Tras atropello de vecina a salida de la iglesia, feligreses exigen medidas de seguridad

En estado de extrema gravedad se encontraría una vecina  del sector La Antena, parte Alta de La Serena, quien el pasado  sábado fue atropellada por un automóvil  cuando salía de misa. El hecho provocó la indignación de los feligreses quienes junto con criticar las escasas medidas de seguridad lamentaron la falta de luminosidad que existirían en el sector. Pobladores  dicen estar hartos por los accidentes ocurridos en el último tiempo en la intersección de la Avenida Colo Colo, frente a la parroquia San José Obrero, en la población La Antena.

Son principalmente los feligreses, quienes tienen que asistir a la iglesia, los que están aburridos de no ser escuchados por las autoridades.

La preocupación por el  duro momento que está viviendo  la mujer atropellada llevó a los fieles  a organizar una manifestación pacífica la noche del sábado como una forma   de llamar la atención  de las autoridades y lograr soluciones. 

Es por ello que  al término de la homilía realizaron una protesta donde denunciaron el abandono que sufren por parte de diferentes autoridades, a pesar del número de accidentes que se han producido en el sector a lo largo del tiempo. 

El descontento se materializó con el corte de tránsito por algunos minutos.  Incluso, la manifestación fue liderada por el propio párroco Isauro Covili quien   acompañó a los vecinos a concretar la manifestación a la misma hora en que se presenta el mayor riesgo.

“Ya que en esta avenida (Colo-Colo) han habido bastantes atropellos los últimos meses. Hemos hecho sentir aquello a las autoridades y ellos lo saben, pues hemos pedido en varios momentos y en conversaciones con el alcalde, la necesidad de un ‘lomo de toro’, aunque dicen que van a licitarlos. Pero todavía y después de años, no los tenemos. Ahora, dependiendo de cómo evolucione esta necesidad, podemos volver a manifestarnos”, enfatizó el sacerdote.  
En todo caso dijeron entender la demora que  puede existir para lograr una salida, sin embargo,  puntualizaron que  lo  que les preocupa  es que mientras esperan su concreción siguen produciéndose accidentes  y cada vez con mayores consecuencias .     

Jésica  Monroy, secretaria parroquial fue una de las encargadas de convocar a las comunidades del lugar para instalar la preocupación en el primer plano.

Insistió que  estaban  reclamando, “para que nos escuchen y las autoridades puedan poner ‘lomos de toro’, que es lo que estamos pidiendo hace bastante tiempo. Es tanto el temor de la gente que muchos ya no vienen a la iglesia porque tienen miedo a que les pueda pasar algo. Y con justa razón, si acá los autos no paran”, sentenció.  

Una vez que la inquietud  fue publicada  en nuestro portal web, sobre todo con las fotografías, donde se advertía  al sacerdote y   fieles  portando carteles solicitando  soluciones concretas,  las reacciones  no se hicieron esperar. Los lectores solidarizaron con los feligreses  y aseguraron que no es el único punto de peligro en la Avenida Colo-Colo. 

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Un integrante de la parroquia que mantuvo su nombre en reserva, destacó que ayer  en  el templo recibieron numerosas muestras de  solidaridad  y apoyo.

Además, reiteró que junto con la alta velocidad en que circulan los vehículos,  otra  de las materias que más le preocupa es la falta de luz en un tramo importante de la avenida lo que aumenta el peligro  cuando  los fieles salen de misa. “Todo esto es muy lamentable, porque además  de la falta de luz, también una palmeras obstaculizan la visión”. Asimismo, insistió que  la manifestación que convocaron  sólo tenía el sentido  de sensibilizar a las autoridades y acelerar las medidas que habían solicitados. “La idea no es entrar en conflicto, sino que hacer ver lo que está pasando y mostrar nuestro pesar por  lo ocurrido con la asistente a una misa que fue atropellada”.

Se espera que hoy las autoridades se puedan pronunciar sobre este hecho que en esta arteria se ha transformado en reiterativo, luego que no es la primera vez que los vecinos salen a la calle para protestar por la falta de seguridad. La última vez lograron que se  instalara  un semáforo cerca de el cementerio.