En más de una hora de exposición, el “padre” del sistema de capitalización, como a él le gusta denominar al que comúnmente todos los chilenos llaman el mecanismo de las AFP o ahorro previsional, José Piñera Echeñique defendió el modelo que implementó en el régimen militar. De entrada dejó claro que su mirada es eminentemente técnica y económica y que no entraría en política contingente. De hecho, evitó profundizar cuando se le consultó sobre el impacto de la nueva figura del gobernador regional.
El objetivo de los líderes de la Cámara Chilena de la Construcción, Delegación Regional fue generar debate y proyectar el país que se quiere y reflexionar sobre las medidas a implementar.
Piñera admitió que la complicación que existe en Chile es que no se plantean los temas como debe ser y que pocos, a su juicio, han defendido un modelo que desde su perspectiva le ha permitido a Chile, desde mediados de los 70 transformarse en el país más pujante de América Latina.
En más de un a oportunidad llamó a no tener complejos y revisar las cifras. Es por ello que gran parte de su charla se apoyó en las portadas de su revista Economía y Sociedad, que está próxima a cumplir el numero 100, sobre todo aquella donde publicó como imagen principal un cuadro donde Chile estaba encumbrado en logros vinculados a la movilidad social, pese a que la creencia es que en nuestro país la persona que nace pobre terminará en esa misma condición.
“Hasta que hace 8 meses el grupo de países desarrollados hizo un gran estudio para tratar de medir la movilidad social. Personas que naciendo pobres son capaces en su vida de llegar al cuarto más alto. O sea, pobres que son capaces de ser ricos, no digo como Andrónico Luksic… Mucha gente dijo que en esto Chile debe estar pésimo, pero resultó ser el mejor de todos los países desarrollados en movilidad social y esto es contrario a todo lo que leen en la prensa o escuchan en la TV en los últimos 30 años, pero así es”.
Datos concretos
El exsecretario de Estado aseguró que no se pueden desconocer los datos duros que hablan, por ejemplo, que la pobreza bajó de un 50 a un 8 %. “Son cifras absolutamente oficiales y cuando un país multiplica por cuatro su economía y reduce la pobreza al 8 % es un logro exitoso, por esa razón pudimos parar la retroexcavadora y hoy día tenemos desafíos de futuro”, refrendó.
Piñera insistió que la mayor prueba del éxito de las reformas que impulsó es que en el mundo al momento de enfrentar el tema de crecimiento y capitalización ya se habla del “modelo chileno”.
En todo caso reconoció que hace tres años todo este prestigio “estuvo en peligro porque un gobierno, una persona, una corriente dijo que esto estaba equivocado y había que desmantelarlo y se habló de que había que pasarle una retroexcavadora”.
No obstante, Piñera advirtió que la aprobación de la reforma tributaria en el Gobierno de Michelle Bachelet y que hoy cuestionan fuertemente sectores oficialistas fue por unanimidad. “Es extraordinario que una reforma que ha hecho tanto daño” fuera aprobada por todos los sectores.
El paso siguiente
Piñera aseguró que las grandes leyes y pilares están en su lugar, “la gran noticia es que en los últimos 20 y 30 años se ha mantenido el modelo, pero se ha dejado de hacer reformas absolutamente necesarias para que el país pudiera crecer al 7% para eliminar, incluso, el 8 % de pobreza”.
Además, admitió que en los últimos 4 años se cometieron dos errores garrafales, “la reforma tributaria del Gobierno anterior, que es un desastre y sigue complicando el proceso de inversión y hay que hacer cirugía profunda. Lo mismo pasó en el campo laboral, donde se judicializó una serie de relaciones y hoy día empresarios tienen dificultades para tratar con trabajadores y siempre con el temor de los tribunales y donde las demandas laborales elevan los costos”.
Además, alertó que la robótica está potenciando la automatización de los procesos, provocando inseguridad laboral, “pero si no existe flexibilidad laboral la tendencia a sobrerobotizar muchas faenas va a generar desempleo estructural y mucha gente trabajando en la informalidad”.
Igualmente advirtió que se debe contener el gasto público. Explicó que en Chile existiría un mal gasto de los recursos, “lo que se llama gasto político, donde miles de personas están viviendo del Estado sin una productividad asociada a sus tareas porque han llegado por favores o cuoteo político. Al mismo tiempo se ha creado todo tipo de instituciones, embajadas, agregadurías, ministerios y a todo eso que es gasto público se le coloca más impuesto a las empresas y personas”.
Es por ello que recalcó que se debe tener el coraje para admitir que en Chile “el gasto público está excedido y hay que modernizar el Estado profundamente”, por lo que planteó que en nuestro país se debe hacer una reforma radical”.
Vislumbrando el futuro, el exsecretario de Estado anticipó que para no sólo llegar al umbral del desarrollo, sino que para ser desarrollado, Chile requiere “un segundo avance, reformas más sensatas y moderadas”.
Creación de medios propios
Dentro de la ronda de preguntas, uno de los asistentes cuestionó el papel de un sector de la prensa que frente al modelo económico imperante en Chile sólo se estaría dedicando a desinformar. Incluso se atrevió a plantear que, a su juicio, más del 90% de los periodistas que estaban en los medios “son de izquierda” y que era el momento de sincerar el tema y sus tendencias.
Si bien Piñera reconoció que la forma de informar sobre estos temas no era la más adecuada, sí recalcó que en Chile existe libertad de expresión. Incluso, conminó a los empresarios a que si no estaban de acuerdo en cómo se informaba, a que optaran por crear nuevos medios. “Yo tenía un problema e hice una revista. Hay que actuar (levanta el tono de la voz), ustedes son empresarios. Saquen medios de prensa, por qué no invierten también en medios de prensa. Me impresiona que en la Sofofa siempre están alegando y por qué no hacen medios. Hoy hay mil ideas de cómo comunicar”.
Por ejemplo, dijo que echó de menos que en estos 40 años las AFP no se hayan preocupado de informar mejor y defender el sistema con campañas potentes. “Hagan algo, muévanse, no voy a decir lo que dijo Miguel Bosé (a la presidenta Bachelet) y lo otro es la maravilla de la internet y las redes sociales”.