Quizá la mejor noticia para Chile en los últimos tiempos ha sido la llegada de la vacuna contra el Covid-19 y el rápido proceso de vacunación a lo largo de todo el país, que ha permitido a la fecha –9 de febrero– beneficiar a casi un millón de compatriotas.El impacto de la vacunación es inmenso y se irá percibiendo de forma nítida con el paso de las semanas. En primer lugar, por sus consecuencias en la salud, considerando que habrá una tendencia a la baja en los contagios y en las muertes, si bien es necesario seguir con los cuidados personales y sociales. En segundo lugar, habrá un efecto positivo sobre la vida familiar, considerando que durante el 2020 muchas familias estuvieron divididas, con los padres y abuelos sin poder recibir visitas durante largos periodos, que se irán dejando progresivamente atrás. En tercer lugar, Chile tenderá a la normalización de su vida social, en la educación, las reuniones y fiestas, el deporte y el descanso, así como otras tantas actividades que han sido afectadas por la pandemia.Finalmente, la vacunación tendrá un impacto decisivo sobre la economía chilena, que sufrió una caída inmensa en el PIB y en el empleo durante el 2020, y que ahora se apronta a iniciar una etapa de normalización y crecimiento. JP Morgan estima que Chile será el primer país emergente con “inmunidad de rebaño”, a partir del segundo semestre del 2021, debido al eficiente proceso de vacunación y a los contratos firmados para asegurar las dosis. Todo esto tendrá una consecuencia económica positiva, favoreciendo el crecimiento y la creación de empleos, lo cual es muy importante para que cada persona pueda aportar sus talentos y trabajo al progreso de Chile.En la vacunación contra el coronavirus ha existido un gran trabajo del gobierno y el personal de salud, junto a una colaboración responsable de gran parte de la población, a pesar de las dificultades evidentes que representan las restricciones de movimiento. Es una muestra clara de cuánto puede progresar el país cuando hay un trabajo bien hecho y con unidad, sin querellas absurdas ni zancadillas que entorpecen el progreso. Por eso, es una gran noticia para Chile.
