Finaliza Gran Misión de los Dominicos en sector Las Compañías

Misioneros de la Orden de los Dominicos provenientes de diversos lugares del país, dieron por finalizada el viernes 21 de enero la Gran Misión en el sector Las Compañías de La Serena, actividad que los llevó a compartir durante una semana con familias de la zona para dar a conocer la palabra de Dios.

Con una Eucaristía que tuvo lugar en la plaza Hermana Adela y fue presidida por el padre Manuel Díaz, fraile dominico, en compañía del padre Daniel Dinamarca, párroco del sector, se celebró el cierre de la misión en la que participaron 117 jóvenes y adultos de Antofagasta, Concepción, Chillán, Santiago y Valparaíso.

En presencia de la familia dominicana, compuesta por los colegios y movimientos guiados por las Hermanas Dominicas de la Anunciata, Dominicas del Rosario, Dominicas de Santo Domingo y de los Frailes Dominicos, tanto los fieles de la comunidad, como los misioneros agradecieron la oportunidad de conocer más sobre el mensaje del Señor.

Irma Barraza, habitante del sector, expresó que el encuentro fue muy enriquecedor. “Uno aprende muchas cosas y son experiencias que aumentan la fe, porque el amor a Dios y a la Virgen es lo que a uno le da fuerzas”.

Por su parte, Francisco Yablonski, joven de Valparaíso quien participó como misionero, comentó que esta es la primera vez que participa en una actividad de este tipo. “Fue una gran experiencia de fe, ha sido de gran ayuda, tanto para la comunidad como para tener crecimiento personal”.

Mirta Flores, apoderada colegio Francisco Coll e integrante del Voluntariado Anunciatista, resaltó la importancia de reunir a la familia dominicana. “Han venido comunidades desde San Vicente de Tagua, Chillán, Valparaíso, Santiago, Antofagasta, como una forma de culminar los 800 años del Jubileo Dominicano”.

Por último, la hermana Elsa Astorga, religiosa Dominica de la Anunciata del colegio Francisco Coll, comentó que la acogida de la gente fue muy cálida. “Las familias nos abrieron las puertas físicas y las puertas del corazón también, ya que compartieron su vida con nosotros”.

Entre las actividades realizadas por el grupo misionero destacan las visitas a hogares y a enfermos, celebraciones litúrgicas, talleres de baile y manualidades, así como el encuentro con niños y jóvenes, como una manera de renovar la fe y esperanza desde una perspectiva religiosa.