El Hogar La Visitación de María, dependiente de la Fundación Las Rosas, se dispone a recibir en su sede de La Serena a partir de este miércoles a Fresia Farías de 65 años de edad, una mujer que sufre de avanzado Alzheimer y cuya historia ha causado gran impresión en territorio nacional al ser su pareja, Mario Núñez de 71 años, el encargado de su completo cuidado.
La complicada rutina de estos adultos mayores fue plasmada por El Día en un reportaje publicado el pasado domingo, mientras que la joven Ximena Ledesma posteó en su Facebook un video desde el bus de locomoción colectiva que maneja el hombre, siempre acompañado de su señora como copiloto.
Tras esto el caso se hizo viral en redes sociales, lo que ayudó a que la situación se conociera fuera de las fronteras regionales, pues varios medios de comunicación de la capital compartieron la información y las reacciones de los usuarios no se hicieron esperar.
“Este ingreso implica que tenga los cuidados que realmente requiere y que don Mario pueda trabajar en mejores condiciones", Pablo Elgueta, coordinador regional del Senama.
Fue entonces cuando el lunes por la noche la Fundación Las Rosas confirmó a través de su cuenta de Twitter que acogerían a la señora Fresia.
“Ella sufre avanzado Alzheimer y tiene que estar todo el día en una micro, pues su pareja no tiene con quién dejarla, mientras él trabaja como chofer”, comentaron.
Fundación Las Rosas acogerá este miércoles a la señora Fresia (65), en Hogar de #LaSerena. Ella sufre avanzado Alzheimer y tiene que estar todo en una micro, pues su pareja no tiene con quién dejarla, mientras trabaja como chofer. https://t.co/QHuTCFt93Z pic.twitter.com/6JX5NAJRnK
— Fundación Las Rosas (@FundLasRosas) 6 de noviembre de 2018
GESTIÓN DEL CUPO.
Pablo Elgueta, director regional del Servicio Nacional del Adulto Mayor (Senama), precisó a Radio Mistral que tomaron conocimiento del caso a finales de septiembre y comenzaron a realizar las gestiones para ofrecerles ayuda.
“Este ingreso implica que tenga los cuidados que realmente requiere y que don Mario pueda trabajar en mejores condiciones (…) la señora Fresia estará de manera permanente en el hogar, pero su pareja la puede ir a visitar o ella también podrá salir de la fundación y estar en su casa los fines de semana, eso tenemos que coordinarlo bien”, dijo.
Por su parte Leonardo González, director técnico del Hogar La Visitación de María, detalló que luego de recibir el informe del Senama, solicitaron a don Mario los papeles necesarios como para ingresar a una persona al hogar.
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“Él trae la documentación la última semana de septiembre y estábamos a la espera del cupo porque el hogar tiene capacidad para 98 residentes pero siempre está lleno y tenemos una tremenda lista de espera (…) ahora se nos abrió un cupo, lo que lamentablemente sucede cuando fallece una persona, por eso ya estamos listos para que ingrese la señora Fresia”, explicó.
González recordó además que los adultos mayores que son recibidos en la institución se quedan a vivir allí.
“Nosotros recibimos personas que están en situación de vulnerabilidad con pensiones de menos de 200 mil pesos que idealmente no tengan familia o como en este caso, que no hay quien más cuide a la señora, ya que don Mario tiene que trabajar porque su pensión no le alcanza para vivir”, agregó.
Una vez que ingresan, la fundación es un respaldo para las familias, pero no se hacen cargo de todo el costo, pues el gasto mensual para cuidar a un residente asciende a 750 mil pesos. Por esta razón se realizan campañas de recolección de fondos.
TRANQUILIDAD PARA DON MARIO.
Desde su domicilio, Mario Núñez manifestó sentirse más tranquilo al saber que va a poder trabajar sin la preocupación de que le pase algo a su señora, mientras que Fresia estará mucho mejor en el hogar.
98 Residentes es la capacidad del Hogar La Visitación de María, perteneciente a la Fundación Las Rosas
“Ha sido bastante difícil porque cuando trabajo tengo que estar preocupado tanto de ella, como de la conducción y de los pasajeros, pero también me acostumbré a estar así, a mirar al lado y verla en el asiento sentada. Algunas veces me hace pasar rabias, pero yo sé que no es su culpa, sino de su consciente que está malo (…) pero bueno, a mí me tocó asumir todo esto y lo hago como un hombre realmente”, expresó.
Recordó que pidió ayuda en varias instituciones antes de dar a conocer su historia a El Día, pero ninguna avanzó.
“Yo me entregué a ella y voy a seguir haciéndolo hasta que pueda. Ahora que logré esto me siento tranquilo, siento mucha felicidad pero a la vez me da pena, aunque sé que todo esto es por su bien”, resaltó. 6101i