El ex alcalde de Punitaqui resultó electo como concejal de Ovalle con la primera mayoría regional. Con simpleza señala que pese a los resultados no está en sus pretensiones ser alcalde de la Perla del Limarí y que en las próximas elecciones presidenciales se cuadrará con Piñera si así lo determina el partido que lo cobijó, el PRI.
¿Cómo se siente con ser la primera mayoría en concejales en la región de Coquimbo?
“Agradecido de toda la gente, de todos los pueblos y sobre todo de mi familia que tuvo la paciencia de soportarme toda esta campaña. La gente está desencantada con la política pero cuando supieron que BlasAraya iba por Ovalle dijo “¡Vamos a ir a votar! y cumplió . Yo voy a cumplirles visitándolos, estrechando la mano.
¿Cómo hizo la campaña considerando que había menos recursos?
“Lo hice como pude con la familia, ni siquiera puse propaganda en la plaza o la alameda. La propaganda no vota, lo que vota son las personas y a las personas hay que convencerlas por lo que uno hace, con sencillez”.
¿La experiencia que usted tuvo como alcalde como la traspasará en el concejo?
Salieron como concejales los amigos Manuel Rodríguez y Omar Rojas. Ellos van a proponer todas estas ideas buenas que tienen para la gente y trabajar, no ir a pelear ni andar secreteando. Ellos son jóvenes, tienen mucho que dar y yo allí voy a estar trabajando en Ovalle.
¿Cómo ve las próximas elecciones parlamentarias y presidenciales?
“Yo creo que se va a ganar así como va. La gente es muy disciplinada y es lo mejor, no andar tirando balazos a nadie sino trabajar y la gente ve lo que uno hace. Yo al día siguiente de las elecciones estaba en la feria trabajando.
Usted ha cambiado varias veces de partido ¿Por qué ?
“A mí no me gusta que me manden porque yo con lo que hago la gente me cree. No necesito de partido, necesito trabajar con la gente y ese es el mejor trabajo que se puede hacer”.
¿Y el PRI le abrió las puertas en ese sentido?
“Sí, me abrió las puertas y me dejo trabajar al gusto mío. Sin andar ofendiendo a la gente. Estoy muy contento y donde estoy”
¿El próximo año apoyará a Sebastián Piñera en la campaña presidencial?
Bueno, allí está en la orden que de el PRI, vamos a cumplir con ello.
¿Usted se va a acoplar a la orden que del PRI como militante disciplinado del partido?
Sí, ellos son los que mandan. Los dirigentes nacionales.
Usted tiene tres mil votos, ¿Se la juega por ser alcalde para los próximos años en Ovalle?
No, no está dentro de los planes porque el alcalde que salió en Ovalle ganó con un 60% y es difícil, hay que ser honesto y felicitar al hombre que lo hizo bien. Allí no votó solamente la Derecha sino que voto gente muy humilde a las que les tendió la mano.
¿Usted va a ser un concejal propositivo o va ir al choque?
Yo buscaré soluciones y no iré a pelear al concejo. Para un problema hay que tener una solución y no tirar miguelitos ni andar ofendiendo a nadie. La gente quiere soluciones y no quiere explicaciones que les den una y otra vez.
¿Cuál es su receta para salir siempre triunfador?
“Ser humilde, no mirar por el hombro a nadie y siempre ser el mismo Blas Araya. Eso la gente lo agradece. Aquí no voto solamente la gente humilde, votaron ricos y pobres”.
¿Usted vio eso en la calle?
Sí, en los ojos y en los rostros de mujeres que no sabían sobre política. Me decían “por usted voy a votar don Blas, cuente conmigo”, mujeres llenas de joyas o abuelitas de noventa años a las que ayudaba a prender el fuego para tomar té. (Les decía) No, no se preocupe yo soy uno más, siempre voy a ser el mismo en todos lados.
NO NECESITO PARTIDO
Uno de los datos que llama la atención del ex alcalde de Punitaqui y ahora concejal de Ovalle es su paso por diversos partidos.El año 1996, Araya resultó electo como alcalde de Punitaqui por el Partido Comunista con 1.954 votos.En los períodos siguientes, Araya se presentó a la reelección pero con el apoyo del Partido por la Democracia, el resultado: 3.049 votos en el período 2000-2004, y 3.457 votos en el período siguiente.Durante la última elección, el llamado Tigre de Punitaqui se presentó al concejo de Ovalle con el patrocinio del PRI, superando los tres mil votos e imponiéndose como primera mayoría regional.