Crédito fotografía: 
Lautaro Carmona
El teniente de la SIAT de carabineros, Sebastián Molina, analizó los factores que habrían generado un aumento considerable de muertes en las vías de la Región de Coquimbo. Afirma que no existe una “Ruta de la Muerte” y que el problema es asociado al factor humano.

Alrededor de las 19.30 horas de ayer sábado se registró un accidente de alta energía en la ruta D-409 con el cruce de Huachalalume, en la comuna de Coquimbo. 

En el hecho se vio involucrada un motociclista quien, preliminarmente, habría chocado contra la barrera de contención ubicada en el lugar.

El  joven de 23 años falleció producto de las lesiones generadas por  el impacto.

Este nuevo accidente fatal viene a aumentar la cifra de fallecidos a 28 en  lo que va el año en la Región de Coquimbo.



CIFRAS PREOCUPANTES



Guarismos que ya preocupaban a las autoridades regionales, así lo indicaba, antes de este nuevo accidente que dejó como saldo un fallecido, el teniente de la SIAT de Carabineros, Sebastián Molina, afirmaba que estas cifras rojas  se dan pese a que en lo que va del año son inferiores a los ocurridos en igual periodo en el 2020. Hasta el momento se han registrado 185 accidentes menos durante el 2021. 



-¿Pese a registrarse menos accidentes estos han sido más graves?

“Claro aumentó la fatalidad, esto debido a que se han registrado algunos accidentes con 5 y 3 tres fallecidos. En cuanto a los lesionados tenemos en lo que va del año 372 personas lesionadas, mientras el año 2020 se llegó a 496”.



-¿Qué análisis sacan sobre las causas de estos aumentos de personas fallecidas?

“Lamentablemente es el factor humano, asociado a la mala decisión o conducta vial, falta de conocimiento, negligencia, además de no estar atento a las condiciones de tránsito, pérdida del control del vehículo, no mantener distancia y conducción en estado de ebriedad”.



-¿Cuál es el tipo de accidente vial que más se repite?

“La mayor cantidad de tipo de accidentes en que del año son 230 colisiones, 141 choques y son seguidos por volcamientos y atropellos con 24”.



-¿Las cifras regionales de fallecidos en accidentes deben estar sobre el promedio nacionales?

“El año pasado tuvimos 70 personas fallecidas con un aumento de 14,8% respecto al 2019. Los números en lo que va del año son complejos y eso que nos están jugando a favor las restricciones y toque de queda que no permiten tanto movimiento”.



¿Existe una ruta más peligrosa que otra, se habla de la Ruta 41 y la antigua ruta 43?

“Todas las rutas tienen su peligro o condición de riesgo asociada No comparto esa denominación de la “Ruta de la Muerte”, el problema es asociado al factor humano, esto es por un adelantamiento indebido o al exceso de velocidad. Este año hemos tenido en varias rutas de la región. Un ejemplo es la Ruta 5 que tiene un excelente vial, con todas sus demarcaciones, una buena carpeta de rodado, buena barrera de contención y dos pistas de circulación por sentido, pese a esto siguen ocurriendo accidentes con personas fallecidas. Lamentablemente nosotros asociamos las fallas a las personas y no a la ruta”.

 

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