Crédito fotografía: 
Lautaro Carmona
En el contexto de la discusión por el presupuesto 2022 y la abultada deuda que afecta a la entidad edilicia, el alcalde Alí Manouchehri señaló que estos dineros, correspondientes al contrato de la nueva concesión adjudicado en 2018 y que debió haber entrado en vigor el año 2019, serían depositados el mismo día en que entre a regir –finalmente- este nuevo convenio, es decir, el próximo 7 de enero.

Una deuda que supera los 30 mil millones de pesos es lo que hasta el momento arrastra la Municipalidad de Coquimbo.

Un problema que abruma además en medio de la presentación del presupuesto municipal 2022, el cual asciende a los 68 mil millones de pesos, cifra que se lograría, según explicó el edil durante su presentación ante el concejo municipal, a través de diferentes caminos.

Una de ellas ya es conocida y trajo más de un revuelo al interior de la entidad consistorial y de la comunidad coquimbana: la solicitud de un leaseback –que consideraba en primera instancia al estadio Francisco Sánchez Rumoroso– y el retorno de las platas del casino.

Este último punto es especialmente importante, pues durante casi un año y medio, el municipio de la comuna-puerto no recibió los ingresos requeridos –el 20% de los ingresos netos según el contrato de la concesión vigente– lo que profundizó aún más la crisis financiera de la municipalidad coquimbana.

 

Los antecedentes

Al respecto cabe recordar que en junio de 2018, la Superintendencia de Casinos de Juego otorgó un permiso de operación para el casino de juegos de Coquimbo a la empresa Enjoy, por un periodo de 15 años.

Sin embargo, el contrato de la nueva concesión –que debía haber entrado en vigor en 2019- nunca pudo llegar a aplicarse. Primero, luego de que la empresa de casinos solicitara una prórroga de 9 meses para la ejecución de las obras acordadas del recinto y de 18 meses para las demás obras correspondientes al proyecto integral, lo que fue acogido por la superintendencia del ramo.

No obstante, el estallido social primero, y el inicio de la pandemia del Covid-19 después, evitaron nuevamente que se iniciara la nueva concesión.

Así lo señala el ex administrador municipal, Patricio Reyes, quien sostiene que “si el casino estaba cerrado, nosotros no percibíamos ningún ingreso, y por ende nos vimos muy afectados en las finanzas municipales”.

A esta coyuntura política y social, la Superintendencia de Casinos entregó más prórrogas a Enjoy, lo que generó la molestia de la administración Pereira. “Nosotros de hecho, lo denunciamos en su momento, porque ya no era solamente que no entraran los ingresos del contrato antiguo de la concesión municipal, sino que debido al hecho de que no entrara el nuevo contrato, eran muchos los recursos que no ingresaban al municipio”, asegura.

 

¿Ahora sí?

Tras la última prórroga otorgada por la Superintendencia de Casinos a Enjoy en julio de este año, el plazo de ejecución de las obras del casino se extendió hasta el 7 de enero del próximo año, y de las demás obras del proyecto integral hasta el día 8 de octubre de 2022.

De esta forma, la puesta en vigencia del contrato de la nueva concesión comenzaría a operar el próximo 7 de enero, lo que -de no presentarse nuevas prórrogas– implicaría la llegada de los esperados recursos de Enjoy, los que suman, según el nuevo contrato dos componentes: el pago variable consistente en el 10% de las ventas netas del casino, y la novedad, el pago fijo para el municipio –o monto mínimo garantizado– de un total de 481.501 UF (unos 15 mil millones de pesos al año).

Al respecto, el alcalde de Coquimbo, Alí Manouchehri, señaló que estos recursos eventualmente debieran llegar en el mismo mes de enero, por lo que, en el contexto de la presentación del presupuesto municipal, fueron incluidos en éste.

 “Hemos trabajado en un plan de austeridad y ajuste de nuestras arcas pensando en el grave estado financiero que atraviesa el municipio, sin confiarnos que estos recursos llegarán de manera oportuna. Ahora bien, de llegar serán un gran aporte para la estabilidad financiera y para dar respuesta a las necesidades y obras que requieren nuestros vecinos y vecinas”, señaló el edil.

Por lo mismo, aclaró que como municipio han hecho gestiones ante la Superintendencia de Casinos “para evitar que se sigan dando prórrogas a la sociedad concesionaria, porque estos recursos son necesarios y son de todos los coquimbanos y coquimbanas”.

Por último, se debe señalar que si bien desde la actual administración municipal se explicó que los recursos de Enjoy llegarían durante el primer mes del próximo año, el ex administrador municipal Patricio Reyes, apunta a que ello se materializaría en febrero.

“El nuevo contrato comienza sí o sí el 7 de enero, y eso significa que un mes después, el 7 de febrero, se debe ingresar al municipio una cantidad gigantesca de dinero que son las 481 mil UF, que es la oferta mínima garantizada a todo evento”, asegura. “Sobre eso hay resoluciones de la Superintendencia de Casinos. (Enjoy) no tiene más recursos ni las obras se pueden seguir prorrogando”, agregó.

 

¿Pierde fuerza el Leaseback?

En relación a la iniciativa de solicitar un leaseback para hacer frente a la crisis financiera que enfrenta la casa edilicia porteña, y que considera en primera instancia al estadio Francisco Sánchez Rumoroso como bien de respaldo para solicitar los dineros, Manouchehri, señaló que, tras el acuerdo del concejo municipal, “el leaseback sigue su curso natural en búsqueda de la autorización de la Dirección de Presupuestos del Ministerio de Hacienda”.

“Nuestra convicción”, explica, “siempre estuvo en conseguir recursos frescos para sanear las arcas municipales con un objetivo muy claro: que el municipio pueda trabajar en mejorar la calidad de vida (…) Yo lo he planteado, la estrategia siempre fue solicitar un monto como 20 mil millones de pesos en el entendido que es posible que no se autorice esa cifra y esta sea más baja o lo más alta posible, pero debemos intentarlo”.

El edil insistió en que “nunca ha estado en juego el estadio. Hay otros bienes que se pondrán en la propuesta que se lleva a Hacienda, y hemos dado prueba de responsabilidad, nunca estarán en juego los inmuebles municipales”.

Cabe señalar en todo caso, que en relación al estadio, expertos en la materia consultados por Diario El Día, explicaron que el recinto no está en condiciones de ser enajenado, vendido o puesto en prenda, ya que fue construido con recursos fiscales, provenientes del Gobierno Central y Regional. Además, para dar curso a una medida como ésta se requeriría por tanto, de una autorización del Estado, y no sólo de un acuerdo del Concejo Municipal. A eso se agrega que el terreno donde se levanta el coliseo fue donado para expresamente albergar un recinto de estas características, impidiendo su venta a futuro.

En todo caso, Manouchehri, insistió que el leaseback es una herramienta más para conseguir recursos frescos, pero aseguró que “no cometeremos el error de considerarlo en el presupuesto, lo que en el pasado nos llevó al descalabro que vemos hoy día”.

 

Suscríbete a El Día y recibe a diario la información más importante

* campos requeridos

 

 

Contenido relacionado

- {{similar.created}}

No hay contenido relacionado

Cargando ...

 

 

 

 

 

 

 

 

Diario El Día

 

 

 

X