Sector gastronómico asegura que propuesta del gremio médico es poner una lápida al rubro

El Colegio Médico presentó su propuesta para enfrentar la pandemia, entre las que destaca “un corto circuito epidémico” que sería una medida excepcional -de una única vez- y por una extensión de tres semanas. 

La iniciativa propone un cierre de todas las actividades productivas. Sólo se mantendrían las esenciales, como la comercialización minorista de bienes esenciales; y se limitaría el transporte público y privado.

Para los representantes del gremio gastronómico de la Región de Coquimbo la medida llega un poco tarde.

Buscar equilibrio

Así lo indican desde la Agrupación Barrio del Mar , quienes señalan que como gremio han adoptado todas las medidas dispuestas por los protocolos respectivos, velando primeramente, por la seguridad de sus colaboradores y clientes, impartiendo capacitaciones, haciendo inversiones en cuanto a modificar incluso, la infraestructura de los locales, a fin de cumplir con las normativas vigentes, y así amparar cada fase del plan Paso a Paso, en función de minimizar los riesgos. 

“Por lo anterior, nos parece que la propuesta dada a conocer, vulnera todo el esfuerzo desplegado por mantener puestos de trabajo formales, con ello la sostenibilidad de nuestros negocios y toda la cadena productiva que hay detrás de estos, y sería un claro incentivo a la actividad informal, generando un perjuicio tremendo sobre nuestro sector, más aún, cuando deja entrever que éste constituye una actividad de alto riesgo, producto de la falta de distanciamiento físico y la no utilización de elementos de protección personal, desconociendo que el principal factor por el cual somos diariamente fiscalizados de forma estricta, es el cumplimiento de aforos máximos y la implementación de medidas preventivas. A lo anterior se suma el escrutinio ciudadano al cual estamos sometidos”, señalaron.

Agregan que “son medidas que atentan contra la actividad, pero no necesariamente van a cambiar la actitud de personas irresponsables que no aportan al cuidado de la comunidad en general, y que seguirán siendo promotores de contagio en la realización de fiestas clandestinas y otras actividades ilegales”.

Desde la organización que agrupa a los dueños de locales de la Avenida del Mar consideran que el desafío debiera ser siempre la búsqueda de un equilibrio entre lo sanitario y lo económico. “Eso se alcanza cuando se permite el funcionamiento de actividades bajo protocolos diseñados según el riesgo real de cada una de ellas, conforme a las distintas fases del plan Paso a Paso. Creemos que nuestro rubro, como fuente generadora de empleos, alcanza hoy, una dimensión social que no se puede subestimar”, indican desde Barrio del Mar.

Daño al comercio

Para Luis Riveros, empresario gastronómico y presidente de la Cámara de Comercio de Illapel, la medida no tiene mucho análisis porque significaría el cierre de un número importante de negocios.

“Es poner una lápida al sector gastronómico y el hotelero, porque no resistimos más. Las ventas no dan, ya estamos trabajando prácticamente solo los dueños con un poco de personal. Un cierre total de tres semanas no generará más que daño”, sostiene Riveros.

A su vez, Washington Altamirano, presidente de la Cámara de Comercio de Ovalle, sostiene que la propuesta del Colmed es una medida que en ninguna parte del mundo ha funcionado.

“Nosotros llevamos más de un año y medio con el comercio totalmente quebrado. Esto no partió con la pandemia, es desde el estallido social. Muchos no han podido levantarse o han quebrado y los que quedan no pueden pagarle a los bancos. Ahora con esta medida nos quieren quebrar a todos”, asevera Altamirano.

El dirigente ovallino y su par de Choapa concuerdan con que los contagios han surgido en las casas de las personas y no en los locales donde se cumplen todas las medidas sanitarias.

“En mi local tuve dos trabajadores y se fueron todos para la casa. Nos hicimos el PCR y ninguno más tuvo problemas. Ambos se habían contagiado en su hogar. No es el comercio que está contagiando”, sostiene el presidente de la Cámara de Comercio ovallina.

Altamirano dice que si no existe venta y está todo cerrado no habrá pago de impuestos que son los que financian al país.

“La gente de la gastronomía o el emprendedor cómo va a pagar las imposiciones de sus trabajadores si no tiene ingreso por tres semanas, el arriendo del local, de dónde saca para vivir él, pagar a los proveedores y los compromisos con los bancos” cuestiona Altamirano.

El presidente de la Cámara de Comercio señala que entienden que el personal de la salud esté colapsado, pero no comprenden la propuesta del Colegio Médico.

“No sé qué quieren, ¿castigar más al emprendedor? Con todo lo que ha pasado en el país va a llegar un momento que el Estado no va a tener recursos para entregar ayuda” finalizó Altamirano.