Los proyectos para impulsar una alimentación saludable desde temprana edad están tomando protagonismo en el país, pues los altos índices de sobrepeso y obesidad mantienen preocupados a los especialistas en temas de salud y nutrición debido a la tendencia de elegir comidas altas en grasa, carbohidratos y azúcares, en vez de opciones más sanas.
Una de las instituciones directamente involucradas en los cambios que se quieren concretar a nivel de alimentación escolar es la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (Junaeb), la cual apoya líneas de trabajo específicas para reducir la ingesta de alimentos azucarados por ejemplo, promover laboratorios gastronómicos, instalar huertos escolares, realizar recreos entretenidos que fomenten la actividad física, y asegurar el consumo de vegetales o verduras en cada ración para los estudiantes.
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En entrevista con El Día, William Gutiérrez Yáñez, director regional de Junaeb, ofreció detalles sobre los proyectos para mejorar los planes de alimentación, -lo que incluye compras de productos más sanos a proveedores locales-, y de las estrategias que se implementan para cambiar hábitos, incluso desde el plano familiar.
¿Cuáles son las principales dificultades con las que ustedes se encuentran para hacer frente a los hábitos alimenticios de las familias en la región, porque al consultar con especialistas al parecer es un asunto más cultural?
“Hemos abarcado un poco más este tema de la obesidad con algunos programas como el ‘Contrapeso’, más las líneas de trabajo específicas que tiene la Junaeb (…) también es fundamental la capacitación y sociabilización a través de los establecimientos y este es un trabajo que se viene desarrollando para sensibilizar sobre estos temas a estudiantes, profesores, padres y apoderados, pero creemos que eso todavía no es suficiente, tenemos que llegar más allá y ver cómo podemos hacer esta sensibilización a partir del núcleo familiar por ejemplo, desde el hogar, es algo que tenemos que empezar a desarrollar también”.
Pero es complicado cambiar ese paradigma…
“Por supuesto, porque el enfoque de nosotros siempre está dirigido a nuestros estudiantes. Pero es difícil saber si el alumno en su hogar mantiene la cultura de una alimentación sana. Desde ese punto debemos sensibilizar, acompañar y hacer un poco más de seguimiento para que este cambio cultural tenga los resultados esperados”.
¿Se ha considerado la posibilidad de incluir a los nutricionistas como profesionales habituales de los colegios para garantizar una alimentación balanceada?, así como los psicólogos o fonoaudiólogos por ejemplo.
“Los programas de la Junaeb generalmente están dirigidos por nutricionistas y también por ingenieros en alimentos. Además, hay trabajos que desarrollamos en convenios con centros como la Universidad Católica del Norte para cubrir trabajos de prácticas con la carrera de nutrición. Es todo un trabajo el que hacemos y la idea es poder integrar también a la comunidad educativa porque nosotros necesitamos llegar de alguna manera a cambiar los malos hábitos alimenticios.
Si podemos generar más convenios de cooperación con las entidades educativas que dan estas carreras y que van a permitir una mayor sensibilización del tema sería ideal".
Garantizar colaciones a población vulnerable
¿Han podido cubrir la demanda de raciones en los centros educativos de la región?
“Es importante conocer un poco cómo es el proceso de entrega efectiva de las colaciones del Programa de Alimentación Escolar (PAE). Nosotros adjudicamos estas raciones a los establecimientos que están adscritos, y las autoridades de los mismos son las que tienen que hacer la solicitud formal para poder identificar el número de matrículas. En función de eso, a través de un sistema y las plataformas que se manejan acá en la Junaeb, son los estudiantes que están dentro del 60% más vulnerable los que reciben la ración, pues esas son las directrices que tiene el programa.
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Ahora, esa es la información de entrada que necesitamos para poder hacer una programación de la demanda real que va a tener cada recinto, pero hay información que es vital e importante que los sostenedores deben proporcionarnos. Por ejemplo, sobre la infraestructura del centro, especialmente la cocina y bodega, que sean acordes al estándar que manejamos nosotros para la licitación. También deben contar con una resolución sanitaria, más certificación eléctrica del SEC.
"Debemos sensibilizar, acompañar y hacer un poco más de seguimiento para que este cambio cultural tenga los resultados esperados”, William Gutiérrez Yáñez, director regional de Junaeb
Nosotros atendemos a nivel regional más de 577 establecimientos y todo el año están solicitando o aumento de ración o el poder incorporar si es un nuevo recinto educacional. Si contamos con toda la información y antecedentes este trámite es rápido, no más allá de una semana.
¿Cuántos niños están siendo beneficiados con el este servicio?
“Si lo vemos por el número de raciones diarias, -un solo niño puede tener hasta tres-, en la región este año estamos por sobre las 200 mil, un número que se puede ir incrementando si consideramos también los beneficiarios del programa de la Junji y la tarjeta BAES para alumnos de la educación superior”. 6101i