Las imágenes fueron elocuentes. Es que las fuertes lluvias que se han registrado en las últimas horas en la Región de Coquimbo han provocado no sólo anegamientos y cortes de aguas, sino que también un aumento en el volumen de agua acumulada que hizo que el Embalse Recoleta, ubicado a 16 kilómetros de Ovalle, se desbordara y con ello, también un muro de contención, el que correspondería a un alzamiento construido con posterioridad al muro original.
Y eso, obviamente, traerá consecuencias. Así lo advirtió el Ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, que en su visita a la región de manera extraordinaria, comentó que he instruido una investigación para sancionar a los responsables, porque acá lo que cedió no fue el embalse original, sino una especie de recrecido que se le hizo de manera irregular, por lo tanto instruí una investigación, así por eso vamos a mantener las medidas de evacuación preventiva que decretó durante la tarde el intendente. También se mantendrán durante la noche con un punto fijo de revisión tanto en el embalse como en los distintos lugares del rio Limarí”.
Con respecto a los otros serios problemas que ha tenido la región, el secretario de Estado afirmó que “en conectividad, señalar que la ruta 5 está conectada, pero con precaución, sobre todo en el sector norte de la Región de Coquimbo y en el sector sur de la Región de Atacama”.
En cuanto a los caminos interiores, dijo que “en este momento existen 28 caminos interrumpidos, muchos de ellos tiene que ver con badanes, así que al bajar el caudal quedan habilitados y del resto, la gran mayoría son problemas asociados a desplazamientos de rocas y cerros, porque sólo son tres los puentes caídos en la región, así que inmediatamente terminada la lluvia podremos acceder con las distintas maquinarias”.
Mientras que con el agua potable, “mañana vamos a poder tener mejores noticias con la situación de Ovalle, porque esperemos que los drenes puedan funcionar y lo hacen, podremos tener agua no potable, pero sí para los baños y las cosas sanitarias para cada una de las casas. Si no fuera así, la situación sería más compleja porque no tendríamos ni siquiera agua para ello.
En tanto, “en Coquimbo e Illapel, que tiene que ver con la turbiedad, en los pocos días se resolverá”, manifestó.