Más de 150 internos de alta peligrosidad se encuentran recluidos en Huachalalume

En el marco de la movilización de los funcionarios de Gendarmería, situación de carácter nacional que también se extendió a la Región de Coquimbo, dirigentes locales expusieron aspectos de la realidad que viven en forma constante, relacionados con el trato diario con la población penal.

En ese contexto, Jaime Pereira, presidente de la Asociación de Funcionarios Penitenciarios (ANFUP) aseguró que en el penal de Huachalalume hay 150 internos de alta peligrosidad, que no son recibidos en una ninguna otra cárcel del país. “El director nacional de Gendarmería, Christian Leal, determinó que estén acá porque somos uno de los pocos lugares donde no han ocurrido fugas. El personal ha hecho bien su trabajo, han funcionado los sistemas de seguridad, tanto de las barreras humanas como las tecnológicas. Los internos de alta peligrosidad son de Santiago, Valparaíso, Antofagasta y Concepción”, señaló.

En efecto, según Jokan Garrido, que también es dirigente provincial de Gendarmería, el número de reos de alta peligrosidad que han sido trasladados desde otras cárceles del país hasta Huachalalume alcanza las cerca de 30 personas durante 2021. “En efecto, según lo que podríamos señalar como una realidad normal, tener 150 internos de esas características en este recinto supera en un 300% la cantidad que habitualmente teníamos”, indicó. 

En cuanto a las razones, Jaime Pereira argumentó que esto se debe “a la seguridad que presta este penal y lo bien que ha hecho este trabajo el personal uniformado, ya que no se han producido hechos como el ocurrido en Valparaíso. Se ha hecho bien el trabajo en ese respecto”.

En ese contexto, el director regional de Gendarmería, Rubén Pérez, indicó que “si tuviéramos sólo internos de la región, la instalación carcelaria estaría subutilizada mientras en otros lugares existe un alto hacinamiento. Gendarmería es una institución nacional, que debe responder a esas diversas necesidades”, subrayó.

Demandas 

Jaime Pereira, presidente provincial de la Asociación de Funcionarios Penitenciarios, señaló que la paralización que tuvo lugar el día de ayer –y que continuará hoy- se debe “a una resolución que fue emitida por el director nacional de Gendarmería, Christian Alveal, el cual hace referencia a que los turnos vuelvan a la normalidad, lo que sí nos preocupa. Hay una imposibilidad de retomar los turnos normales como manifiesta el director nacional o la autoridad penitenciaria. En esta pandemia le estamos dando continuidad a los servicios en turnos rotativos de 5x5 o 7x7, y una circular del 23 de julio deja sin efecto esos turnos”, afirmó.

A su vez, comentó que “en la actualidad tenemos un importante déficit de funcionarios, cercano a los 200. Ya no estamos en los tiempos en que descansábamos un día después de 30, eran los llamados tiempos de centinela. Nosotros no queremos eso para nuestro personal, y esperamos que de la nueva promoción, un número importante llegue hasta nuestra unidad, porque somos la más dañada en término de cárceles concesionadas, pero no nos dieron un estimativo”, acotó. 

Frente a esta realidad, el director regional de Gendarmería, Rubén Pérez, contrastó que “la capacidad de plazas que tiene el penal actualmente es de 2.300 en total, pero la cantidad de internos que concentra el establecimiento es de 1.913 para ser exactos. Por tanto, debo aclarar que no habido una explosión de traslados desde otras zonas”, señaló.

Respecto de los reos de alta peligrosidad , indicó que “considerando la disponibilidad de plazas totales y los estándares y características de una cárcel concesionada, esto no constituye bajo ningún punto de vista una población desproporcionada”.