- A pesar de que la efectividad de alguno de los métodos puede ser discutible, lo cierto es que los especialistas dicen que lo primordial es contar con el deseo de no consumir más cigarrillos
Fumar es el principal factor de riesgo de enfermedades cardiovasculares y accidentes vasculares cerebrales. También representa riesgo para el desarrollo de otros tipos de cáncer como el de esófago, lengua y vejiga. Estos son algunos de los riesgos a los que se expone si fuma de manera permanente. En nuestro país la prevalencia de este mal hábito ha ido incrementándose, llegando hoy a un 40,5%, pero en la Región de Coquimbo esa cifra aumenta a un 43,9%, según la Seremía de Salud.
Conociendo los graves daños que puede provocar este vicio, muchas personas logran dejar de fumar sin apoyo profesional. Sin embargo, para quienes no lo logran existen tratamientos farmacológicos y de terapia que ayudan a superar este vicio. Entre ellos se encuentra la consejería breve que consiste en una recomendación clara, personal y precisa, dada al fumador por un profesional capacitado en el tema, como un médico. También está la terapia personalizada o los talleres de grupos que son guiadas por gente perita en el tema.
Para combatir el consumo de cigarrillos, el programa del Laboratorio Pfizer utiliza internet para dar a conocer su mensaje. En la página web www.libredecigarro.cl se muestra un tratamiento que combina un medicamento sin nicotina (Pfizer) y un programa de apoyo.
El uso de la tecnología también se está aplicando en este campo, ya que la laserterapia llegó a Chile para ayudar a quienes quieren dejar de fumar y no pueden. El cirujano Jochen Rosenstock es uno de los profesionales que trajo este tratamiento al país. “Este es un procedimiento reconocido por la Organización Mundial de la Salud, y por desconocimiento no se ha difundido”, planteó.
El médico explica que el láser actúa sobre el hipotálamo, en el núcleo de la adicción. “Lo adormece y al hacerlo se produce una descarga de endorfinas, hormonas del placer, haciendo que el paciente se sienta bien cuando no está fumando. Al momento que bajan las endorfinas y se mantiene la nicotina, que, por decirlo de alguna manera, está pidiendo el cuerpo, el centro de la adicción está bloqueado y la persona no siente ganas de fumar”, puntualiza.
Otro método utilizado es la terapia de reemplazo de nicotina, por medio de chicles (Nicorette) y parches (Nicotinell), donde se reduce gradualmente la dosis de esta sustancia.
Dentro de la farmacología se usa el antidepresivo Bupropion o Welbutrin para reducir la abstinencia, pero requiere de un control médico. En esta categoría encontramos, además, la vareniclina, un medicamento que actúa bloqueando los efectos placenteros de la nicotina (al fumar) en el cerebro. Sin embargo, el Ministerio de Salud ha manifestado su preocupación por posibles efectos secundarios negativos.
Una técnica que promete en sólo una sesión quitar el hábito de fumar es la hipnosis clínica, un método que busca eliminar la ansiedad y elevar la autoestima.
El problema de la adicción a la nicotina o al cigarrillo es algo que preocupa tanto a las autoridades nacionales, como mundiales, ya que para una década más se espera que mueran unas 10 millones de personas por enfermedades derivadas del consumo de tabaco. 4101i