“De estos vamos a sacar muchas lecciones, para no repetir los errores el próximo año”

En diciembre pasado, la Secretaría Ministerial de Educación se enfrentó a un complicado reto; atender cerca de 400 casos de alumnos que por distintas razones no habían podido concretar el proceso de matrícula en algún establecimiento de la región.

Jornadas extraordinarias de atención fueron anunciadas y entre seis funcionarios recibieron hasta 50 personas diarias, para buscar una solución definitiva a su problema con la plataforma del Sistema de Admisión Escolar (SAE). Aun así, más de 30 casos quedaron pendientes por resolver después del 25 de febrero, cuando comiencen las clases formalmente.

Así lo informó el seremi de educación, Claudio Oyarzún en entrevista con El Día, instancia que aprovechó para dar más detalles sobre las indicaciones propuestas por el Gobierno a la Ley de Admisión, entre ellas el reconocimiento al mérito académico, ampliar la opción de cupos para hermanos o niños que vivan en un mismo hogar, y asegurar más cupos para los alumnos vulnerables.

¿Cuál es el alcance de los criterios que se pretenden añadir a la ley?

“Hemos dado este paso pensando en perfeccionar el Sistema de Admisión, dadas las circunstancias que hemos ido encontrando. Básicamente apunta a tres nuevos criterios: El primero es poner nuevamente en vigencia el mérito académico y que eso le permita a los apoderados postular a sus hijos en el establecimiento que él quiere, pero que efectivamente quede ahí. Normalmente es en liceos que están calificados por la agencia de calidad como de nivel alto.

La idea es que a partir de séptimo básico estos recintos tengan la libertad para establecer un criterio de admisión propio, ya sea por notas, entrevistas, características o capacidades de los alumnos, ya que todo eso está asociado el mérito académico. Queremos evitar así un sistema aleatorio como es ahora donde todos postulan, pero no todos los que quieren quedar en un determinado colegio lo logran.  

Luego está el tema de consanguinidad o de hermanos. La propuesta actual dice que solamente ingresan los que tengan hermanos en el establecimiento, pero la nueva indicación dice que  quienes vivan bajo un mismo techo podrían tener las mismas oportunidades de acceder. Yo lo he manifestado en varias ocasiones, una familia puede estar compuesta no solamente por hermanos, puede haber un primo, un niño adoptado, hijos de la pareja aparte, que también deben ser considerados, más allá del tema de si son hermanos directos o no.

Y un tercer componente es que en estos liceos calificados como de alto rendimiento, en cuanto a sus exigencias puedan aumentar en un 30% el porcentaje de alumnos vulnerables, lo que es una clara señal de que no es que se esté discriminando, al contrario se está pidiendo mayor cobertura para alumnos.

"Esperamos que nuestros diputados y senadores den una mirada transversal a esto, que entiendan que hay un bien común, que es tener un proceso de admisión justo para todos los alumnos de nuestro país", Claudio Oyarzún, Seremi de Educación 

A partir de eso, yo voy a interpretar que estos establecimientos van a generar mejores resultados, porque funcionarán con alumnos que efectivamente quieren alcanzar altos aprendizajes y de una u otra manera vamos a asegurar procesos de calidad, y acortar así la brecha que existe entre establecimientos municipales o públicos versus los particulares. Esto no significa que el resto de no cumpla los estándares, también tienen un proyecto educativo y todos sus alumnos tienen el derecho a una educación de calidad y de equidad.

¿Este nuevo proyecto tomaría en cuenta entonces la aplicación de estrategias para que los colegios públicos incrementen el nivel de exigencia y sean de mejor calidad? ¿O que no sean percibidos por la población como que son ‘malos’?

“Los liceos que ya están calificados como de alto rendimiento obviamente ya han dado prueba de eso, y quienes accedan ahí a partir de esta propuesta de ley son alumnos que tienen un buen mérito académico. En el resto de las escuelas es un deber natural, debe ser parte de su misión y de su visión convertirse o ser garantes de una educación pública de calidad.

