Más de 30 réplicas se han sentido en la localidad de Tongoy tras el sismo del jueves

Más de 30 réplicas se han registrado en la Región de Coquimbo desde el pasado jueves cuando, a las 20:19 horas, se produjo un gran sismo de 6,3 grados en la localidad de Tongoy.

Si bien los movimientos telúricos no han sobrepasado los 5 grados Richter, han causado alarma en la población, sobre todo del balneario coquimbano.

“Nos parece muy extraño que cada vez que ocurre un temblor tenga su origen en nuestro balneario. Ya muchos dicen en son de broma en las redes sociales, si no es en La Higuera, seguro que es Tongoy , pero nosotros estamos preocupados por esto” indica Juan Castro, vecino de la localidad de Tongoy.

Al respecto, el director del Centro Sismológico Nacional (CSN) de la Universidad de Chile, Sergio Barrientos, explica que en la Región de Coquimbo hasta las 18 horas de ayer se habían registrado más de 30 sismos.

“Preliminarmente el jueves ocurrieron dos temblores sensibles, el primero a las 18:50 ocurre muy cercano a la zona que se activó el pasado 19 de enero. Ese temblor ocurre al interior de la placa de Nazca, como respuesta a esfuerzos internos a esta placa. En cambio,  el de 6,3 grados Richter, que ocurre a las 20:19 horas, está ubicado costas afuera de Tongoy y se ubica en la zona de contacto entre la placa de Nazca con la Sudamericana, que es de los típicos temblores que se sienten en Chile y que han producido grandes tsunamis cuando han sido grandes terremotos!".

Barriientos reitera que estos sismos del jueves separados por algunas horas de diferencia, son muy distintos en su origen.

“El que tiene las réplicas es el segundo, el de Tongoy que es similar al que ocurrió en 2015 y se ubica entre las placas, en el extremo norte de la ruptura de ese año, un sector conocido como Punta Lengua de Vaca”. 

El director del Centro Sismológico Nacional (CSN) indica que uno tiene que esperar al menos 10 años para entender qué está pasando en esa región.

“Nosotros miramos hacia atrás, no podemos mirar al futuro y predecir un terremoto”.

El experto llama a la calma e indica que “lo más probable es que las réplicas del sismo 6,3 vayan disminuyendo con el tiempo. Nada podemos decir de lo que pueda ocurrir en el futuro”.

Según Barrientos, “probablemente, en el futuro podamos ver que están todos asociados, pero como réplica misma de 2015 tendría que ser muy tardía. Creo que es distante en el tiempo para catalogarla así. No es como las réplicas que se registran en los meses inmediatamente después de un gran sismo.

Agrega que “todo depende de lo que pueda pasar en el futuro, porque si hay un temblor más al norte, el sismo de ayer podría ser precursor de lo que pudiera ocurrir”, indica.

El sismólogo aclara que la percepción de los sismos no depende del tamaño del terremoto, sino que depende de si esa misma energía se libera en pocos segundos o en varios.

“El tamaño del terremoto si es muy importante la distancia en que está el observador del sismo. Por ejemplo, el del 19 de enero que alcanzó 6, 7 ° era mucho más cerca de la zona de Coquimbo y La Serena que el del jueves. También dependen de las condiciones locales en que esté ubicado el observador, si está en un terreno blando o poco consolidado que amplifican las ondas sísmicas”.

Barrientos descarta el uso del término de enjambre sísmico.

“Para nosotros un enjambre sísmico es cuando ocurren muchos sismos y ninguno se destaca por su magnitud en una zona determinada. En este caso hubo un temblor importante y todos los demás se pueden considerar réplicas del temblor 6, 3. Así que desde el punto de vista técnico no es apropiado llamarlo enjambre sísmico”

Por su parte, el director nacional de la Oficina Nacional de Emergencias, Ricardo Toro, indicó al respecto que “está dentro de la normalidad de un sismo de 6.4. No obstante, el Centro Sismológico está haciendo un análisis detallado para ir definiendo de mejor forma esta situación. Pero está dentro de la normalidad de lo que podría pasar en Chile”, señaló el director nacional de la Onemi.