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Según las pericias realizadas por funcionarios de la Policía de Investigaciones, no existiría la participación de terceros en el hecho y se trataría de un lamentable accidente tras el descuido de los adultos que se encontraban con el niño, el que cayó a la piscina existente en el lugar. De todas formas, será el Instituto Médico Legal el que determine las causas específicas que provocaron la muerte del pequeño.

En circunstancias que están siendo investigadas, un menor de dos años murió ahogado en una piscina particular en el sector de Pan de Azúcar en Coquimbo.

El hecho ocurrió la tarde del sábado y según información entregada por la Policía de Investigaciones, PDI, los hechos ocurrieron cuando el niño se encontraba junto a su grupo familiar al interior de la parcela en la cual residen, cuando en un minuto habrían perdido de vista al pequeño y comenzaron su búsqueda, siendo encontrado al interior de una piscina existente en el domicilio.

El menor fue auxiliado inmediatamente por sus padres y trasladado hasta Centro de Salud Familiar, CESFAM, de Pan de Azúcar, donde pese a las maniobras de reanimación, no fue posible que reaccionara, puesto que habría ingresado ya fallecido al recinto de salud.

Tras lo anterior y con la finalidad de esclarecer lo sucedido, el fiscal de turno dispuso la concurrencia de los detectives y de los peritos del Laboratorio de Criminalística Regional de la PDI de La Serena.

Consultado el jefe de la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones, Claudio Alarcón, éste precisó que “de acuerdo al reconocimiento externo del cuerpo, no presentaba lesiones atribuibles a terceros, siendo su posible causa de muerte una asfixia por sumersión y a la finalización del examen realizado por los detectives, su data de muerte se estimó en 4 horas”.

El cuerpo del pequeño fue trasladado hasta el servicio médico legal, con el objeto de realizar la autopsia de rigor y determinar la causa precisa de su muerte.

De todas formas, el jefe de la Brigada de Homicidios precisó que “todos los antecedentes serán puestos a disposición del Ministerio Público, para continuar con las diligencias y poder determinar las causas y circunstancias en que ocurrieron los hechos”.

OTROS CASOS



Si bien lo ocurrido ha provocado un profundo impacto en la familia principalmente, este no es el único hecho de estas características que ha ocurrido.

El pasado domingo 22 de marzo, cerca de las 21:00 horas, un pequeño también de dos años de edad, falleció tras caer a un foso de agua.

El hecho ocurrió en el sector de Vegas Norte y a pesar de los esfuerzos del personal del Servicio de Atención Médico de Urgencia del hospital de La Serena, nada pudieron hacer, porque el niño habría ingresado fallecido al recinto asistencial.

En la oportunidad, también fueron los detectives de la Brigada de Homicidios, BH, de la Policía de Investigaciones, en compañía de peritos del Laboratorio de Criminalística, los encargados de llevar adelante una investigación, quienes tras a levantar las evidencias necesarias y realizar el empadronamiento de testigos, arribaron a la conclusión de que no hubo participación de terceros en la muerte del pequeño.

De hecho el análisis realizado por los  expertos policiales no solo determinó que lo ocurrido habría sido un accidente, sino que el niño habría perecido por inmersión.

CAÍDA  A CANAL DE REGADÍO



Otra trágica muerte que afectó a un menor de dos años de edad ocurrió el 14 de diciembre de 2020, cuando un pequeño cayó a un canal de regadío pereciendo por inmersión.

En esa oportunidad, el menor se encontraba con su madre en una vivienda del sector de El Hinojal en la comuna de La Serena, cuando la mamá lo perdió de vista por un momento y se desató la tragedia.

Rápidamente comenzaron a buscarlo por la casa, sin resultados y recorrieron el sector hasta dar con su paradero. El pequeño había caído al canal Bellavista, siendo auxiliado por sus familiares, quienes intentaron sin éxito reanimarlo a la espera de la llegada de una ambulancia para trasladarlo al hospital. 

El niño llegó al centro asistencial y todo intento de reanimación por parte del equipo médico del servicio de urgencias fue en vano y terminó falleciendo pasadas las 16:00 horas de ese 14 de diciembre. 

En las causas de muerte de este pequeño tampoco hubo participación de terceros y su fallecimiento fue por inmersión.

Pero ese no fue el único menor de dos años fallecido en similares circunstancias, ya que ese fue la tercera muerte que se registró el año pasado.

 Anteriormente, el 9 de febrero de 2020, un menor de 2 años de edad murió tras caer a un canal de regadío y quedar atrapado en una compuerta en la localidad rural de Barraza. 

En este caso, la víctima y su familia se encontraban en la Feria Costumbrista de la localidad cuando ocurrieron los hechos.  El pequeño fue perdido de vista por los adultos y tras una intensa búsqueda fue encontrado en el canal de regadío ya sin vida, dejando a la familia sumida en un profundo dolor.

Un hecho similar fue el que sucedió en  una parcela de la localidad de Gabriela Mistral de La Serena en el mes de mayo. 

En esa oportunidad, un niño, de la misma edad, se encontraba con su abuela cuando en un descuido se extravió y terminó perdiendo la vida al caer a un canal de regadío.

En todos estos casos, los hechos han sido caratulados como accidente y se ha descartado la participación de terceros.

RECOMENDACIONES



El pediatra Manuel Oñate, recomienda tener sumo cuidado con los niños, especialmente de los dos años en adelante, que es cuando están descubriendo el mundo y son algo inquietos.

“A los menores no se les debe perder de vista, porque en cualquier momento puede ocurrir una desgracia. No se deben dejar los medicamentos a su alcance, porque ellos descubren el mundo con todos sus sentidos y tienen la tendencia a llevarse todo a la boca, por lo tanto, se pueden intoxicar, o bien, pueden atragantarse con algo que se traguen. Ahora bien, si se encuentran en un espacio al aire libre, donde hay un río, un canal o una piscina, los adultos tienen que estar en una constante alerta con él, ya que les llama todo la atención y no tienen noción del peligro, ellos no sienten miedo”, señala el profesional, quien también recomienda que quienes tengan piscina en sus hogares las cerquen y adopten medidas de seguridad”.

 

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