“El centralismo es salvaje, usted pide una mediagua de emergencia y tiene que pasar a Santiago”

En entrevista con diario El Día, el alcalde de Illapel, Denis Cortés Vargas, hace un recorrido por su comuna, los problemas que enfrentan en educación, las inversiones que se deberían hacer por la sequía, el turismo y los inmigrantes entre otros.

En política, descarta volver a su partido de origen, la Democracia Cristiana y dice que se siente bien como independiente, sin que nadie le esté rayando la cancha, al tiempo que resalta como un problema grave la necesidad de viviendas por lo caro que son los terrenos.

-¿En qué pie se encuentra Illapel en estos momentos?

“Se encuentra en un pie pleno de hacer acciones para desarrollar a una comuna y lo más importante es que hemos terminado el plano regulador, presentado al Ministerio de Vivienda y Urbanismo, lo que va a permitir que se pueda invertir en Illapel y construir en altura, cosa que el plano regulador actual no lo permite. Va a permitir también mejorar la proyección de la circunvalación vial, que es un tema muy interesante en nuestra comuna, donde ha crecido tanto el parque automotriz. Por lo tanto, viene a ser una herramienta, un proyecto que va a permitir el crecimiento de la comuna, eso como base principal para el desarrollo. También estamos con una cantidad enorme de obras que hemos realizado este último tiempo, recuperamos un puente antiguo que tiene más de 150 años que estaba abandonado y lo pusimos al servicio de la comunidad como paseo peatonal, el que conecta con otra área verde, un parque que estaba abandonado y lo convertimos en un lugar bonito, con piscina y una capacidad para más de 300 personas”.

-¿El Plano Regulador hasta cuántos pisos les permitirá construir?

“No más de cuatro pisos, eso depende de dónde esté ubicado. El tema es que el centro de Illapel es más comercial y no es tan de viviendas. La preocupación es no ser tan invasivos en la altura. Hay zonas en que podrá llegar a los 16 metros, que son cinco pisos como mucho”.

-Los planos reguladores muchas veces ponen cortapisa para las inversiones, ¿Cómo han podido salvar esta situación?

“Lo que hemos podido hacer es hasta donde se nos ha permitido, por eso no se ha hecho más. Cuando le damos tanta importancia a las construcciones en altura es porque la gente que tiene terrenos no puede construir, no pueden invertir en su propia propiedad y lo que se ha logrado hacer es que todas las construcciones del centro no tienen más de dos pisos de altura, buscando una serie de resquicios para que así se lo permitan”.

-¿Ustedes pretenden fortalecer el comercio en el centro o que la gente viva en él?

“Comercio y servicios, porque eso es lo que más podemos hacer, es lo que más tiene nuestra ciudad y lo que hoy día estamos potenciando es la salud. Tenemos nutricionista en todos los colegios y hemos invertido en los espacios deportivos. Hoy día tenemos tres estadios, dos con pasto sintético, uno con pasto natural, además de un gimnasio en los sectores altos de Illapel, donde tenemos bastantes actividades deportivas, porque estamos convencidas de prevenir, pero dar los espacios para que la gente pueda hacer actividad física e ir bajando los índices de obesidad”.

-¿Tiene nuevas inversiones en educación?

“Si, estamos trabajando en todo lo que tiene que ver en cómo recuperamos algunos edificios que quedaron dañados por el terremoto. Hoy día tenemos el jardín infantil ‘Mi Pequeño Tesoro’ que está en un container. Ahí tenemos algunos proyectos que estamos viendo para que sean financiados. Tenemos el politécnico que también quedó dañado con el terremoto y que queremos reponerlo, para eso estamos trabajando en un convenio con Minera Los Pelambres. Estamos haciendo gestiones con el ministerio de Educación para que nos permita tener una matrícula mayor que la que tenemos hoy día”.

-La educación municipal es una carga fuerte para los municipios ¿usted es partidario de que pase a manos del Estado?

