Hace 25 años llegó desde Arica Guillermo Castro junto a su familia a la localidad de Alcones, en la comuna de Ovalle.
Al notar la falta de alternativas para el pastoreo de animales y el riego, decidió ser perseverante y postular a cada proyecto de INDAP. De a poco, le fue ganando al secano.
"Lo que tengo, lo tengo gracias a INDAP. Yo me lo he ganado, con mi esfuerzo. Si usted no usa su cabeza no puede surgir, debemos ser organizados y trabajar duro y con paciencia. Usted ve como regamos y para eso, tenemos que estar siempre atentos", comentó Guillermo Castro.
Apoyo del Estado, pero ante todo, ingenio, fueron fundamentales para que este criancero pudiera implementar un moderno sistema productivo, que abarca desde el mejoramiento del suelo, riego tecnificado, extracción de agua de pozos, obras de almacenamiento de alimentos y hasta una quesería.
Un modelo de trabajo integral que fue conocido y destacado por la intendenta Lucía Pinto.
"Un verdadero ejemplo de desarrollo de proyecto y aprovechamiento del entorno. Su trabajo ha generado una producción sustentable e innovadora, tal como quiere el Gobierno del Presidente Piñera para la agricultura familiar campesina. Con el trabajo que ha aplicado don Guillermo estamos seguros que podemos desarrollar negocios exitosos, manteniendo las características y la tradición de los crianceros”, señaló la jefa regional.
“Con el trabajo que ha aplicado don Guillermo estamos seguros que podemos desarrollar negocios exitosos, manteniendo las características y la tradición de los crianceros”, Lucía Pinto, intendenta regional
El agricultor cuenta que también ha invertido, por cuenta propia, una gran cantidad de recursos, pero ha sido el asesoramiento de INDAP, lo que lo ha impulsado a seguir perfeccionando sus proyectos.
”Todos tenemos la capacidad de hacer bien las cosas, lo que nos falta es ejerce. En mi caso, gasté mi plata, escarbé el terreno para buscar agua, y lo que tengo es porque me he sacrificado por mí y mi familia", dijo Guillermo.
En la práctica, aseguró Castro, esto le ha generado un ahorro significativo, pudiendo educar a sus hijas y mantener a su familia. Produce cerca de 50 mil pesos al día, y gastando la mitad por concepto de alimentación de sus 24 cabras, las que aprovechan la alfalfa, maíz, soja y la avena.
Para el seremi de Agricultura, Rodrigo Órdenes, "esto es lo que queremos replicar en el mundo rural. Queremos implementar un sistema que nos permita controlar toda la cadena productiva del ganado caprino. Esto es un negocio que le ha entregado muchos beneficios a don Guillermo y su familia”.
De esta manera se plantea una alternativa sustentable y un modelo de trabajo innovador que permite producir en condiciones adversas, aprovechando los diversos mecanismos de ayuda estatal, esfuerzo y paciencia.