El presidente de la Asociación Gremial Lincosur del transporte colectivo mayor, Manuel López, responsabilizó a las obras viales que se desarrollan en la Ruta D-43 por los retrasos en los servicios y las falencias de los mismos para sectores como los de Pan de Azúcar y Cerrillos.
El dirigente pidió disculpas a los usuarios que se han visto perjudicados el último mes, indicando que entendía la molestia, pero explicó que “hemos tenido una serie de problemas en las calles y en los cortes de camino, pero lo que más ha incidido es el corte de la Ruta 43 para el sector de Cerrillos y Pan de Azúcar, donde ha habido muchos reclamos”, indicó.
Lamentó que en este problema que se ha presentado “no hemos sentido el apoyo por parte de la autoridad. A nosotros como gremio no nos llegó una información de que se iba a interrumpir la ruta y lamentablemente nosotros somos los primeros sindicados como responsables porque los recorridos no se cumplen y la gente queda sin movilización”, dijo.
Según López, cuando se toman medidas de cortar vías y no se les comunica, se sentían pasados a llevar, subrayando que se corta la ruta, se producen tacos tremendos y ellos dependen de un banderero para poder circular. “Es una persona que no dosifica bien los tiempos. No sabemos quién regula eso, quién es el encargado, quiénes solicitan los permisos a las autoridades pertinentes para que nos avisen y nosotros estar preparados y que la comunidad también sepa”.
Los recorridos
Los recorridos que se han visto más afectados y que son de la línea Lincosur son las variantes 6, 9, 12, que conectan desde el sector de Las Compañías, pasando por Tierras Blancas y cruzando por Pan de Azúcar, Cerrillos, Nueva Vida y Coquimbo. “Todas esas variantes se ven afectadas por un corte de ese tipo en la vía y la gente que no está informada las emprende con nosotros”, señaló Manuel López.
Por su parte, el tesorero de la Asociación Gremial Lincosur, Jorge Campusano, corroboró lo anteriormente señalado agregando que son unas 2.500 personas las que se ven afectadas y que se quedan sin movilización para esos sectores rurales, muchos de los cuales deben concurrir a su trabajos y a sus lugares de estudio, por lo que no es un tema menor.
Mencionó que además de no provocar ellos el problema, el Ministerio de Transportes les está enviando cartas donde se les llama la atención por no estar cumpliendo las frecuencias de los recorridos. “Para cumplir nuestra función bien, las autoridades tienen que darnos las condiciones para poder desplazar a la gente sin ningún problema”, indicó Jorge Campusano.
Recordó que esto no es la primera vez que ocurre, puesto que en noviembre del año 2015 también hubo cortes y “nosotros tuvimos que tomar el toro por las astas e instalar un terminal provisorio en el Barrio industrial para evitar los grandes tacos que no permitían cumplir los servicios”.
Otros horarios
Los dirigentes afirman que ellos no se oponen al progreso y el desarrollo, especialmente vial, pero creen que debe haber coordinación con la empresa que construye los caminos, precisando que perfectamente sin paralizar las obras, éstas podrían desarrollarse en otros horarios. Citan como ejemplo, que los trabajos podrían iniciarse después de las nueve de la mañana y no a las siete, que es cuando se moviliza el mayor número de personas.