Dieciséis años han pasado desde la trágica muerte del animador y bailarín Said Salomon Merlez Patino, conocido en el mundo artístico como el “Negro Said”, quien tras protagonizar un accidente automovilístico el 12 de agosto de 2002 cerca de Los Vilos, falleció luego de haber permanecido en estado de coma profundo y con un politraumatismo por una semana.
Tras el accidente, en que venían otras tres personas que resultaron con lesiones menos graves, fue trasladado al hospital San Pedro de Los Vilos. Más tarde llegó al hospital Carlos van Buren de Valparaíso y debido a su gravedad, fue trasladado al Hospital Naval Almirante Nef, donde fue operado, pero no pudo resistir a las lesiones falleciendo un 19 de agosto.
“El “negro Said” era el alma de la universidad en esos tiempos y tenía un corazón gigante para ayudar a sus amigos. Tenía una personalidad que desbordaba era cosa de ver en la Semana Papayo como era el líder de las alianzas”, Claudio Díaz, amigo con quien compartió en sus años de universidad
Conocido por sus apariciones en televisión y su trabajo de animar al público en eventos masivos, como el Festival de Viña del Mar, el coreógrafo de sólo 31 años era muy querido en el ambiente. Antes del accidente participaba con regularidad en programas de televisión como el matinal de TVN y en “Morandé con Compañía”, de Mega.
Si bien el Negro Said nació y pasó gran parte de su vida en Copiapó, al salir del colegio se trasladó hasta La Serena, en donde cursó Ingeniería Civil industrial en la Universidad de La Serena. Fue en esa casa de estudios donde comenzó a destacar con su talento artístico. Ahí animó algunas fiestas universitarias y se transformó en el rey de las animaciones en discotecas serenenses.
Fue tanto su éxito en las animaciones que cuando le faltaban pocos meses para terminar su carrera, abandonó los estudios para trabajar en Santiago. Ahí comenzó su ascendente carrera.
Incluso el propio Mario Kreutzberger, Don Francisco, al enterarse de la muerte de Said valoró la constancia del bailarín y su talento para entretener: “Lo conocí en Estudio Gigante, donde empezó a animar. Muchas veces lo orienté sobre la animación. Él tenía muchas ganas de avanzar en este campo”, señaló en su oportunidad el destacado animador.
SU PASO POR LA ULS Y EL CIRCO MINERO
Los que conocieron a Said Merlez sostienen que su principal escuela en los escenarios fue su paso por el Circo Minero de la ULS, en la que desplegó todo su talento. Realizaba varios actos, pero destacaba uno de malabarismo que realizaba arriba de una bicicleta.
Claudio Díaz, amigo con quien compartió en sus años de universidad, recordó que conoció al “Negro” cuando estudiaba pedagogía a mediados de los años 90 y lo recuerda como un tipo multifacético y lo principal una gran persona.
“El “Negro Said” era el alma de la universidad en esos tiempos y tenía un corazón gigante para ayudar a sus amigos. Tenía una personalidad que desbordaba, era cosa de ver en la Semana Papayo cómo era el líder de las alianzas, cómo cantaba, actuaba y animaba, salía en todas las actividades. Tú lo podías ver en los pasillos de ingeniería o la biblioteca, pero mayoritariamente en el Circo Minero preparando sus actos o también arbitrando los partidos del torneo intercarreras de la universidad. Los fines de semana en el escenario de la discoteca de moda. Yo creo que en la ULS en esos tiempos no había quien no lo conociera, no importaba qué carrera estudiaras, en más de una oportunidad se cruzaron con él”.
En los pasillos de la Facultad de Ingeniería la Universidad de La Serena ya es un mito su figura, los nuevos alumnos han escuchado más de una anécdota sobre él y sus profesores lamentan que el coreógrafo haya decidido dejar la carrera, faltando tan poco por terminar sus estudios.
“A Said le faltaba muy poco por salir de la carrera de ingeniería, pero a los proyectos que le ofrecieron era imposible decir que no. Se fue a perseguir sus sueños y lo vimos cómo los había logrado siendo tan joven. Cada vez que venía a la zona pasaba a saludar a los profesores, secretarias y sus compañeros que quedaban, se veía feliz”, señala uno de sus docentes.
