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Lía Utman, es una alumna de octavo básico con promedio de calificación de 6.2. Aunque su apoderada Marcela Castillo la postuló a varios colegios de la comuna de Coquimbo bajo el Sistema de Admisión Escolar, la joven no quedó admitida en ninguno, por lo que tuvo que esperar a la segunda etapa del proceso, en la que tampoco pudo acceder a un cupo.

Aunque fue derivada al colegio Diego Portales tomando en cuenta su lugar de residencia, tanto la estudiante como la madre no quedaron conformes descartaron la opción. Aún esperan la oportunidad para conseguir un colegio donde la menor se sienta a gusto.

“Me siento frustrada, yo tenía expectativas de tener una buena base porque quiero ir a la universidad y es fome sentir que no tengo colegio. Todavía no sé si voy a estar en algún establecimiento o tendré que hacer exámenes libres (…)”, confesó a El Día Lía de 14 años de edad, quien desea entrar al colegio Francis School, que pasó a ser una corporación sin fines de lucro.

Este fue uno de los casos atendidos por la Ministra de Educación, Marcela Cubillos, durante su visita este martes a la región. Tras pasar por el departamento donde viven vive Lía y su mamá, se dirigió al hotel Costa Real para sostener un encuentro con otro grupo de apoderados que por diversas razones aún no logran vacante para sus hijos o representados en un colegio de preferencia.

Problemas que la ley no contempla

La autoridad nacional señaló que algunas de las situaciones son “dramáticas” y al final se convierte en una especie de “educación obligada para ellos”, pues más del 80% de los casos que se presentan en el país de niños sin matrícula es porque los apoderados no están de acuerdo con el colegio que les asignaron.

“Estamos haciendo un recorrido porque llegó la hora que el Ministerio de Educación escuche a los papás y a los apoderados en general, porque realmente aquí se hizo una ley sin escucharlos a ellos, pero sí en base a la opinión de Centros de Estudios o a expertos (…) hoy día, a un año de la aplicación en todo Chile, salvo en la Región Metropolitana, ya tenemos muchas víctimas de este sistema de admisión escolar y estamos jugados por poder cambiarlo y mejorarlo”, aseguró Cubillos.

Uno de los grandes problemas, según explicó la ministra, son los casos de alumnos con alto rendimiento que no quedan en el establecimiento al que aspiran, ya que no se considera el mérito académico. También se han presentado inconvenientes con hermanos que no ingresan en el mismo colegio o con los niños que tienen necesidades especiales, ya que “para el sistema son solo un RUT”.

Complejas situaciones

Tania Rojas, una de las apoderadas que asistió a la reunión con la ministra, relató que desde el año 2017 su hija sufrió bullying en el colegio Santo Tomás de La Serena, se hicieron las denuncias pertinentes y por orden médica se vio en la necesidad de dejarla como alumna libre, al igual que a su hijo.

“Al momento de postularlos para la educación tradicional el sistema los rechaza y cuando se incorporan los datos personales aparece que no figura registro de ellos en ningún sistema educacional. Ya llevo dos años en eso y ninguno de los dos tiene colegio”, explicó.

Las autoridades le dijeron que su hija no puede volver al sistema educativo habitual debido a su edad y que además sería un riesgo debido a los episodios de acoso.

“Lo que más están apuntando es al problema que hay con las postulaciones, pero aún no ven mucho  el tema de la reinserción o cuando hay otro tipo de problemáticas (…) en estos momentos la opción que tengo es dejarlos con la educación en casa, ya que no puedo optar por un particular”, afirmó.

En la misma línea se expresó la apoderad Evelyn Núñez, quien denuncia discriminación por género a su hijo de 12 años por parte de la directora de su colegio, y lo quiere cambiar porque es la tercera vez que repite curso en el recinto.

“Espero que este gobierno vea en sí a los niños, que son seres humanos con sentimientos como cualquier otro, no son un número o un RUT, y más hacer énfasis en aquellos que están pasando por un tema emocional”, manifestó.

¿Cuál es la solución?

La ministra reconoció que el ministerio está obligado a aplicar la ley actual, sin embargo, recordó que se elaboró un proyecto de ley para incluir varios criterios, entre ellos el reconocimiento al mérito académico, ampliar la opción de cupos para hermanos o niños que vivan en un mismo hogar, y asegurar más cupos para los alumnos vulnerables.

“Es un sistema que a los padres les impusieron y pone una barrera para la elección de los colegios; es ciego en la información y respecto a las necesidades y capacidades especiales que tiene cada niño (…) aunque este año tuvimos que hacer uso del mismo, al terminar el primer proceso de admisión mandamos un proyecto para cambiar este sistema y hacerlo más justo porque no vamos a esperar otro año con estos mismos problemas y fracasos”, acotó.

Por su parte la intendenta regional Lucía Pinto, reiteró que se debe trabajar por una admisión justa, lo que queda reflejado en los casos sin resolver.

“Debemos seguir trabajando de manera que los padres tengan derecho a elegir el modelo y dónde quieren que sus hijos estudien”, apuntó. 6101i