Representantes de las comunidades emplazadas en la vía al Valle del Elqui se acercaron este viernes a la sede de El Día para ratificar su apoyo al Seremi de Obras Públicas, Pablo Herman sobre su posición en torno al proyecto de la Ruta D-41, al considerar que la propuesta actual tiene falencias en cuanto a la conectividad y además no toma en cuenta factores medioambientales o de preservación de vertientes, flora y fauna.
Manuel Godoy, presidente de la Agrupación Salvemos la Ruta de las Estrellas, recalca que se oponen tajantemente al proyecto, porque no le ven “ninguna factibilidad técnica”, y además no contempla de manera directa a los 30 pueblos que se encuentran antes de la comuna de Vicuña.
“Hay muchas autoridades que han hablado y sin embargo ellos no conocen la propuesta, ya que no fue realizada acá en la zona sino en cuatro paredes en Santiago. Efectivamente fue Pablo Herman, actual Seremi del MOP él que nos mostró y ahí fuimos interiorizando lo que es este proyecto”, asegura.
Godoy insiste en que “crear un embudo que se cierre entre Vicuña y en La Serena no ofrece garantías de crecimiento y mucho menos de desarrollo para la zona”.
“Nosotros queremos que el valle subsista, crezca y tenga alternativas, por eso lo que proponemos es potenciar tres vías; el camino antiguo por Algarrobito, la actual Ruta D- 41 mejorando los accesos, la llegada y señaléticas, y también el camino que va por Islón. Esas son opciones más viables”, dice.
VECINOS DAN RAZONES PARA RECHAZAR EL PROYECTO
Carolina Véliz, integrante de la organización y habitante del pueblo El Hinojal, comenta que parte de la molestia existente es que la primera etapa del proyecto no pasó por consulta ciudadana como correspondía y cuando fueron a buscar información durante la gestión del Gobierno anterior “no se nos abrieron las puertas”.
En contraste, señala que cuando Pablo Herman tenía diez días en el cargo los invitó a dialogar y se comprometió a mostrarles la maqueta de la ruta.
“La vimos y empezamos a analizar la primera parte. Ahí nos dimos cuenta que tenía muchas falencias, porque si bien beneficiaba a algunos pueblos como Algarrobito y Altovalsol que tenían entrada directa, habían complicaciones con sectores como Gabriela Mistral, El Rosario, El Hinojal o Quebrada de Talca porque no tenían acceso si no retorno y quedaban separados. Además nos percatamos que se contemplaba la construcción de solo cinco pasarelas”, precisa.
Véliz sostiene que las comunidades rurales no fueron tomadas en cuenta y por eso sienten que van a quedar ‘desconectados’, lo que generará inconvenientes de movilización.
Con la segunda etapa pasó algo similar. “No estamos de acuerdo con el proyecto como se ha presentado (…) además de complicaciones con los accesos hay un tema de vertientes, medio ambiente, flora y fauna y nos hacemos la pregunta ¿qué van a hacer para construir un mega proyecto como este? ¿Nos van a secar las napas naturales cuando tenemos conciencia que en 15 o 20 años la región va a ser una zona muy desértica?”, razona.
Por eso, Véliz insiste en pedir a los dirigentes políticos que “se pongan la mano en el corazón y ayuden a potenciar los pueblos que también merecen turistas. Siempre se preocupan de la ciudad y a las comunidades rurales las dejan de lado”.
Miembros de la agrupación Salvemos la Ruta de las Estrellas aseguran que continuarán con las movilizaciones para dar a conocer su rechazo al proyecto
CRITICAN POSTURA MUNICIPAL
Los vecinos también se manifestaron en contra de las declaraciones del alcalde de Vicuña, Rafael Vera, pues consideran que no se ha dado el tiempo de conocer el proyecto en su totalidad.
Lorena Ramos, presidenta de la Junta de Vecinos de Marquesa, afirma que es una necesidad conocer los servicios públicos, la realidad de cada sector, porque exigir el financiamiento de proyectos que luego van a quedar mal no tiene sentido.
“Nosotros queremos que el valle subsista, crezca y tenga alternativas, por eso lo que proponemos es potenciar tres vías", Manuel Godoym presidente de la Agrupación Salvemos la Ruta de las Estrellas
“Para los gobiernos pareciera ser invisible la participación ciudadana. Además me llama la atención que un alcalde, por política, tenga más peso que un dirigente social que se ha tomado el tiempo de conocer en qué van los proyectos. En estos días por ejemplo hubo un cabildo abierto convocado por la municipalidad y se me negó el hecho de preguntar y hacer objeciones respecto a proyectos como el de la Ruta D-41, entonces esto no es posible”, acota.
Por último, Luis Fuenzalida, primer director de la junta de vecinos Gabriela Mistral, recalcó en que llevan más de un año trabajando con el Seremi Herman, quien fue el único que fue “a terreno, se juntó con nosotros, estudiamos el proyecto y se dio cuenta que el proyecto era inviable e invasivo, que nos iba a convertir en pueblos fantasmas”.
“Por lo tanto, nosotros como agrupación le damos todo el apoyo al seremi, por su disposición y profesionalismo, tanto de él, como de su equipo. Que el señor alcalde entienda que el Valle del Elqui no comienza en Vicuña, son más de 30 pueblos en todo el contexto de la ruta y él no nos puede negar a nosotros la calidad de vida que hemos ganado con el tiempo y con trabajo”, reflexionó.