Profesionales de la salud se perfeccionan en el cuidado de pacientes pediátricos críticos

Sin duda que uno de los momentos más difíciles para los padres es cuando deben dejar hospitalizados a sus pequeños, más si lo internan en la unidad de cuidados intensivos (UCI). Ahí llegan los pacientes más graves o aquellos que necesitan de un cuidado especial, que no se le puede entregar en las otras áreas del hospital. 

Este temor y ansiedad es absorbido por el equipo de profesionales de la UCIP, quienes constantemente están tanto en busca de nuevos adelantos para recuperar el estado de salud de los más pequeñitos y como transmitiendo conocimiento a profesionales de otras área de la salud para evitar el agravamiento de los niños.

La “IV jornada del paciente pediátrico crítico y urgencias: una mirada multidisciplinaria”, que organizó la UCIP del hospital San Pablo de Coquimbo, tiene ese objetivo; actualizar los conocimientos y manejos de acción de todos aquellos que le brindan atención a niños graves en cualquiera etapa de la cadena de atención, ya sea CESFAM, SAPU o recintos hospitalarios.  

“Este año quisimos dar un sello especial a la jornada invitando a profesionales de hospitales de menor complejidad y de Centros de Salud Familiar, con el fin de contribuir a las atenciones médicas  que se le debe entregar a un niño grave. Porque entendemos que el éxito en el tratamiento de los pacientes pediátricos depende de una oportuna atención ”en cada uno de los eslabones de esta red cuarta región", explicó Marcela Astorga, medicó jefe de la UCIP del Hospital San Pablo de Coquimbo.

150 profesionales de la salud se perfeccionan en el cuidado de pacientes pediátricos críticos ​

Durante dos días, más de treinta profesionales expusieron distintas temáticas de vanguardia sobre la forma en que se deben abordar ciertas patologías para proteger y ayudar a la recuperación de los niños como por ejemplo la correcta nutrición que debe tener un pequeño que se encuentra en coma.

Junto con ellos también se les enseñó, a los más de 150 asistentes, a utilizar nuevos equipos, algunos de ellos ausentes aún en la región. Todo con la finalidad de actualizar los conocimientos y proporcionar nuevas herramientas para el cuidado de los menores.

Actualmente, la UCIP tiene capacidad para atender a doce menores de entre los 28 días y los 15 años. Si bien la gran mayoría de ellos son de la región, el hospital al ser centro de derivación en áreas como la neurocirugía y traumatología llegan niños politraumatizados y neurocriticos desde la Región de Copiapó. “Por ello es fundamental tener una correcta coordinación con los hospitales más pequeños y las urgencias, quienes son los primeros que atienden a estos pequeños antes de que lleguen a nuestra unidad.

Bettina Von Dessauer, jefa de la Unidad de rehabilitación con Atención Clínica Integral del hospital Roberto del Rio, fue una de las 30 expositoras que participó de la jornada. Ella reitera la importancia de trabajar coordinados y en equipo en la rehabilitación de los niños.

“La visión interdisciplinaria es una necesidad absoluta. Esto no sólo significa entre especialidades médicas sino que con las otras profesiones de la salud. Debe haber un respeto en el rol  de cada uno de  los profesionales no sólo para llegar a un correcto diagnóstico sino que también en una evaluación adecuada de la situación integral para planificar su reinserción independiente de la patología”.

Junto con ello, la especialista del hospital Roberto del Rio explicó que se debe entender que la UCIP es sólo un eslabón en la atención, ya que el intensivista depende absolutamente del diagnóstico oportuno que pueda brindar el médico y la enfermera de la atención primaria. “Si lo diagnostican a tiempo  (la gravedad) ese paciente debería llegar oportunamente a recibir un tratamiento. Y cuando un pequeño sale de la UCI, tenemos que preparar al que recibirá al paciente dándole toda la información para no someter al niño a un estrés o dolor innecesario. Ese mensaje es el que queremos transmitir en esta jornada”.   

Este año la jornada de trabajo se enfocó en aspectos esenciales para una mejor articulación y resolutividad de la red asistencial pública en los distintos escenarios clínicos como son las urgencias pediátricas, la alimentación de los pequeños, la rehabilitación,   las derivaciones oportunas, el manejo en pacientes neurocríticos, entre algunos de los temas.