Tampoco significa que nos vamos a enfocar solamente en los liceos de nivel alto. Al contrario, aquellas instituciones que a lo mejor tienen una calificación media, insuficiente o baja, el compromiso será dos o tres veces más grande para optimizar sus estrategias de trabajo, revisar las prácticas docentes y  generar condiciones propicias para los aprendizajes porque se invierten muchos recursos en potenciarlos. Es un deber intrínseco que tienen todas las escuelas y creemos que es una política de Estado fortalecer la educación pública”.

Se descartaría el sistema aleatorio entonces…

“El sistema va a permanecer porque es ley. Lo que se quiere hacer es agregar estos nuevos criterios que nos parecen importantes, sobre todo el del mérito académico. La ley está procurando que estos liceos de alta exigencia tengan la autonomía para establecer cómo acceden sus alumnos y que el criterio de selección sea propio”.

Inconvenientes sin resolver

A finales de 2018 fue notorio el reclamo de los apoderados porque sus hijos no quedaron donde ellos querían o porque ni siquiera pudieron completar el proceso de matrícula. ¿Cuál es el nuevo escenario que se presenta en materia educativa?

“Nosotros estamos definiendo caso a caso, lamentablemente en este momento los períodos escolares están en receso, hay vacaciones, y por lo tanto no podíamos continuar con este proceso de reasignación. Creemos que a partir del 25 de febrero este tema se va a reactivar y en ese momento vamos a entregar información a las familias que aún no han matriculado a sus hijos.

Creemos que es complejo que vayan a quedar en los establecimientos donde ellos postularon porque estos ya quedaron con sus matrículas cubiertas, pese a que nos encontramos con situaciones muy especiales

Tuve la oportunidad de conversar con una apoderada que me decía que su nieto quedó en un colegio que le queda a media hora de su casa y va a tener que pagar transporte escolar, entonces esas son las cosas que tratamos de revolver, pero es importante dejar claro que como Ministerio de Educación nos comprometemos a generar información, pero no somos los responsables de matricular.

“Hemos dado este paso pensando en perfeccionar el Sistema de Admisión, dadas las circunstancias que hemos ido encontrando", Claudio Oyarzún, Seremi de Educación 

De estos procesos vamos a sacar muchas lecciones, sobre todo las familias, para que no se repita el próximo año. Hubo apoderados que ni siquiera postularon en el sistema (…) también se cometieron errores importantes como por ejemplo, alumnos que estaban en un colegio pero los matricularon en otro, el estudiante quedó y sus apoderados aceptaron en un primer momento, pero después se arrepintieron y la ley decide que ese cupo se pierde, entonces es difícil”.

¿Cuántos casos atendieron en el último tiempo?

“Nosotros partimos con alrededor de 400 situaciones distintas, de un total a lo mejor mucho mayor, pero puntualmente lo que llegó acá y a través de una estrategia distinta pudimos atender hasta 50 personas diarias con un equipo de cinco profesionales de la Secreduc y uno de la Superintendencia de Educación (…) fue un trabajo bien coordinado, con mucho esfuerzo, creemos que dimos respuesta satisfactoria a la demanda y ordenamos el trámite. Ahora estamos atentos a lo que viene con el comienzo del año escolar 2019, para dar orientaciones claras y oportunas que permitan normalizar el proceso y garantizar la educación a todos nuestros alumnos”

¿Y Cuántos casos quedaron por resolver?

“Nos quedaron aproximadamente 30 casos que ya tienen una constancia en la Superintendencia. Sostuvimos una reunión de coordinación para analizar algunas situaciones.

Hubo casos en particular que los pudimos solucionar, realidades complejas como una de bullying, porque el sistema arrojó a la alumna en el mismo colegio donde estaba pasando esa situación, pero afortunadamente y gracias a la voluntad de unos sostenedores pudimos reubicarla en otro establecimiento donde quedó conforme tanto la alumna como su familia”. 6101i