• El 2 de abril entró en vigor la Ley de Inclusión Laboral con el objetivo de fomentar el trabajo en personas discapacitadas y para educar a la población respecto a sus cualidades.
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Andrea Cantillanes
El primer domingo de abril coincidió con la entrada en vigor de la Ley de Integración Laboral, obligando a las empresas con más de cien trabajadores a contar con el 1% de sus trabajadores en situación de discapacidad. Frente a esto, los municipios de La Serena y Coquimbo manifestaron que se han comprometido con la inclusión mucho antes de que esta ley se conociera.

Ricardo Delgado tiene 35 años y sufrió asfixia en su nacimiento debido a que su cordón umbilical lo ahorcaba. Producto de ello, tiene deficiencia en el sistema psicomotor dificultándole realizar cualquier actividad en que requiera utilizar sus manos, por lo que se le hace complejo escribir y manipular objetos finos y pesados. Sin embargo, trabaja en una obra de construcción en La Florida desempeñándose como ayudante de bodega.

No obstante, personas que tienen una condición igual o similar a la de Ricardo, muchas veces son miradas como menos hábiles para algunas tareas. Pero cuando se les conoce y se aprende de ellos esta noción cambia radicalmente.

A Rodrigo Trucco, Gerente General de Ecomac, le pasó algo parecido. Él nunca había trabajado con un individuo discapacitado, pero cuando comenzó a integrarlos a la empresa, su percepción cambió drásticamente. Comenta que al principio se generó una reacción de incertidumbre porque “no sabía cómo lo haríamos”, pero finalmente “aprendimos que son personas súper responsables y proactivas”.

El cómo integrar a discapacitados en el mundo laboral ha sido un problema permanentemente debido a que las organizaciones no saben con exactitud como son y cómo se les debe tratar, por lo que han optado por la solución fácil por mucho tiempo: no integrarlas. Es por ello que el 2 de abril entró en vigor la Ley de Inclusión Laboral con el objetivo de fomentar el trabajo en personas discapacitadas y para educar a la población respecto a las cualidades que estas tienen.    

COQUIMBO INCLUSIVO

La Municipalidad de Coquimbo se destaca a nivel País por su alto índice de contrataciones de personas con discapacidad a su servicio, contando con 50 funcionarios con esta condición.

El alcalde de Coquimbo, Marcelo Pereira, argumenta que ha puesto la inclusión entre sus prioridades, agregando que hay un “sinnúmero” de buenas prácticas y acciones que los avalan. Además, que el municipio es la organización que “más empleabilidad da en la comuna a personas en esta condición”.

Pereira aprovecha la instancia para informar que el 13 de junio, Coquimbo realizará en la Plaza de Armas la primera feria laboral inclusiva, donde habrá diferentes empresas contratando a personal con discapacidad. Esto, con el objetivo de que su comuna sea la más integradora de todo el norte de Chile.

María Eugenia Dubó, Coordinadora de la Oficina de Gestión Inclusiva de la municipalidad, cuenta que uno de los objetivos de su área es el Programa de Intermediación Laboral, cuya finalidad es generar “colocaciones laborales responsables tanto dentro de nuestro servicio como en las empresas privadas”. 

Dubó añade que el objetivo de dicho programa va en concordancia con los ajustes que permiten que las personas discapacitadas tengan un puesto laboral en igualdad de condiciones, potenciando las competencias y habilidades que presentan. Además, el Servicio Nacional de la Discapacidad (SENADIS) proporciona apoyo técnico y capacitaciones a las empresas que tengan la voluntad para hacer efectiva la inclusión.

La coordinadora de la oficina sentencia que la municipalidad ha asumido este compromiso en base a la necesidad que tienen estas personas de tener un empleo digno para poder hacer valer sus derechos.

LA SERENA TAMBIÉN EMPATIZA

El alcalde de La Serena, Roberto Jacob, señala que tiene una gran deuda con estas personas “porque estudian, se reciben y resulta que después no tienen donde trabajar”. Por lo que la Ley de Inclusión Laboral le parece apropiada por todo el tiempo que “nos hemos demorado en entregarles un espacio para que puedan ejercer”.

