Han sido semanas intensas para el intendente Pablo Herman Herrera, quien ha debido enfrentar el desafío del proceso de vacunación y, paralelamente, apuntar a que la calendarización se aplique en forma oportuna, eficiente y sin “saltarse la fila”, como ha insistido en forma sistemática. Por supuesto, las polémicas y los desencuentros con algunos alcaldes, en específico con el jefe comunal de La Serena, Roberto Jacob, terminó en un problema que el propio edil calificó como “artificial”, luego que decidiera anticiparse e inocular la semana pasada a bomberos y a recolectores de residuos.
Pero hay más que sólo debate, pues para el intendente Herman la prioridad está en continuar con el proceso de vacunación en forma ordenada.
-¿Qué sucede específicamente con los pacientes crónicos, intendente?
“El proceso de vacunación ha sido bastante exitoso, hay que decir que pese a todo ha existido una muy buena coordinación entre el Gobierno y los municipios. Por eso, también se ha pedido en todo momento respetar la calendarización. En ese sentido, una de las mayores preocupaciones que hemos tenido es la vacunación a los adultos mayores. Todavía estamos en 50%, por eso estamos invitando a los que faltan para que se acerquen durante esta semana . Respecto a los pacientes crónicos, estamos conscientes que en el primer trimestre de este año deben estar vacunados, junto a todos nuestros adultos mayores”.
-¿Insiste en que ha habido intentos por “saltarse la fila”?
“Esto lo han dicho los expertos, porque existe todo un cronograma y una logística por traer vacunas. Se suma que la mayor cantidad de personas que han dejado de existir son precisamente adultos mayores, por eso nuestro llamado es el mismo. Sabemos que existen labores esenciales, como son las que realizan Bomberos, el transporte público o el transporte de carga. El problema es que si se salta la fila una persona, después todos tendrán derecho a hacerlo. Por eso hemos sido tan majaderos”.
-¿Quizás se debió haber dejado establecido en forma clara una priorización que no diera lugar a ‘resquicios legales’, como pasó en la comuna de La Serena?
“Yo creo que la calendarización ha sido clara y además se va comunicando semanalmente. Sostengo que llevamos un buen proceso. Se podrá decir que se trata de un solo municipio, pero ¿que pasa si todos tomaran la decisión de hacerlo así? Sería muy problemático y perjudicamos a los que vienen detrás”.
-¿Más allá de que se trate de un cifra “marginal”, como habría dicho el alcalde Roberto Jacob?, pues entre bomberos y recolectores sólo serían 500 personas en La Serena...
“Es que un municipio son 500 personas y vamos sumando. Si se diera un proceso sin un necesario control, sería muy negativo”.
POLÉMICA EN POCOS CARACTERES
-Intendente, ¿cómo se siente tras la delicada situación en torno al tweet, que le involucró, en respuesta a esas determinaciones del Municipio de La Serena?
“Quiero dejar bien en claro que cuando me enteré de este tweet lo primero que hice fue llamar al alcalde, para comentarle que no había sido yo quien lo escribió. Siempre he creído en una relación respetuosa, directa pero respetuosa. Cuando tengo un problema con alguien, lo enfrento personalmente. Lamentablemente, nos dimos cuenta de un error humano del jefe de Comunicaciones, lo que terminó en su desvinculación. Son errores significativos y por eso me dolió mucho, porque hubo cuestionamientos de algo que yo no hice”.
-¿Duele tomar una decisión así?
“Existen relaciones humanas, sé que las personas pueden equivocarse, y por eso cuesta tomar esas determinaciones tan duras”.
¿DECISIÓN EXTREMA?
-Intendente, ¿mantiene su postura contraria a una cuarentena total?
“Las cuarentenas responden a una definición nacional, puesto que desde nivel central se maneja toda la información hospitalaria. Desde ese punto de vista, hemos dispuesto de medidas regionales para poder contener la movilidad en base a la gran cantidad de personas que han venido a la zona. Realizamos un plan de descongestión vial en la Avenida del Mar, con las restricciones vehiculares, porque nos dimos cuenta que las cuarentenas no se respetaban. De esta forma, estoy seguro que podemos fiscalizar de mejor manera, estoy convencido de que si llegamos a una cuarentena, efectuar un control es mucho más complicado. Creo en la libertad y en la responsabilidad de cada uno, y nuestro llamado es a la conciencia. La idea es trabajar en conjunto y respetar las medidas, lo que haremos junto con las policías y con el Ejército y los funcionarios de salud”.
-¿Cuáles son las expectativas, considerando el desgaste enorme de los funcionarios de salud?
“Sólo esperamos que esta segunda ola vaya bajando, porque es un hecho real que la red hospitalaria está estresada. Por aquello, felicitamos a todos los trabajadores, que incluso han efectuado traslados hasta otras zonas del país si es que es necesario. En Santiago tenemos disponibilidad de camas y nuestras gestiones han permitido que también existan opciones en Ovalle”.
-En ese contexto, ¿considera que era necesario correr los riesgos y hacer sacrificios para mantener la actividad económica en marcha?
“Yo no hablaría de sacrificios. La Región de Coquimbo es la que alcanzó la mayor cesantía en 2020. Cuando asumí, teníamos un 15,9% y hoy vamos en un 12%, y no hay que olvidar que muchas familias viven de esta temporada. No queremos que esta crisis sanitaria pase a ser social y económica, por eso hay que saber escuchar a todos y así tomar definiciones. Creo en un equilibrio, siempre resguardando la salud de los habitantes, pero no podemos dejar de lado a emprendedores y familias que lo han perdido todo”.