Una denuncia sobre altos niveles de radiación detectados por la Seremía de Salud en Integramédica La Serena llegó ayer a El Día, por ello determinamos investigar.
El denunciante, quien quiso mantener en reserva su nombre, señaló que “se detectaron problemas con el equipo con el que se toman las radiografías. Fueron unos especialistas para ver qué cantidad de radiación estaba liberando por cada disparo que se hace al momento de tomar radiografía, resulta que este equipo superó la cantidad aceptable por la normativa vigente”.
Desde la Seremía de Salud aclararon, que efectivamente acudió parte de su personal, pero fue por petición de la clínica, que realizó cambios en sus equipos.
El seremi Víctor Arancibia señaló que “se había solicitado por parte de la empresa una evaluación de dos componentes de un equipamiento de radiación ionizante, de una parte de un escáner y un equipamiento para radiografía simple osteopulmonar y en la evaluación para la autorización se encontraron valores sobre la norma cercanos a la zona de emisión, en los vestidores y en el acceso”.
Y agregó que “como eso constituye un cierto riesgo para la población y para los propios trabajadores se optó por prohibir el funcionamiento hasta que se logre compensar la pérdida de radiación que es obviamente por sobre la norma y esto tiene que estar absolutamente bajo el control de las normas estrictas de radiación ionizante”.
Desde Integramédica señalaron, a través de un comunicado, que el procedimiento se realizó el martes 18 de marzo, ya que “la compañía solicitó la visita de personal de la Seremía de Salud para asegurar el cambio de tubos de radiación presentes en el área de imágenes del centro médico. Éste es un procedimiento habitual que se realiza periódicamente para verificar la aislación de la sala. (...) De acuerdo con las políticas de calidad de la empresa, los equipos no volverán a utilizarse hasta que las mediciones registren un nivel adecuado”.
Para obtener más información acerca de posibles daños, nos contactamos con el tecnólogo médico de Imatec, César Pisello, quien indicó que “lo primero que se debe hacer es tomar varias mediciones con instrumentos distintos y de fuentes distintas, y verificar si realmente hay fuga”.
Y añadió que “es importante señalar que quienes trabajamos en imagenología sólo lo hacemos con rayos x, no rayos gamma, ni radiactividad, por lo tanto los niveles de radiación no son de alta energía, ni pueden ser acumulativos, cuando los hay la gente más expuesta es el personal, porque en la gente que se atiende no hay mayor problema, ya que el paciente está ahí muy poco tiempo, más aún si es en vestidores y accesos”, destacó el profesional.