Tres jornadas llenas de experiencias y vivencias recopiladas a través del trabajo realizado por las comunidades agrícolas Peña Blanca y Cerro Blanco de Limarí, fueron las que vivió durante los días 5, 6 y 7 de noviembre, el equipo del Programa de Naciones Unidas para REDD (ONU REDD), junto a especialistas de FAO, PNUD y ONU Medio ambiente; el director regional de Conaf, Eduardo Rodríguez y miembros del Departamento de Desarrollo y Fomento Forestal de la corporación.
La gira, que se enmarca dentro de la auditoría que ONU-REDD realiza en todo el país a los proyectos ejecutados a través de Conaf, comenzó el miércoles 5, en el auditorio de la corporación, con una presentación general por parte del equipo técnico, representado por el jefe del Departamento de Desarrollo y Fomento Forestal (DEFOR), Diego Morales, donde entregó un balance del proyecto que fue llevado a cabo por las comunidades agrícolas Peña Blanca y Cerro Blanco de Limarí.
La jornada más significativa, según Carolina Massai, Coordinadora General de la Unidad de Cambio Climático y Servicios Ambientales de Conaf en Santiago, fue la que se llevó a cabo este martes 6, cuando los representantes de la gira, pudieron ver en terreno, las obras de mitigación y restauración de suelo degradado, desarrolladas por las mismas comunidades, con el asesoramiento técnico de Conaf.
La jefa de Gobernanza y Desarrollo Sostenible del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo PNUD en Chile, Paloma Toranzos, explicó a El Ovallino que esta primera gira técnica ONURedd sirvió para evaluar resultados y medir alcances de los proyectos.
“El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) está apoyando a la Conaf, en la implementación del programa nacional ONURedd que es un programa que busca trabajar en diferentes territorios del país y lo que estamos haciendo es recorriendo el país y los proyectos piloto que se están implementando, y estamos evaluando cómo han ido avanzando sus resultados, cuáles han sido los beneficios, y las alianzas que han generado con las comunidades y las autoridades de la región, así que hemos entrevistado a la gente, a los servicios”, indicó Toranzos.
Con respecto a la participación de las comunidades indicó que fue una “grata sorpresa” darse cuenta que después de muchísimos años de trabajo y colaboración se ha logrado que las comunidades estén bastante empoderadas en mejorar sus territorios.
¿Cómo ven el tema de la mujer en los aspectos de temas ambientales?
Para el Pnud, lo más importante al implementar un proyecto es que exista una visión de desarrollo sostenible en el programa a implementar, es decir, que no sólo estamos protegiendo el medio ambiente, sino también están impactando a nivel social y a nivel económico en ese territorio. Cuando tú conservas y proteges un ecosistema puedes generar “empleos verdes”, por lo tanto reduces la pobreza, y puedes generar nuevos instrumentos económicos, movilizar recursos que te permitan continuar esas actividades que están vinculadas a proteger ambientalmente un territorio específico. El PNUD lo que intenta promover es una mirada integral al desarrollo, no solamente estamos protegiendo y tratando de restaurar un cerro porque sí. Y en eso la mujer también tiene un rol clave, nosotros abogamos por la equidad y paridad de género, nos interesa que los programas tengan un enfoque de género. La mujer tiene mucho que decir en estos casos.