“No más fuegos artificiales” es el nombre de la campaña de la Corporación de Ayuda al Niño Quemado (Coaniquem), que busca que se reduzca la cantidad de accidentes relacionados con la manipulación de pirotecnia, cuya venta y uso particular está prohibida en nuestro país desde el año 2000.
Pamela Andrade, jefa regional de Coaniquem, sostuvo que esta campaña comenzó oficialmente el pasado 6 de diciembre, la cual cuenta con el apoyo de Carabineros y el Ministerio de Salud, (Minsal), en la labor de “prevenir y tener una vigilancia epidemiológica activa”.
“Nosotros iniciamos nuestra tradicional campaña, no uses, no compres y no vendas fuegos artificiales, la cual, desde hace 28 años, se realiza entre el 6 de diciembre al 6 de enero de cada año. Nosotros hacemos la vigilancia en 1.200 centros de atención primaria (a nivel nacional) que nos entregan las estadísticas respecto a cuantos niños menores de 15 años ingresaron”, sostuvo Andrade.
La directora regional de Coaniquem indicó que en la temporada pasada diciembre 2020-enero 2021 “hubo 1.975 ingresos por alguna quemadura a hospitales, de los cuales 13 niños de 0 a 14 años fueron por fuegos de artificio”, el objetivo de esta vigilancia es identificar la cantidad de víctimas por esta causa, levantar alertas si hay aumentos y medir la evolución de este problema.
En este contexto, Andrade enfatizó que la idea es que exista un compromiso para poder seguir con esta prevención y vigilancia. “El llamado es claro, no uses, no compres, no vendas fuegos artificiales, esa es nuestra misión principal. No queremos que más niños se quemen por esta causalidad e invitamos a los adultos (quienes somos los responsables) a poder cuidarlos, tanto a quien manipula este fuego artificial como el observador tienen que saber la alta peligrosidad que tiene esta manipulación”, sostuvo, añadiendo que, “Carabineros están en la calle, podemos nosotros a través de ellos ayudar y potenciar la prevención y ayudar con la fiscalización y se aduce la ley 19.680 que prohíbe el uso de fuegos artificiales”.
Por su parte el jefe de la IV zona, General Rodrigo Espinoza, sostuvo que “vamos a orientar esfuerzos a la prevención en cuanto al uso y manipulación de los fuegos artificiales”, llamando a la responsabilidad, “la comunidad tiene que entender que manipular un fuego artificial es literalmente jugar con fuego, es un peligro no solamente para la persona que lo ocupa, sino que para el resto que lo está observando o que está simplemente alrededor. Hay otras formas de celebrar y el llamado es a cuidarse y a cuidar al resto. No manipulen fuegos artificiales, no se expongan a riesgos en este fin de año especialmente, ya que queremos celebrar tranquilos y seguros”, manifestó el General Espinoza.
Detenidos por uso de pirotecnia
De acuerdo a información entregada por Carabineros, en lo que va de 2021, han sido tres las personas detenidas por manipulación de fuegos artificiales, mientras se han realizado cinco denuncias ante el Juzgado de Policía Local, en la región.
La primera detención fue el 5 de febrero, en el marco del partido entre Club Deportes La Serena y Universidad Católica. S.M.M.M. de 22 años mantenía seis morteros de fuegos artificiales y además fue identificado a través del dron como responsable de lanzar pirotecnia. El 18 de octubre fue detenido en Ovalle P.M.D.V. de 21 años, quien lanzó fuegos artificiales cerca de una bomba de bencina, en el mismo contexto fue detenido A.L.H.U. de 34 años quien fue sorprendido con dos petardos y una bengala. En cuanto a las denuncias, una fue en Huachahalume, otra en Ovalle y tres en Coquimbo, principalmente alrededores del Estadio.
Sobre la ley
La ley 19.680 que prohíbe el uso de fuegos artificiales y la reforma a la ley 17.798, sobre control de armas y explosivos se publicó el 25 de mayo del 2000 en el Diario Oficial. La normativa prohíbe la venta al público de fuegos artificiales y regula la realización de espectáculos pirotécnicos masivos, señalando que “los que sin la competente autorización fabriquen, armen, elaboraren, adapten, transformen, importen, internen al país, exporten, transporten, almacenen, distribuyan, ofrezcan, adquieran o celebren convenciones respecto de los fuegos artificiales serán sancionados. La pena será de presidio menor en su grado medio (541 días a tres años) y multa de 10 a 20 unidades tributarias mensuales”.
También se sanciona a los que posean o tengan fuegos artificiales, artículos pirotécnicos y otros artefactos de similar naturaleza, sus partes, dispositivos y piezas sin la autorización de la Dirección General de Movilización Nacional (DGMN). La pena para este delito es de presidio menor en su grado mínimo (61 días a 540 días) o multa de 5 a 20 unidades tributarias mensuales.
Respecto de los locales usados para cometer estos delitos el juez puede decretar su clausura definitiva. Mientras que quien active, accione o dispare fuegos artificiales sin autorización será sancionado con la pena de presidio menor en sus grados mínimo a medio (61 días a tres años) y multa de 10 a 20 unidades tributarias mensuales. Si el uso de los fuegos artificiales turba gravemente la tranquilidad pública o infunda temor en la población se aplicará la pena de presidio en su máximo.
Es importante mencionar que este delito puede ser denunciado por cualquier ciudadano.
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