La propagación del Covid-19 ha obligado a cambiar la hoja de ruta de decisiones y actividades que ya estaban programadas. Fue en este contexto que el martes, por 105 votos, la Cámara de Diputados y Diputadas aprobó y despachó el proyecto de ley que modifica el calendario electoral que estaba pactado para este año.
De tal forma, el evento eleccionario más cercano, que correspondía al Plebiscito Nacional del 26 de abril se realizará el 25 de octubre, fecha que se realizarían las elecciones municipales y de gobernadores regionales, comicios que también sufrieron cambios y se ejecutarán el 11 de abril del próximo año.
El jueves 19 de marzo los partidos políticos alcanzaron un amplio acuerdo para reprogramar las fechas, sin embargo, la discusión en el Congreso Nacional no estuvo exenta de polémicas, especialmente en la Comisión de Constitución donde parlamentarios de Evópoli y la UDI hicieron algunos cuestionamientos a lo que ya había sido aprobado en el Senado.
El presidente de dicha comisión, Matías Walker, lamentó la actitud de sus pares y reiteró que había un acuerdo inicial para postergar el plebiscito debido a las actuales condiciones sanitarias y así concentrar todos los esfuerzos en la prevención y el combate del Covid-19.
“Emplazamos al Gobierno a poner orden a esta situación ya que su propia coalición estaba desconociendo el acuerdo e intentando sacar ventajas de última hora, por ahí insinuaron postergar las elecciones de gobernadores regionales y otras cosas que no estaban en el acuerdo, sobre todo ahora que tenemos la convicción que no podemos retroceder en materia de descentralización, las regiones necesitan poder tener autonomía en el caso de emergencias, incluso esa es una de las lecciones de esta crisis sanitaria”, contó.
A pesar del impasse, Walker valoró haber logrado el objetivo “sin que se cambiara una coma” y con ello también reprogramar el calendario electoral ya que los plazos legales para determinados procesos seguía corriendo.
Priorizando necesidades
Por su parte, dos de los diputados oficialistas, Juan Manuel Fuenzalida (UDI) y Francisco Eguiguren (RN) volvieron a insistir en la necesidad de priorizar necesidades frente a la emergencia sanitaria, como por ejemplo, redestinar los $24.258 millones que significará la realización del Plebiscito Nacional.
“Nosotros apoyamos la idea, creemos que debería postergarse en un año y utilizar los 30 mil millones de pesos que cuesta y redestinarlos a la situación de salud que aqueja al país y que otra parte se destine a las consecuencias económicas que generará esta pandemia”, detalló Fuenzalida.
El gremialista también dijo que la actitud de la oposición es “poco democrática” y no es lo que necesita el país ya que –según indicó- quieren desarrollar un acto electoral en desmedro de las verdaderas necesidades de la población.
“El Frente Amplio está obsesionado con el tema electoral y no con lo que realmente requiere la población que es tener ayuda, organización y coordinación para enfrentar la pandemia que hoy nos afecta”, reflexionó.
El diputado de RN se alineó con Fuenzalida y aseveró que hoy lo importante es robustecer la “batalla” contra el coronavirus y que pensar en la consulta que definirá si la ciudadanía quiere o no una nueva Constitución Política para Chile es de una “frivolidad enorme”.
“A la gente le importa un bledo los actos electorales y el plebiscito. Lo único prudente es preocuparnos de la salud de Chile y esa plata que se va a gastar debería ser refocalizada en salud, las familias y las pymes”, añadió.