Varios campus de la Universidad de La Serena amanecieron llenos de rayados con frases ofensivas hacia las autoridades y las paredes llenas de pintura, tras los acuerdos que esta semana para entregar algunas dependencias de la casa de estudios, pero sin que exista aún una fecha definitiva para volver a clases.
Un Equipo de El Día constató la situación al recorrer varias sedes de la ULS, entre ellas el campus Ignacio Domeyko, donde se desarrollan las carreras de ingeniería y el Isabel Bongard, donde se ven la mayoría de pedagogías y estudios de diseño.
Cabe recordar que el pasado miércoles un grupo de padres, acompañados del diputado Juan Manuel Fuenzalida se reunieron en la plaza de Armas de la ciudad para anunciar las posibles medidas judiciales que emprenderán, de manera que la universidad vuelva a sus actividades normales y los estudiantes puedan regresar a clases tras más de 70 días de toma.
Además, ese miércoles en la noche, los estudiantes de las carreras de Ingeniería firmaron un acuerdo para finalizar la toma y entregar las dependencias del campus donde ven clases.
Sin embargo, un grupo de manifestantes anunciaron que seguirán con las movilizaciones y "el paro continuará de manera indefinida".