Diversas denuncias por malos tratos tras supuestos hurtos en el comercio de La Serena

Una mujer identificada como Paula Andrea Lam Bascuñan denunció que fue acusada de robo en forma injusta por los encargados de una tienda de productos en el centro de La Serena, quienes además la habrían discriminado como persona.

Lam Bascuñan relata que ingresó a una tienda donde se comercializan productos importados desde China, ubicada en pleno centro de La Serena, momento en que se activó la alarma antirrobos, sonido al que no prestó importancia. Al salir, agrega, nuevamente se activó la alarma, y comenzó a caminar.

Cuando ya iba a media cuadra, indica, “aparecen unos señores asiáticos corriendo y diciendo “la gorda lleva algo, allí en la cartera” (..) me apuntaban con el dedo y gritaban detengan a la gorda”.

Fue retenida por los dependientes y asegura que se sintió confundida. “Ellos ya me estaban revisando la cartera, cuando yo les dije “esperen un poco, yo quiero que llamen a Carabineros, llamé y se demoraron entre 10 y 15 minutos, mostré bolsas y mi cartera, las boletas, y no había nada”.

La afectada añade que “cuando vieron que no había nada robado dijeron “ah ya” y nada más, ni siquiera me pidieron disculpas por lo que se había culpado y por lo que me habían discriminado”.

Paula Lam Bascuñan -quien paradójicamente tiene un apellido de origen chino- comentó que “salí indignada y enojada, me puse a llorar, me sentí muy mal. Incluso ahora no puedo dormir, estoy con calmantes y me siento discriminada porque yo soy una persona obesa, entonces me siento muy mal”.

Por otra parte,  Ana Guerrero Toledo, Profesora de Educación Básica, también señala un suceso similar. La mujer detalla un incidente ocurrido la tarde del sábado 27 del mes pasado, en un local comercial llamado Yong Da ubicado en Cordovez 415-A, La Serena.

 La profesional quién provenía de apreciar el evento de la verbena, procede a entrar al local comercial para “echar un vistazo” antes de irse a su casa, cuando se iba retirando, una persona de nacionalidad china le pide devolverse al local para revisarle las cosas, “yo no había sacado nada, no tenían por qué retenerme. El guardia comenzó a llamar a carabineros, quienes llegaron  25 minutos después,  mientras llegaban, recibí un trato vejatorio, a puros empujones, se empezó a acumular la gente y todos miraban lo que me ocurría, entonces el guardia tomó mi cartera y la tiro al suelo, mientras otro hombre grababa mis reacciones. Luego cuando resolvieron que no llevaba nada robado, no me pidieron ni disculpas” detalla la profesional.

Posteriormente la afectada puso una denuncia en carabineros por agresión, maltrato y acusaciones de robo, “soy inocente y no me dieron ninguna explicación al respecto. Los días siguientes amanecí anímicamente mal, por lo que tuve que ir al médico”.

El Comisario de Carabineros Ricardo Arriagada detalla que en los centros comerciales, la seguridad se encuentra a cargo de vigilantes privados o guardias, esto dependerá de la cantidad de dinero que maneje la empresa y son ellos quienes se dirigen a las personas, frente a supuestos casos de hurto.

“No sólo carabineros está facultado para la retención de personas, dentro del código procesal penal, existe la figura de detención por parte de civiles, para esto, se debe tener la fundamentación seria de porqué se retuvo a la persona” especifica.

La sugerencia del Mayor Arriagada es comportarse como una persona facilitadora para demostrar inocencia, de lo contrario pasa a ser retenido. “Las personas que son inocentes y se lo señalan al guardia, pero de todas maneras no quieren abrir sus bolsos, deberán esperar retenidos en el lugar hasta la llegada de carabineros, pues de negarse a colaborar, será utilizado como argumento de prueba por parte de los guardias para sospechar de un ilícito”.