“Para ser práctico uno siempre trata de tener menos riesgo y menos pega, porque tener la educación pública en nuestras manos es bastante duro para un alcalde, para las municipalidades, porque los riesgos son mayores y si usted no tiene los recursos, no paga los sueldos, las imposiciones, las penas legales le llegan al alcalde. Entonces, cualquier alcalde le va a decir la entrego mañana, pero mi postura no ha sido esa, ha sido que estoy dispuesto a trabajar por la educación municipal hasta que el gobierno, el ministerio lo decida. Si me la pide mañana gustosamente se la entrego, pero si cree que nosotros la podemos administrar, yo no tengo ningún problema. Gracias a Dios hoy día no tenemos grandes problemas económicos, el año 2018 el municipio le hizo un traspaso de 170 millones de pesos al Departamento de Educación, que no es tanta plata cuando el servicio que tiene que ver con educación es tan importante para la comuna. Por lo tanto, para este alcalde no es un problema el tema de la educación, pero siempre estoy dispuesto a apoyar donde el beneficio sea mejor para los estudiantes y para la comunidad. En eso yo no me pierdo, que primero está la comunidad y después las ambiciones de cada uno”.

-¿Qué proyectos preparan en materia educacional?

“El politécnico es uno, estamos trabajando con Minera Los Pelambres para desarrollar un proyecto, estamos entrampados en el tema de las matrículas, porque el politécnico tenía el 2015 más de 900 matrículas y después del terremoto llegamos a 700 aproximadamente. Entonces, por reglamentos que tiene el Ministerio de Educación los proyectos tienen que ser de acuerdo a la matrícula actual y no proyectada hacia el futuro y nosotros estábamos proyectando un politécnico para 1050 alumnos, porque nos ha pasado que cuando uno tiene un edificio nuevo llega mucha matrícula. Nos pasa con la Escuela N° 1, que es maravillosa y está funcionando desde este año, que se pudo proyectar solo hasta 240 alumnos y hoy día tenemos lista de espera. Es una escuela que tiene más de cien años y está en la plaza pública, por lo tanto, hoy el interés de la comunidad de poder tener a los niños en esa escuela es grande”.

-¿Se han visto complicados con el tema laboral por la llegada de inmigrantes?

“Nosotros tenemos problemas en empleo, pero  no quiero poner que eso sea la justificación”.

-No me refiero a eso, es a que si están recibiendo gran cantidad de migrantes, lo que a veces conlleva un problema y los municipios deben crear departamentos especiales para atenderlos.

“Así es, como en todo Chile, han llegado muchos extranjeros, pero no hemos tenido problemas de ningún tipo, todo lo contrario, son personas que vienen a ser un gran aporte y ha habido buenos comentarios de los empresarios en general. Por lo tanto, para nosotros no es una competencia ni nada. En la parte agrícola es donde más mano de obra se ocupa, donde más ellos han aportado con sus servicios”.

-A propósito de lo agrícola ¿cómo les ha afectado la sequía?

“Tenemos hartos problemas de sequía, como en toda la región, sobre todo en aquellos sectores que no tienen regadío. Hay dos afectaciones graves, que es la gente que solo vive de la lluvia y los que están bajo riego y éstos corren el riesgo de perder toda la inversión que tienen. También las comunidades agrícolas que tienen serios problemas. Yo creo que a través del tiempo nosotros no hemos ocupado todas las tecnologías, creo que las políticas deben ser más ambiciosas, más visionarias. Creo que hay que hacer más pozos profundos, poner energía solar y empezar a bombear agua para parcelas piloto, porque hay que ir generando una cultura de poder ir sacándole provecho a la tierra. Sobre todo en las comunidades agrícolas, cuando los comuneros en general están superando los 60 años y la legislación muchas veces le da el poder al mayorazgo, que es el hijo mayor el que se tiene que hacer cargo, pero la mayoría de ellos han estudiado y se han ido a los centros urbanos por una mejor oportunidad laboral  y es muy difícil que vuelvan a una comunidad si uno no tiene una política clara, porque si hoy día usted tiene un embalse  le entregan el agua, pero la gente no tiene capital para comprar un palto o un nogal, ni ponerle una gota de agua con los fertilizantes para que se pueda mantener  y después de los tres años empezar a recibir algún ingreso. Eso está muy lejos del pequeño agricultor o del comunero que tenemos”.

-¿Hacia dónde está creciendo la comuna y hacia dónde apuntan el desarrollo habitacional?

