Municipio de Coquimbo trabaja en dos nuevos cementerios ante actual colapso

Preocupación existe entre vecinos y autoridades de Coquimbo debido al colapso que se presenta en el cementerio porteño, desde el año 2015 y que, a pesar de diversas soluciones, no se conoce del desarrollo de proyectos para enfrentar esta problemática.

Ya en la anterior administración se habilitaron nuevos nichos y se compraron dos terrenos, uno en Majada Blanca en el sector de Pan de Azúcar y otro a un costado del cementerio actual  para ampliar el camposanto.

Ya en el año 2015 el jefe de la Secretaría Comunal de Planificación (Secplan), Luis Henríquez indicaba que el cementerio municipal estaba colapsado y se iniciaría  la construcción de nuevas sepulturas en el terreno comprado en ese entonces, ubicado en calles Recoleta y Colón, lo que aún no sucede.

LAS SOLUCIONES. Consultado por la situación, el alcalde Marcelo Pereira señala que este tema está en su plan comunal “Contigo más Coquimbo” y es de suma urgencia resolver.  Explica que se está trabajando en  las dos vías propuestas por la anterior administración que quedaron inconclusas.  Incluso, el cementerio que se ubicaría en Majada Blanca ya contaría con un prediseño. 

“En el sector de Pan de Azúcar o más alejados,  cuando pierden a un ser querido tienen que venir para acá lo que genera gastos.  Por qué no tener un cementerio  grande y bonito en el sector rural, lo que también ayuda a que se pueda descongestionar el actual”.

Respecto ala ampliación que se trabajaba desde hace varios años en el terreno  aledaño al cementerio,  el jefe de proyectos de la Secplan, Luis Zepeda, explica que no se pudo concretar, ya que al presentar los documentos  a la autoridad sanitaria,  ésta fue negada debido a que el actual camposanto no cuenta  con resolución sanitaria. 

Por otra parte,  es imposible regular el  cementerio porteño, ya que no cumple con las normativas vigentes. 

Es por ello que se está trabajando en  el proyecto de un nuevo cementerio , sólo con nichos,  en este terreno. Ya se están realizando los cálculos para la capacidad máxima y la inversión superaría los $300 millones. 

“A finales de diciembre  estaría terminado el proyecto para realizar los tramites respectivos en el Servicio de Salud y contar con la resolución y que tenga una aprobación esta construcción”, agrega.

MAYOR CELERIDAD. Por su parte, los concejales exigen mayor rapidez en las soluciones para un problema que afecta a toda la comunidad.

Mario Burlé señala  que se ha conversado este tema al interior del concejo y que “ se debe trabajar urgente y estamos recabando información,  porque entiendo que no hay ningún avance”.

Por su parte, el concejal Fernando Viveros está preocupado también  de transparentar la administración del  cementerio porteño, debido a que este colapso no genera ingresos municipales, pero existen  funcionarios contratados  que cumplen funciones en otros departamentos, debido a la Ley de Plantas Municipales.

Por último,  el concejal Guido Hernández  señala que se deben buscar soluciones mientras se concreten estos proyectos, por ello propone “que el municipio realice convenios con crematorios para quienes lo deseen y también generar un monolito para recordar a los fallecidos que han sido trasladados por este colapso”, concluye.