Este 1 de julio entró en vigencia la rebaja de un 50% en los pasajes del transporte público mayor para el 100% de los adultos mayores sobre los 65 años, una medida que sin duda beneficia a miles de personas que, en su mayoría, no generan ingresos y deben incurrir en gastos por motivos de salud, alimentación y trámites, generalmente con pensiones que no son suficientes.
Un beneficio que fue bien recibido por la comunidad, pero que llamó la atención de los dirigentes de los conductores de las máquinas, quienes se percataron, que nuevamente en la resolución exenta del Ministerio de Transporte y Telecomunicaciones, no estaban considerados ellos para recibir el subsidio que entregaría el Estado al gremio para suplir la pérdida de los ingresos.
Así fue expuesto por el presidente del sindicato n° 2 de Lisanco, Nemesio Blanco, quien aclaró que la rebaja de los valores para los adultos mayores era una iniciativa justa y con la que estaban de acuerdo, sin embargo nuevamente serían los conductores y no los propietarios quienes verían sus ingresos mermados.
“Hoy nuevamente el Estado nos golpea y nos da la espalda, sobre todo metiendo la mano a los bolsillos de los conductores asumiendo el costo de la rebaja de pasajes a la tercera edad, nosotros no estamos en contra de ello, lo que consideramos es que el Estado debe hacerse cargo junto a los propietarios, porque ellos reciben un beneficio sobre esto y nosotros no” señaló Blanco.
El dirigente indicó que la Coordinadora Nacional, formada recientemente por sindicatos de conductores de todo el país, había redactado una carta abierta exponiendo las inquietudes y molestias del rubro.
“El Estado cancelará un subsidio que busca compensar en parte esta rebaja del 50% del pasaje y que será cancelado a cada operador, durante meses el Ministerio de Transportes realizó negociaciones con los empresarios del rubro de locomoción colectiva en todo el país, sin considerar ni dar la oportunidad a los representantes de los trabajadores a tener participación alguna en estas reuniones” indicaron en el comunicado.
Explicó que los dueños de los vehículos continuaban recibiendo los fondos que el Estado le entregaba mensualmente por los diversos subsidios, tales como la TNE, rebaja de pasajes, chatarrización, entre otros, montos que en muchos casos no eran compartidos con los conductores.
“Es de conocimiento público que los ingresos de los conductores se han reducido progresivamente desde que comienza el estallido social y ahora con esta pandemia del covir-19 prácticamente ha bajado en un 90%, a pesar de esto los conductores siguen tratando de darle normalidad al sistema” añadió el texto.
De acuerdo a cálculos realizados (en tiempo normales) por Blanco y otros dirigentes, si un conductor realiza diariamente cuatro viajes directos (La Serena-Coquimbo) con 15 adultos mayores en cada vuelta, mensualmente tendrían una pérdida de $432 mil, mientras que en los servicio locales, con el mismo cálculo la merma sería de $288 mil.
Al respecto, el Seremi de Transporte y Telecomunicaciones, Juan Fuentes, manifestó que “toda la normativa que hay apunta a las obligaciones que tiene el propietario o la línea de transporte público con el Estado, pero siempre, a su vez, ellos tienen organizaciones y conversaciones con los conductores y en ese caso de las tres líneas que hay en La Serena ya tienen acuerdo”.
Ahora bien, pese a que los dirigentes han estado en conversación con sus empleadores y en algunos casos se ha llegado a acuerdo con los conductores sobre formas de mitigar esta pérdida, Blanco aseguró que ninguna de las soluciones planteadas supliría la diferencia que se les va a generar ahora con este nuevo beneficio para los usuarios, es por eso que solicitan al Estado un cambio en la legislación y que sea a ellos a quienes les llegue este subsidio.
Por otro lado, Fuentes indicó que por el momento el flujo de pasajeros mayores es baja producto de la pandemia por lo que la diferencia no debería ser considerable, sin embargo para el próximo año podrían haber modificaciones en los montos a una cantidad que se adapte más a la realidad de la zona y su cantidad de habitantes de la tercera edad.
“El próximo año se piensa hacer un estudio para afinar los montos que ya hay y ver si se ajustan o no a la realidad, pero nosotros hemos estado preocupados que los empresarios y dueños de la máquinas conversen con sus sindicatos de conductores y se lleguen a acuerdos” agregó el la autoridad regional de transporte.