Jacob agrega que en el municipio cumplen con lo que dicta la normativa mucho antes de que ésta entrara en vigor y que a medida que se tengan más espacios “no tendremos inconvenientes para incorporar a más personas discapacitadas que necesiten trabajar”.

Raquel Carabantes, Jefa del Departamento de Discapacidad de la municipalidad, manifiesta que el compromiso con la inclusión laboral nació desde hace más de una década. Ya que el 2005 se creó el departamento y que con el tiempo, el trabajo en esa área se ha fortalecido y creciendo hasta el día de hoy.

Desde que se creó dicho departamento, con el pasar del tiempo se dio cuenta que este tema debía ser tratado por personas especializadas debido a la ignorancia que existía en cómo se les trataba a los discapacitados. Añade que la municipalidad busca igualar las oportunidades con las de una persona común “y para ello necesitas a profesionales que estén especializados en el tratamiento de individuos con capacidades diferentes”.

Aclara que un discapacitado cuenta con las mismas competencias y habilidades que una persona ordinaria y que al trabajar con ellas se crea un ambiente de mayor compañerismo, empatía y solidaridad, “por lo que tener la obligación de empatizar te hace comprender una realidad totalmente distinta a la que uno percibe”.  

LÍDERES EN CONCIENTIZACIÓN

Generar espacios y al mismo tiempo devolverle una mano a la sociedad generando oportunidades de desarrollo a individuos que no las podrían obtener de forma tradicional es el camino que sigue Ecomac, expresa el Subgerente de Gestión de Personas, David Cortés.

Comenta que la empresa comenzó con un proyecto de inclusión social en el año 2016 con privados de libertad y que desde ahí “nació la semilla de integrar a sujetos que tienen menos oportunidades para integrarse al mundo laboral”

El subgerente cuenta que comenzaron trabajando con un estudiante parapléjico Técnico en Construcción para que pudiera realizar su práctica profesional “y fue esto lo que nos abrió el camino para pensar en por qué no le dábamos oportunidades a discapacitados para que se desempeñen acá”.

Frente a esto, la empresa comenzó a tener mayor contacto con la Municipalidad de La Serena y su departamento respectivo para trabajar en conjunto y así elaborar los perfiles de quienes podrían desempeñarse en la organización inmobiliaria.

“En conjunto comenzamos a buscar los candidatos en situación de discapacidad para que trabajen con nosotros” y actualmente se han integrado cinco, además que dos se encuentran en proceso de evaluación.

Cortés sentencia con que no hay que medir a las personas con varas distintas por tan sólo tener una discapacidad “porque las normas son iguales para todos y la productividad que tienen no está asociada a su condición”.

El Gerente General, Rodrigo Trucco, cuenta que la experiencia de trabajar con discapacitados ha sido “bastante positiva”, ya que desde el punto de vista del desempeño han cumplido con lo que se les ha solicitado. Además, la medida fue bien acogida por todos los trabajadores “generando un mejor clima laboral, porque estas tienen un aire distinto que el resto por las ganas que demuestran por trabajar”.

Trucco destaca que “nosotros no le estamos haciendo un favor a nadie, porque la gente que viene pasa un filtro y entra a trabajar como un empleado más”. Agrega que en la empresa, la inclusión “nos ha ayudado mucho para entender y comprender distintas realidades”.

Asevera que esta situación les ha servido para derribar muchos mitos ya que hay muchos prejuicios pero que hay que hacer el intento por integrarlos y que “cuando las demás empresas lo vayan haciendo se darán cuenta que su implementación será un éxito”.  

FALTA DE CONOCIMIENTO

Ricardo Delgado tuvo serios problemas al momento de nacer, lo que le provocó una importante deficiencia en el sistema psicomotor dificultándole cualquier actividad en que involucre utilizar sus manos, por lo que se le hace complejo escribir y manipular objetos.

Trabaja desde hace un mes en la obra Valles de la Florida de la inmobiliaria Ecomac. Es asistente de bodega y pasa el día completo ordenando y pasándoles los materiales necesarios a los constructores.

Trabaja allí desde hace un mes y es primera vez que tiene un trabajo estable, ya que pasó toda su vida buscando y sólo consiguió ser empaque de supermercado. Considera que la dificultad para encontrar algo estable era meramente por la discriminación constante que ha sufrido gran parte de su vida. Pero ahora, dice estar feliz en su trabajo porque se siente útil y que el clima laboral le ayuda porque están siempre dispuestos a ayudarlo.

