Mujer que recibió casa de emergencia en Coquimbo acusa que la quieren desalojar

A través de las diversas plataformas de diario El Día, conocimos durante las últimas semanas las historias de diversas personas que tras el terremoto y tsunami del 16 de septiembre de 2015 poco a poco han ido recobrando esperanzas y además, han ido encontrando apoyos para volver a vivir de forma digna.

Se han repetido en el sector de Baquedano, en Coquimbo, uno de los más afectados con la catástrofe, donde Miriam Espinoza, que vive en esta zona porteña desde hace ocho años, sufrió los embates de esta situación, con un hijo enfermo y una nieta de nueve años a su cargo.

Por esto, ha debido enfrentar esta situación durmiendo en carpas, pasando frío y viviendo con un precario sueldo. Durante nueve meses, debió enfrentar estas complicaciones en un terreno que no le pertenece. 

La buena nueva de la instalación de una vivienda de emergencia en este terreno era una esperanza para Miriam y su familia; sin embargo, una mala noticia llegó para colocar nuevas dificultades: el dueño del lugar quiere que se vaya de ahí.

“Los dueños anteriores me dieron la autorización para poder instalarme ahí por $50 mil. Y ahora me dicen que el terreno se vendió y que de aquí a dos meses más tengo que irme. La casa de emergencia es mía, pero todo se me va a complicar, porque voy a tener que comenzar a buscar un terreno”, señaló con mucha pena.

Asegura que no sabe cómo va a enfrentar este momento, porque apenas gana $150 mil. Pero pese a todo, no pierde las esperanzas. “Ojalá me puedan ayudar a encontrar algún terreno para instalar la mediagua, porque con la preocupación no tengo cabeza para pensar. Piense que yo tengo que hacerme cargo de mi nieta y mi hijo no puede trabajar. No sé si lo van a poder operar de una hernia que sufre, así que imagínese. Tanto que luché por tener mi casa y pasa esto”, indicó esta mujer, que apela por ayuda.