Una de las personas que trabajó en los inicios de Said en las discotecas fue Orlando Jara, quien destaca la personalidad y simpatía que transmitía el bailarín de sus inicios.
“Yo trabajaba de guardia y veía cómo él encendía el público en las noches. Los hacía bailar a todos. El local empezó a hacerse más pequeño, porque todos querían verlo, en el verano la rompía con los argentinos. Creo que fue el primero que se paró en un escenario y comenzó hacer coreografías para que el público lo siguiera, hoy eso parece normal, pero en el 94 o 95 era un espectáculo novedoso”.
Jara sostiene que el público que más lo seguía eran las mujeres, pero los hombres igual lo consideraban un tipo simpático.
“Como bailaba bien, tenía mucha labia y una personalidad arrolladora con mucha simpatía, las mujeres se volvían locas por el Negro. Más encima llegaba en una tremenda moto, el resto sólo mirábamos cómo lo rodeaban las mujeres” recuerda.
UN REFERENTE
El productor de eventos y animador, Rodrigo Díaz manifestó que conoció a Said cuando comenzó en la discoteca Sundance y trabajaba en la barra.
“Lo veía en el Circo Minero de la ULS y luego haciendo las animaciones en la barra de Sundance, en ese local hacía de todo e incluso en su momento trabajó de guardia. Fue uno de los primeros que se atrevió a subir al escenario de una discoteca y que luego se transformó en un fenómeno como era el baile entretenido”.
Díaz sostiene que si bien no fue el primero en los escenarios, sí fue el que más se destacó en esa área.
“El ‘Negro’ si bien fue el segundo o tercero que hacía los bailes, provocó un fenómeno. Se subía al escenario y lograba que el público se preocupara de él y lo siguiera, eso aunque tengas mucho tiempo en los escenarios y si no tienes esa chispa, estás sonado. Said lograba que lo siguieran los hombres y las mujeres con sus pasos”.
El productor de eventos y animador del programa “El Submarino” recuerda que a Said, tras hacerse conocido en la noche de la región, lo ven personas de una marca y comenzó a trabajar en Santiago y en las playas con los famosos team.
“Incluso llegó a trabajar con Don Francisco en el centro de eventos ‘Estudio Gigante’. Estando en Santiago comenzó a meterse a los canales de televisión”.
Díaz señaló que lamentablemente su muerte lo pilló cuando estaba consolidando su carrera.
“Lo estaban llamando de los canales de televisión. Me tocó hacer un team de verano de Coca Cola en el que llamaron al “Negro” para que hiciera un video de avanzada de cómo iba ser esta promoción que era a nivel nacional. Por eso, su muerte fue terrible, sobre todo para nosotros que éramos de la zona y él era un referente” recordó.
ADIÓS EN LA SERENA
Un 19 de agosto de 2002 fue el día que dejó este mundo y como sus restos fueron trasladados a su natal Copiapó donde vive su familia, al pasar por la ciudad que lo albergó en sus años universitarios fueron cientos las personas que llegaron a la pasarela del Líder para observar pasar los restos del querido bailarín y brindarle un emotivo adiós.
Estuvieron presentes sus amigos de la universidad, del gimnasio, de las noches de discoteca y del Circo Minero, quienes brindaron un espectáculo en su honor, además de cientos de personas que lo admiraban y seguían su trayectoria. Para los presentes fue un emociónate adiós a una joven figura que dejó su huella por donde pasó. 1202iR
Recuerdo de su figura
En el lugar en que falleció en el kilómetro 230 de la Ruta 5 , cerca de Los Vilos se instaló una animita en la que no falta el conductor que se detiene para recordar al querido “Negro”.
Además, en el mausoleo de la familia Merlez Sagua ubicado en el patio 13 del cementerio de Copiapó, existe una escultura del bailarín efectuando un paso de baile y que siempre está repleto de saludos, flores y globos, pero también de agradecimientos, solicitudes y favores de todo tipo para el gran “Negro Said”.