Melissa, una historia de vulneración: Madre imputada por parricidio y padrastro detenido por violación

Vecinos del sector de la Parte Alta, en Coquimbo, presenciaron la tarde de ayer un operativo de los detectives de la Brigada de Homicidios, que se aprestaban a ingresar a un domicilio del sector en busca de un hombre imputado por violación.

Los habitantes de la Parte Alta del puerto sabían perfectamente de quién se trataba. Claro, porque más de una vez habían visto el nombre y el rostro de Luis Santander en los medios de comunicación durante el último año.

El sujeto es el padrastro de Melissa Chávez (12), quien fue asesinada en noviembre de 2020, presuntamente a manos de su madre.

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“Es un lobo con piel de oveja”, “él es el culpable”, “séquenlo en la cárcel”, fueron algunos de los gritos que acompañaron la salida del detenido desde su hogar particular, escoltado por personal policial.

Según información recabada por El Día, Santander fue aprehendido por el delito de violación reiterada contra la niña. Esto como consecuencia de los resultados de unos peritajes realizados al cuerpo de la pequeña por parte del Servicio Médico Legal.

De esta manera, el hombre pasará a control de detención durante la jornada de hoy en el Juzgado de Garantía de Coquimbo, donde se conocerán más detalles de la imputación.

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El rol de Santander

Recordemos que Melissa Chávez fue asesinada en noviembre de 2020, en Villa Talinay. Según los antecedentes del caso, fue apuñalada y el autor del crimen encendió fuego a la vivienda para ocultar las pruebas.

Cabe mencionar que la madre de la niña, Mirta Ardiles, es hasta ahora la única imputada por el crimen y se encuentra en prisión preventiva.

Pero desde que estalló el caso, que generó repudio en la opinión pública, se ha visto cuestionada también la imagen de la pareja de Mirta, Luis Santander, por antecedentes que apuntaban a abusos sexuales contra la menor.

Esto quedó al descubierto en diciembre de 2020, cuando uno de los hermanos de Melissa, Jack Chávez, relató a El Día que en 2010 la pequeña había sufrido un abuso sexual por parte de la pareja de Ardiles cuando solo tenía dos años de edad.

En ese contexto, el padre biológico de la niña, Denis Chávez, también había manifestado que “pronto se sabrían muchas cosas”, que apuntarían precisamente a Santander.

La detención del sujeto la tarde de este miércoles viene a respaldar así los dichos de los familiares paternos de Melissa, y una de las posibles teorías que manejaban las autoridades, la cual tendría que ver con los “celos” que sentía Ardiles hacia su propia hija, lo que la habría llevado a cometer el crimen por el que se encuentra privada de libertad.

Una situación compleja, como todo lo que ha rodeado el hecho. Recordemos que en primera oportunidad se pensó que la niña habría muerto de forma accidental por el incendio en la vivienda, pero las indagaciones dejaron al descubierto el crimen.

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“Como una hija”

Desde el inicio del caso, la madre y el padrastro de Melissa se han declarado inocentes, lo que afirmaron en entrevista exclusiva con El Día tras la muerte de la menor y que, al menos Ardiles, ha mantenido mientras se indagan los hechos.

En la retina de todos están las declaraciones de Santander, quien afirmaba hace casi un año que la pequeña víctima era como una hija para él.

“Melissa era muy chica desde ahí es que empecé con ella una relación muy bonita. Ella era de piel, me sentía halagado por estar con ella, yo sentía que era de las personas que la iba a guiar en su camino. Yo era su papá, estábamos haciendo una bonita familia”, dijo entonces Luis Santander.

El trabajador minero sostuvo que sus días de descanso eran para su familia: Mirta, Melissa y el menor de los hijos. “Si comprábamos algo era para los cuatro, no se hacía distinción de una u otra. Éramos una verdadera familia”, decía el ahora imputado por violación.

Tras la detención de Mirta Ardiles hace unos meses, las investigaciones se habrían ampliado, por las sospechas de que el padrastro tenía algún tipo de participación.

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La investigación

El caso sigue a la espera de un juicio, proceso que podría iniciar a fin de mes, ya que el plazo ampliado de investigación solicitado por la Fiscalía vence este 30 de noviembre.

En el mes de agosto el fiscal regional, Adrián Vega, profundizó en las razones para solicitar la prórroga y descartó de plano cambios en la teoría del caso.

“La investigación, en cuanto a la participación de la imputada en el delito de parricidio de su hija y posterior incendio para ocultar la evidencia del inmueble no ha variado en ningún caso, así lo ha refrendado la jueza de Garantía de Coquimbo. La Fiscalía investigó desde el principio la presencia o posibilidad de un tercero, un perpetrador o un merodeador en un margen de cinco minutos, que es el espacio que queda entre que la madre sale del lugar y la propagación del humo desde la casa habitación… Está descartado, porque eso se investigó”, dijo el persecutor.

El jefe del Ministerio Público señaló que “el informe histológico va en la línea de lo que la Fiscalía plantea, en relación con establecer ciertos asuntos médico legales que dicen relación con la teoría del caso, la ocurrencia del hecho y los móviles”, afirmó en su oportunidad a El Día.

En esta línea, estos dichos de Vega habrían apuntado a los exámenes que permitieron comprobar los abusos del padrastro de la víctima y que se conocen a casi un año de la trágica muerte de Melissa.

Procesando la información

El abogado defensor de Mirta Ardiles, Nicolás Pavez, contactado anoche por El Día, afirmó que se encontraban recabando antecedentes de la detención de Luis Santander. “Estamos averiguando para saber bien qué pasó”, sostuvo el profesional.

El defensor ha solicitado revisión de cautelares, alegando que Ardiles no contaba con todas las condiciones para seguir privada de libertad en la cárcel de Huachalalume. Entre ellas, acusaba la falta de acceso a un baño y a comunicación con sus representantes.

A su vez, una de las personas que ha defendido desde un principio la inocencia de Mirta es su hermana Danissa Araya, quien al conocer la información sobre la detención de quien fuera su cuñado, señala que se encuentra preocupada de su hermana y comenta que no ha recibido mayores antecedentes de la detención de Santander. “No estoy en la región, así que estamos recién recibiendo la información“, afirmó la familiar.

En cuanto a la noticia, Araya señala que “más allá de sorprenderme o no, es la justicia la que tiene que actuar”.

Es importante que existan avances

Por su parte, la abogada Carolina Tello, de Abofem, señaló que se encontraban a la expectativa de las pericias que estaban en tramitación. “Nosotros no partíamos de la base de ningún supuesto en particular, sino que en virtud de presunción de inocencia estábamos esperando que estas pericias dijeran este tipo de conclusiones”, indicó.

Tello sostiene que lo importante es que existan avances y mejor si son de la forma más rápida posible, para que se haga justicia de forma oportuna.

“Esto sobre todo cuando se trata de una temática tan relevante, delicada y sentida hoy por hoy como es la violencia a las mujeres y en este caso a una niña. Se debe seguir de la misma manera”, sostiene la abogada.

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