Por Laura Soto.
La comunidad evangélica regional rechazó el proyecto de ley que permite a las personas transgénero gozar de un reconocimiento legal de su sexo en el registro civil, el cual fue aprobado el día martes 24 de enero en la Cámara de Diputados con 68 votos a favor y 35 en contra.
Las principales autoridades de la comunidad evangélica se reunieron al frente del edificio del Gobierno Regional para presentar el documento que indica cada una de las razones por las cuales se encuentran en desacuerdo con el proyecto, el cual será entregado en la intendencia al jefe de gabinete.
"Estamos preocupados por esta situación. Este proyecto de ley entendemos que es demasiado subjetivo, y no tiene fondo científico o de otra área que permita hacerlo sustentable para que llegue a ser una ley en nuestro país", afirma Jorge Stevens, vicepresidente del Consejo Regional de Pastores Evangélicos.
- En cuanto a los niños que ya están presentando síntomas de disforia de género, ¿ustedes como comunidad evangélica que proponen para poder ayudarlos?
"La iglesia evangélica siempre ha trabajado para enfrentar y apoyar los problemas generales de las personas, y por supuesto que en esta área también. Creemos que una orientación en una consejería adecuada puede permitir que los niños puedan superar los diferentes problemas que están viviendo, entre ellos los que tienen que ver con la identidad de género".
- ¿Ustedes están de acuerdo que los jóvenes a partir de los 18 años puedan realizarse tratamientos para cambiarse de género?
"Nosotros creemos que Dios creo hombre y mujer, esencialmente y básicamente es eso. Ese es el modelo, y lo que permite que la sociedad pueda estar bien firme y fundamentada, entonces cualquier cambio de sexo ya no entra dentro de una normalidad, y eso es lo que nos preocupa. Así también nos preocupa que una corriente que permite que algunos adolescentes frente a situaciones problemáticas, frente a indefiniciones que en algún momento tienen, puedan tomar decisiones que después traigan graves consecuencias".
Otras autoridades de la comunidad evangélica se refirieron a la situación de niños y adolescentes frente a este proyecto, el cual establece, según la ministra vocera de Gobierno, Paula Narváez, "que toda persona tendrá derecho a cambiar de sexo registral, lo que podría interpretarse como que incorpora a niños, niñas y adolescentes". Además, se votó en contra de la implementación de un proceso judicial especial para este grupo etario. No obstante, este punto puede modificarse en cuanto vaya avanzando la tramitación del proyecto, el cual ya lleva cuatro años de discusión.
"Nos parece un poco preocupante e inaceptable que se haya apurado tanto este proyecto de ley de ideología de género, ya que atenta en contra de la niñez, (...) y creemos que ellos deben tener una asesoría. Son etapas de cambio en los niños, donde ellos no pueden decidir por sí mismos (...)", sostiene Silvia Zepeda, presidenta del Consejo de Pastores de La Serena. "Son situaciones puntuales (las que se presentan), pero aquí estamos viendo una masificación del tema, y eso es lo peligroso (...)".
"Nos parece inaceptable e imprudente que por motivo de pronto cambio de gobierno se de apuro en sacar adelante algunos proyectos que requieren mayor discusión y participación de la ciudadanía, promoviendo más bien una dictadura ideológica, que una efectiva y real urgencia nacional, obligando a avanzar con suma urgencia un pésimo proyecto de Ley de Identidad de Género. (...) La disforia de género es un problema que debe de ser tratado, más aún cuando la mayoría de los niños y adolescentes comprobadamente revierten esta situación", dicta el comienzo del comunicado presentado ante la intendencia.
El proyecto de ley pasará a su tercer trámite en el Senado, donde se llevará a revisión.
.