Recuerda con bastante angustia un episodio que le sucedió hace doce años, cuando le hicieron una entrevista laboral en una popular farmacia cuyo slogan es “la farmacia de los precios bajos”. Cuenta que quien lo evaluó le rompió su formulario en la cara debido a lo “horrible” de su caligrafía. Y desde ese momento, supo que encontrar un trabajo se le haría más difícil que a cualquier otra persona.

Ricardo no cree que falte empatía por parte de la sociedad para integrar a discapacitados, sino que conocimiento, “porque muchos tienen miedo de cómo tratarnos, nos ven como víctimas y no saben cómo llegar a nosotros, sienten que deben sobreprotegernos porque nos asocian como individuos sumamente delicados”. 

Considera que la nueva normativa es buena “porque nos da la posibilidad de integrarnos al mundo laboral ya que necesitamos trabajar, porque al igual que el resto debemos pagar cuentas y comprar alimentos”.

Otro caso es el de Carolina Yáñez que se desempeña como psicóloga del Departamento de Discapacidad de la Municipalidad de La Serena y del Centro de Intermediación Laboral. Ella tiene paraplejia espástica, enfermedad degenerativa genética de la médula espinal cuyas consecuencias se reflejan en la resistencia que ponen los músculos para poder estirarse.

Su trabajo es orientar psicológicamente a los usuarios beneficiados del departamento y a los cuidadores de personas discapacitadas. Además realiza talleres de autocuidado, elabora perfiles psicolaborales y apoya en la concientización de las empresas sobre cómo deben tratarlas.

Comenta que le gusta lo que hace porque puede desempeñarse en distintos ámbitos de la psicología. También considera que existe un ambiente laboral “súper rico porque una comparte y siempre te ofrecen ayuda”, agregando que existe un clima de solidaridad y compañerismo que hace que se sienta a gusto en todo aspecto.      

Carolina lleva 6 años trabajando en el lugar y antes de llegar allí había buscado empleo en otras partes “pero lamentablemente entre tanta postulación nunca me consideraron”.

Piensa que en la sociedad hace falta “empatía cultural” y que esta normativa “generará un cambio importante que irá a favor de que la sociedad entienda que la discapacidad es una condición que se queda para siempre”. Además, piensa que “generará que las empresas abran más cargos y que terminen empatizando más con nuestro contexto”.  

De esta manera, se espera que la nueva ley cuyo objetivo es sensibilizar y concientizar a la población sobre la discapacidad, ayude a fomentar la integración y que la sociedad termine aprendiendo que las personas que tienen alguna condición tienen las mismas necesidades que una común y corriente. 6401IR

La normativa

El seremi de Desarrollo Social, Juan Pablo Flores, explica la normativa

¿De qué trata la ley?

La ley busca incentivar y ampliar las posibilidades laborales de las personas registradas con algún tipo de discapacidad o que sean asignatarias de pensiones de invalidez, obligando a que al menos el 1% de los trabajadores de entidades públicas y privadas deban tener alguna condición. Eso sí, sólo aplicable a aquellas instituciones que cuenten con más de 100 empleados.

¿Cuál fue la necesidad de promulgarla?

Estamos conscientes de que las políticas laborales inclusivas potencian el cambio cultural que el país necesita, de aceptación de la diversidad y no discriminación. Al mismo tiempo, creemos que tienen efectos virtuosos al interior de las empresas y, desde allí, se proyectan también hacia toda la sociedad.

¿Las empresas tienen un plazo para cumplirla?

La ley debe ser cumplida a cabalidad desde el 1 de abril de 2018, es decir, comienza a regir inmediatamente. Además, en abril de 2019 se debe informar de manera justificada aquellos casos en los cuales no se dio cumplimiento.

¿Integrar al 1% es suficiente para cubrir la demanda de empleo?

Según la Encuesta Longitudinal de Empresas del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), hay más de 7.600 empresas que tienen más de 100 empleados, por lo que a partir de esos datos arrojados se podría calcular que pueden habilitarse más de 25.000 cupos laborales para personas en situación de discapacidad, según las estimaciones que realizó el ministerio.

 

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