones de pesos. 

La iniciativa, que nace a partir de los compromisos adquiridos por la resolución de Calificación Ambiental del proyecto de la Línea de Transmisión Cardones-Polpaico –operada por ISA InterChile – busca apoyar en definitiva las actividades de reforestación y preservación del patrimonio natural de los territorios. Ello, a través de tres ejes de acción: 

En primera instancia, a través de fortalecer y desarrollar protocolos para la creación de “viveros comunitarios regionales” para albergar un total de 21 especies vegetales, con el fin de dar origen a unos 100 mil individuos para plantar a partir del año 2022. 

El segundo eje busca incentivar acciones de conservación y resguardo de germoplasma – material genético de las plantas – de aquellas especies que se hallen bajo situación crítica de conservación.

En tercer lugar, se buscará difundir todos ?¡los conocimientos recopilados a través de seminarios, así como a través de otras instancias de capacitación y colaboración con vecinos, comunidades y la propia academia. 

Al respecto, Edgardo Díaz, director de INIA Intihuasi, valoró el trabajo de protección del material vegetal que se ha desarrollado en la Región de Coquimbo a partir de unos los proyectos más destacados en el área: el Banco base de semillas que se ubica en la comuna de Vicuña, el cual además, pertenece a una red de banco de germoplasma a nivel nacional, y que cuenta “con la infraestructura tecnológica necesaria para la conservación de las semillas en el largo plazo”.

“Y cuando hablamos de largo plazo en las conservación de semillas, hablamos de más de 50 años de conservación. Esto se realiza bajo estrictos estándares internacionales y también con protocolos de seguridad que involucran temperaturas bajas, del orden de –18° y una humedad relativa del orden del 15%”, sostuvo. 

Asimismo, destacó el profesionalismo de los especialistas que trabajan en el centro “quienes poseen los conocimientos y la experiencia, y por cierto la pasión, para la conservación de nuestras especies vegetales”.

Por su parte, para Patricio Fuenzalida, director de INIA La Cruz, que si bien, “nosotros no tenemos un campo experimental grande como en Intihuasi, toda nuestra investigación lo hacemos en los predios de los agricultores”.

Por eso dice, “estamos muy confiados en esta relación enriquecedora para nuestra comunidad y el país que hoy día iniciamos con ISA InterChile y esperamos que el día de mañana también puedan generarse otros proyectos similares”.