“Ese es un tema muy complicado. Primero, el desarrollo productivo es minero, agrícola y criancero, pero el tema de la vivienda es grave, el problema es que el valor de la tierra es muy alto. Hay harto terreno, pero el único que puede invertir es el Ministerio de Vivienda y ellos por política y por reglamento tienen menos de una UF por metro cuadrado y en Illapel el metro cuadrado está por sobre la UF, por lo tanto, se transforma en un círculo y no tenemos terrenos donde poder construir. Hay, pero caros y ahí falta una decisión del gobierno que se atreva a comprarlos. Nosotros llevamos más de 12 años tratando de comprar 1,8 hectáreas para 300 familias. Tenemos 17 comités de vivienda, muchas personas que necesitan su casa y no hemos avanzado por no tener terrenos”.

-La región se está vendiendo como una región turística, ¿cómo pueden sacarle algo de punta ustedes al turismo?

“El turismo también puede ir apuntado a la historia que tiene la minería y hay campamentos mineros como María Elena, por ponerle un ejemplo, y podríamos sacarle bastante provecho a eso. También tenemos el Río Illapel y estamos viendo cómo ir generando conciencia turística para que la gente sea el beneficiario principal del turismo. En la comuna no hemos querido darle mucho, porque si le abrimos mucho las potencialidades que tiene se transforma en un negocio que vienen inversionistas de afuera y nuevamente se nos queda la gente. La señora que hace el pan rico, la que hace la buena cazuela, es la que al final va a terminar haciendo camas y vamos a ir perdiendo identidad. Por eso estamos trabajando ordenados, porque cuando uno abre la puerta de par en par a un tema tan importante se genera esa amenaza de que pueda haber una invasión de inversionistas, que no es mala, pero tiene que ser ordenada, donde lo primero las entradas tienen que ser para las personas de la localidad”.

-Por estos días se está dando fuerte el tema del eclipse, ¿cómo se están preparando?

“Si, primero vamos a partir con un tema educacional. Vamos a regalarle lentes a todos los niños para que salgan a observar ese minuto histórico que vamos a tener y estamos creando un punto donde vamos a tener habilitado para recibir a las personas que lleguen a ver el eclipse”.

-La región se queja de la centralización de Santiago, pero comunas como la suya sufren la centralización regional, ¿cómo la padecen?

“El centralismo es salvaje, usted pide una mediagua de emergencia y tiene que pasar a Santiago. Cuando se habla de descentralización, hay un proyecto, pero no aparecen las municipalidades. Entonces, muchas veces se habla de gobiernos locales, cosa que acá en Chile no existe  y tampoco hay un proyecto de proyectar las municipalidades hacia allá. Dice que nosotros somos autónomos, pero no somos tan autónomos. La clase política hoy no tiene considerados a los municipios como parte de la descentralización y me da lata porque hay muchos parlamentarios en los que tenía mucha fe, porque fueron alcaldes y hoy día están allí, que podrían tener una mirada más local y no la tienen no sé por qué, no sé cuál es el motivo”.

-Con la experiencia que tiene como alcalde ¿cómo visualiza en el futuro a su comuna?

“Como una comunidad de servicios, grata para vivir, con más seguridad, con más espacios públicos, con una preocupación especial por los adultos mayores, hoy día tenemos alrededor de cuatro mil adultos mayores, queremos saber dónde están, cómo viven para poder ir a dejarles los remedios a sus casas. Queremos, de alguna manera, devolverles la mano. Queremos una comuna más inclusiva y que sea grata para vivir. Más humana en todos los aspectos, desde la salud hasta la atención de público en el municipio”.

-En lo político, ¿piensa volver a su partido de origen, la DC?

“Tengo tantos amigos hoy día en la DC, tantos amigos en todos los partidos. Tengo esa libertad hoy día de ser independiente, que nadie me raya la cancha y estoy súper cómodo así. Tengo respeto por la Democracia Cristiana, mi hijo es DC, por lo tanto, tengo un nexo súper importante, tengo muchos amigos, pero no he pensado volver hasta este momento. Creo que es difícil que vuelva. En la municipalidad tengo gente desde el Partido Comunista hasta la UDI”. 1601