Locales nocturnos se reinventan para continuar funcionando

El toque de queda y el distanciamiento físico han significado un cambio no solo para la población, que ha debido adaptarse a una vida completamente diurna, sino también para aquellos locales que solían trabajar en las noches, como las discoteques y los pubs.

Por esa razón, una vez que se permitió el retorno de restoranes en noviembre, cuando la región pasó a fase 4 (Apertura Inicial), este tipo de negocios tuvo que reinventarse para continuar funcionando.

EMBLEMÁTICA DISCOTEQUE 

Marcos González, dueño de la discoteque Arcángel, pensó en un inicio que el cierre de su local no duraría más de dos meses, pero el tiempo fue pasando y la situación no mejoraba, lo que era complejo para él, ya que, al ser discoteque debía esperar la fase 5 para poder abrir.

Por esa razón, buscó qué hacer para volver a funcionar y emplear a sus trabajadores y trabajadoras, por lo que se instaló con una cocina y desde hace cerca de dos semanas convirtió la emblemática disco en un resto-bar, con los shows que hacían antiguamente pero ahora durante el día, además de almuerzos, cócteles y la esencia que caracteriza al lugar.

“Nos significó harto esfuerzo, cómo hacerlo, los permisos, lo que teníamos que tener, así que nos reinventamos mientras con menús ejecutivos, carta gourmet y la misma gente que trabajaba está atendiendo”, explicó Marcos, más conocido como Marcos Arcángel. 

PUBS DEL CENTRO

Quienes también tuvieron que cambiar su forma de trabajo fueron los pubs que atendían en el centro de La Serena, los que solían tener como horario de atención las tardes-noches, cerrando pasada las 3 de la mañana.

En Pub La Rocca, uno de sus dueños, Pablo Castro, comentó que debieron adaptarse al nuevo horario de trabajo, debiendo abrir más temprano y cambiando los productos que antes se compartían en grupo por formatos individuales, como el caso de los schops y las chorrillanas. Fortaleciendo su carta de alimentos e implementando nuevos cócteles han podido ampliar su público, el que se ha convertido en uno más familiar que antes.

Hace algunas semanas decidieron ofrecer desayunos abriendo a las 9 de la mañana, lo que les ha favorecido bastante, admite Castro. 

Los ocho meses que estuvieron cerrados los aprovecharon para renovar el lugar y hacer mejoras que en otro contexto no habrían podido hacer. “La gente se adaptó muy bien a la nueva modalidad y horario. Después del estallido social la gente empezó a venir más temprano”, comentó.

UN NUEVO PROYECTO

Mauricio Milla es administrador de restobar “Elqui VIP”, proyecto que emprendió junto a su esposa a fines del 2020, cuando el local que allí estaba ubicado -en la esquina de Eduardo de la Barra con O’Higgins- quebró después del estallido social y funcionaba como pub en las noches, ofreciendo bebestibles y tablas a sus clientes.

Ya tenía experiencia en el rubro alimentario, puesto que anteriormente se dedicaba a los eventos, negocio que no daba frutos desde hace algunos años, motivo por el que decidió arriesgarse con una nueva apuesta y hoy busca posicionarse como la nueva “picada” del centro, apuntando a un público local y no al turismo.

Comienza a operar a partir del mediodía con almuerzos que ofrece en las pocas mesas que tiene en el inmueble y también la opción para llevar. En la tarde continúa ofreciendo aperitivos y cócteles hasta las 21 horas.

Ahora, junto a un grupo de empresarios del sector, buscan que el municipio les permita instalarse en las calles para poder ampliar su oferta, trámite que espera sea aprobado, ya que con el toque de queda y los aforos limitados, las posibilidades de clientela disminuyen y afectan los ingresos.